TRATAMIENTO PSICOLOGICO

¿QUE ES LA TERAPIA COGNITIVA Y CONDUCTUAL?

Los psicólogos en el BIO-BEHAVIORAL INSTITUTE están formados como terapeutas conductuales y cognitivos entre otras áreas de pericia. La Terapia Conductual enseña a los pacientes cómo reducir, controlar o eliminar sus conductas desadaptativas. La terapia conductual difiere de otras formas de terapia en que el método de tratamiento ha sido testado experimentalmente y científicamente fue encontrado como efectivo. Enseña métodos y técnicas de cómo cambiar, en lugar de confiar en el conocimiento de aquello que subyace a los problemas. El tratamiento es esencialmente un proceso de aprendizaje. Frecuentemente, el individuo ve resultados de esta terapia a principios del tratamiento.
Mucha gente piensa en la terapia conductual en conexión con el tratamiento de extremo temor y fobias; sin embargo ha sido demostrado que la terapia es beneficiosa también para otros

problemas como el Trastorno de angustia (ataque de pánico), agorafobia, depresión, trastorno obsesivo-compulsivo (TOC), ansiedad y problemas de la infancia y familiares. Existe mucha evidencia que la terapia conductual mejora el funcionamiento químico del cerebro en forma similar a la medicación.
En el instituto se desarrollan programas de terapia conductual intensivos especializados para los trastornos del espectro del TOC (ej. Trastorno Dismórfico Corporal, Hipocondriasis, Tricotilomanía, Síndrome de Gilles de la Tourette, etc.), Trastorno de Angustia, Agorafobia y Abuso Sexual. Los familiares pueden ser entrenados como ayudantes terapéuticos, y trabajar cercanamente con el terapeuta tratante. Cuando sea necesario y factible el terapeuta hará algunas visitas domiciliarias además de las visitas en el consultorio.
El intensivo programa de terapia conductual es un servicio únicamente provisto por este Instituto.
La Terapia Cognitiva está basada en la teoría de que las reacciones emocionales extremas son el resultado de creencias erróneas. La meta es educar al paciente a crear las habilidades necesarias para identificar y cambiar esas creencias erróneas reemplazándolas por unas más lógicas.
El resultado es una manera más balanceada y moderada de verse a sí mismo, a los problemas de la vida, y al mundo, produciendo respuestas emocionales más positivas y conductas más efectivas. Lectura y "deberes" son herramientas empleadas en este proceso de re-educación. La resolución de problemas, y la creación de patrones de conducta adaptativos también son utilizados. En combinación con la terapia conductual, o sola, la terapia cognitiva puede incrementar la motivación para seguir el tratamiento y mejorar las relaciones familiares, la propia imagen, el autocontrol, y las habilidades necesarias para hacer frente a las adversidades y dificultades de la vida. Puede ser más efectiva en el tratamiento de la depresión, de los trastornos de ansiedad, de las adicciones y de las relaciones angustiantes (ej. problemas conyugales, de trabajo, de padres/hijos).


¿QUE ES LA EXPOSICION Y PREVENCION DE LAS RESPUESTAS (EPR)?

Nuestro instituto es uno de los pocos lugares en el país que se especializa en tratamientos intensivos de EPR para Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC) y trastornos relacionados. EPR, es un método de terapia coonductual sistemático y estructurado que ha sido testado experimentalmente y científicamente, mostrando ser efectivo para el TOC y otros trastornos. Abarca 2 componentes. El primer componente es la "exposición" y el segundo es la "prevención de respuesta". La exposición consiste en una gradual exposición a varias situaciones que son tenidas y evitadas debido al TOC. Al mismo tiempo, se les indica a los pacientes que eviten comprometerse en sus compulsiones, lo cual es denominado "prevención de la respuesta".
La racionalidad científica de la EPR es la confrontación continua a situaciones temidas lo que eventualmente conduce a una disminución de la ansiedad. Durante una sesión de exposición, los pacientes son activamente invitados a participar en situaciones temidas por ellos, mientras resisten sus impulsos a realizar sus rituales.
Los pacientes que experimentan un nivel inicial de ansiedad alto, que decrece durante los ejercicios de exposición son los más exitosos. Los pacientes NUNCA son invitados a participar en situaciones de exposición que puedan ser perjudiciales para ellos. La terapia siempre progresa de acuerdo al ritmo del paciente. El beneficio de la EPR es que los pacientes frecuentemente ven cambios positivos rápidamente. Se les indica también a los pacientes a hacer ejercicios de EPR independientemente del terapeuta, a manera de tarea y con el propósito de hacer frente a cualquier síntoma que pueda aparecer.