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¿CÓMO EVITAR EL ABURRIMIENTO EN LA PAREJA?


¿CÓMO EVITAR EL ABURRIMIENTO EN LA PAREJA?


Es necesario modificar actitudes y cambiar algunas pautas externas

En las parejas que llevan conviviendo un cierto tiempo, cabe la posibilidad de que la rutina de lo establecido diariamente convierta la relación en una inercia carente de sorpresas. Los días pasan sin que nada nuevo suceda. Existe la sensación de que ya todo está dicho. El sexo ha dejado de ser una novedad, los silencios terminan pesando y se cree tener un conocimiento exhaustivo de las reacciones del otro. Sin duda, el aburrimiento amenaza con convertirse en el tercer compañero de viaje.

Pero el aburrimiento se puede evitar. Como emoción negativa, nos lleva a percibir la vida vacía y sin sentido; como actitud personal, conduce al bloqueo mental y paraliza la posibilidad de emprender iniciativas para salir de una situación rutinaria. Aunque hay personas con tendencia a convertir el aburrimiento en un estado de ánimo permanente, por lo general, estar aburrido es una sensación esporádica, relacionada con la apatía y la pobreza de vida afectiva y social en determinado momento. En cualquiera de los casos, el aburrimiento nubla las perspectivas de futuro, reduce las relaciones personales y disminuye el interés por el entorno. Por ello, conviene combatirlo. Lo harán con menos ganas las personas que se han establecido en la rutina y en un estilo de vida ritual que, al menos en apariencia, les proporciona seguridad y les evita riesgos. Esta actitud individual pudiera perjudicar, o beneficiar si así se quiere, a esa persona. Pero cuando se vive en pareja es muy posible que genere conflictos, personales y de pareja.

La relación individual con el aburrimiento

El aburrimiento es consecuencia de la falta de motivación. La motivación puede ser interior o exterior. Si es interior se identifica con los planes y proyectos, los gustos y aficiones de la persona, sus principios e inspiraciones profundas que mueven a la acción. Si es exterior, se trata más bien de estímulos o condicionamientos presentes en el entorno, las personas o las circunstancias que nos rodean.

Cuando existe motivación interior y exterior, el resultado final será positivo y satisfactorio. Si hay motivación interior pero el entorno no favorece, el individuo puede moverse en la búsqueda de sus objetivos, pero trabajosamente, y puede justificarse en ello para rendirse y no intentar; aunque si se esfuerza puede incluso cambiar y superar la situación que le era adversa. Si hay motivación desde fuera, pero falta el dinamismo interno, el individuo se mueve muy a su pesar y el movimiento suele ser de poca calidad y corta duración. Pero el entorno se puede convertir en algo verdaderamente atrayente para cambiar la actitud interna y cambiar la apatía por entusiasmo. Cuando faltan ambas motivaciones, el aburrimiento será una realidad inminente. Se puede caer en la total abulia, el sinsentido y hasta la depresión.

La pareja y el aburrimiento

Cuando ambas partes de una pareja gozan de dinamismo personal, se puede decir que, aunque las circunstancias repetitivas de la vida en pareja induzcan a la rutina, existe la posibilidad de que a base de comunicación y diálogo auténtico se introduzcan variables que hagan la convivencia más amena y llevadera.

Si uno de los dos carece de dinamismo, se convierte en un peso para la pareja que intentará tirar de la otra persona procurando iniciativas nuevas que funcionarán en un primer momento, pero por el esfuerzo extra que implican de la parte motivada, acabará por ser desgastante y terminará por rendirse y dejar de intentar.

En el caso de que ninguno de los dos posea el entusiasmo suficiente, la vida en pareja se convierte en una coexistencia tolerada que se caracteriza por compartir la satisfacción de las necesidades básicas para seguir viviendo de una manera aparentemente digna, pero evidentemente tediosa.
Ocurre muchas veces que, sin palabras, se establece una especie de acuerdo para vivir aburridamente juntos el resto de sus vidas, que más que promesa de un alentador proyecto de vida, parece más una condena; alguno de los dos, o los dos, buscan fuera la novedad, los estímulos que les devuelven las ilusiones y las ganas de vivir. No tiene que ser un amante. A veces es el trabajo, otras serán nuevas amistades no compartidas con la pareja; nuevos o viejos pasatiempos individuales, aficiones o adicciones. Es como si se experimentase que la auténtica vida, al menos la más estimulante, está fuera de la pareja.

Muchas veces, cuando no se soporta más el tedio y sin haberse producido situaciones extremas, la pareja se disuelve.

¿Cómo combatir el aburrimiento en la pareja?

En primer lugar, tiene que haber interés en combatirlo, en que se suavice la rutina y se reestablezca el entusiasmo por la convivencia. Los escépticos suelen ser poco dispuestos a los intentos por cambiar, bien porque cuando lo han intentado no ha funcionado, bien porque no quieren hacer cambios en su persona con la excusa de que la otra parte tampoco va a cambiar.

Para evitar el aburrimiento y asegurarse una mejor calidad de la convivencia, es necesario:

Modificar las actitudes interiores

* Partir de la idea de que cada persona es un mar de misterios, que debe ir auto descubriendo. La vida en pareja se convierte entonces en una gran aventura que me garantiza cada día nuevos y deslumbrantes descubrimientos de lo que el otro es.
* Es preciso que cada uno de los dos crea firmemente que “a su edad” es posible cambiar.

* Es necesario que cada cual crea en su propia potencialidad, conocerla, valorarla.
* Es imprescindible que cada cual crea que la otra persona también es capaz de muchas cosas, aunque hasta el momento no lo haya demostrado.
* Es vital que cada cual redescubra en su interior cualidades escondidas que seguramente tiene y aún no se han manifestado.
* Puede ser incluso interesante acudir a ayudas externas profesionales para ayudarse en ese proceso de redescubrir la valía personal.

Alterar algunas circunstancias externas

* Hay que arriesgarse a que pasen cosas nuevas, probablemente no sujetas a un control total. El anecdotario de lo inesperado es lo que llena la vida de bellos recuerdos.
* Dejar que las sorpresas tengan un papel en la vida diaria, por muy pequeñas que sean, satisfacen a quien es objeto y a quien las procura.
* Establecer nuevos escenarios. Visitar lugares diferentes juntos, aunque sea una vez al año. Cuando no se puede materialmente, a veces la imaginación ayuda.
* Compartir nuevas relaciones, amigos y pasatiempos en común, participar de eventos culturales y artísticos. Cultivando aficiones nuevas.
* Para todo ello es necesario un cierto grado de valentía, de perder el miedo al ridículo, al control social y aceptar la posibilidad de que algunos de los nuevos intentos sean un fracaso, porque será un fracaso de ambos.
* Ser creativo e inventivo, proponiendo siempre, rompiendo esquemas. Sin dejar perder la capacidad de asombr

Cuando una pareja se involucra en este tipo de cambios, tanto en la actitud personal como en la modificación de las circunstancias y los hábitos, es imprescindible hablar sobre lo que se está intentando lograr con el fin de valorar el proceso, conocer cómo vive cada cual y estimar si es necesario rectificar o introducir otra serie de variables. Y de la misma manera que se valora el proceso conjunto, valorar el cambio individual. Para ellos debe existir el consenso de que cada cual tenga una cierta vida propia que procure una convivencia serena. Que dos personas se quieran supone, entre otras muchas cosas, la habilidad para crear espacios que faciliten que la otra persona sea ella misma, que tenga su propio espacio no compartido.
http://www.apoyomatrimonial.com/Reflexiones/aburrimiento_pareja.html

Consejos para la pareja


Consejos para la pareja
Hay muchos consejos para la pareja. De hecho, ya hemos abordado algunos de estos temas en Crisis de la pareja y Buscar pareja. Aquí damos consejos para mantener una excelente relación duradera a largo plazo.

1. Comunicación. La buena comunicación es esencial. Esto significa la importancia de ser capaz en todo momento de escuchar abiertamente, hablar claro y con sinceridad e interpretar correctamente otros signos de comunicación no verbal (enfado, cansancio, preocupación, distanciamiento, irritación, ilusión, entusiasmo...)

2. Apoyo inequívoco. Esto significa una disposición total a apoyar todo lo que es bueno para tu pareja. Esperando y apoyando su éxitos y máximos logros.

3. Autoestima. Para ser un excelente compañero, primero debes preocuparte de estar bien contigo mismo. Preocúpate de tus necesidades de todo tipo: espirituales, emocionales, físicas, mentales.. y mejora como ser humano todo lo que esté en tu mano.

pareja4. Capacidad para perdonar. En un larga relación siempre se cometen fallos en la vida de la pareja. No importa el amor que se sienta, algunas veces estaremos enfadados, heridos, resentidos acerca de algo que el otro ha hecho o no ha hecho. Estar siempre dispuesto y preparado para pedir perdón es esencial para la estabilidad y salud de la relación de la pareja a largo plazo.

5. Amor sincero. Es uno de los fundamentos indispensables de una relación sólida. Esto será un buen "seguro" para soportar otras "inclemencias" en la vida de la pareja.

6. Igualdad. Compartir las obligaciones y los beneficios en régimen de equidad en todo lo que ocurra dentro de la relación de la pareja: retos, responsabilidades, elogios... Ser pareja significa compartir una vida juntos en todas sus facetas y hacer espacio para que la pareja haga sus propias contribuciones.

7. Flexibilidad. El tiempo y las circunstancias nos cambiarán y por tanto es importante ser lo suficientemente flexible time para adaptarnos y evolucionar. Es esencial, sin embargo, saber que no cambiarás tus principios (valores, compromisos) o en el camino que la pareja debe andar conjuntamente.

8. Compromiso. En el mundo actual es frecuente enfrentarse continuamente a múltiples prioridades y responsabilidades. Es fácil para una relación actual olvidar la importancia de mantener una relación de pareja como la prioridad más importante, lo que requiere un compromiso contigo mismo en términos de tiempo, energía y dedicación.

9. Ser positivo. Una persona que piensa negativamente hace la convivencia de la pareja mucho más difícil. Pensar en positivo crea un buen clima en cualquier relación humana, y la relación de pareja no es una excepción.

10. Haz una relación divertida. Intenta sorprender a tu pareja. La vida es muy larga hazla grata y divertida. Ten tiempo, paciencia e interés para sorprender a tu pareja. Juega, viaja, ríe, llora y vive la vida todo lo intensamente que puedas con ella.

11. Sexualidad. No caigas en la monotonía y en la apatía. Aunque esté presente una amor sincero y verdadero, la pareja hará bien en cuidar, mimar, desarrollar, mejorar, todo lo relacionado con su vida sexual.

12. Hijos. Los hijos deben servir para unir y no desunir. Educa y contempla a tus hijos desde la perspectiva de la pareja. Trabaja en la misma dirección y siempre trata de reforzar el papel de tu pareja ante tus hijos.

13. Afrontar conjuntamente los problemas. Hemos encontrado multitud de fuentes de problemas en la pareja (ver Pareja problemas). Intenta dar una solución rápida y eficaz conforme vayan viniendo...

Cómo renovar su pareja y resistirse a la infidelidad


fuente:http://www.enplenitud.com
Cómo renovar su pareja y resistirse a la infidelidad
Ama a su pareja, pero otra persona ha comenzado a llamar su atención. Está en usted tomar una decisión, pero antes piense si su pareja actual no merece otra chance...

En este artículo, describiremos los tipos más comunes de relación, y describiremos los Cinco Acuerdos necesarios para crear una relación de pareja sana.

Muchos de los acuerdos son para las relaciones monógamas, pero son también aplicables a otras clases de relaciones. Lo que podrá ver aquí, son los acuerdos específicos que le ayudarán a recrear una relación más sana, sin importar qué tipo de relación usted elija.

Existen diversos tipos de relaciones, que pueden ser graficadas con la "Brújula de las relaciones". No es que uno sea mejor que el otro; en todo caso, somos nosotros quienes debemos elegir cuál es el que mejor funciona para nuestra propia situación:

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En el oeste se encuentra la monogamia / matrimonio, que también incluye una relación de mutua y amplia confianza.
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En el norte se encuentra la relación más abierta, que es cuando la pareja elige compartir un hogar juntos pero tener al mismo tiempo otras relaciones que pueden ser heterosexuales o bisexuales, con personas solas o con parejas.
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En el este está el celibato, no la abstinencia. El celibato significa celebrarse a sí mismo, para saber cuál es el orgasmo propio de su propio cuerpo. La abstinencia sería privarse de realizar cualquier tipo de masturbación o acto de placer hacia uno mismo.
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En el sur está la relación de tríada. Esto es cuando dos individuos de un sexo y un individuo del sexo opuesto, deciden crear una relación sexual con las parejas que ambos comparten, es decir dos hombres y una mujer o dos mujeres y un hombre. Sus encuentros sexuales pueden ser heterosexuales o bisexuales. Una tríada puede también tener preferencias por homosexuales, o tres individuos de la misma preferencia sexual, que confíen en este tipo de relación.
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En el Centro de la “Brújula de las Relaciones” se encuentran la persona con múltiples relaciones pero sin compromiso con ninguna. Aquí elegimos estar con más de una persona, porque a menudo una pareja sabe, como ejemplo simbólico, cómo recrear el mejor clímax, otra conoce la mejor forma de estimulación sexual, y una tercera sabe cómo relacionarse de formas distintas. Es decir, hay algo que puede ser aprendido de cada tipo pareja.

Todas las relaciones necesitan el mismo tiempo, energía, y cuidado que le damos a muchos de nuestros negocios. Si tratáramos a nuestros esposos y amantes con el mismo respeto que tratamos a nuestros socios de negocio, nuestras relaciones serían mucho más placenteras. Observemos los Cinco Acuerdos que mejorarían cualquier relación, y, específicamente las monogámicas (recuerde que deben ser firmados por ambas parte de la pareja).

Los Cinco Acuerdos de la pareja feliz

Primer Acuerdo:

Sostendré con intimidad, junto con este hombre o mujer, cuidándonos el uno del otro, el mismo fuego encendido. Si no cuido o considero sagradas estas proposiciones, violaré esta ley.

Si me detengo demasiado en el pasado, o estoy demasiado concentrado en el futuro, tendré sensaciones de culpabilidad / culpa / vergüenza, lo que serán señales de peligro, que significaran que estoy lastimando tanto mi propios ser interior como el de mi pareja, es decir el alma y espíritu de ambos.


Por lo tanto, si continúo con esa energía negativa, dejaré de cuidar la relación y mantener la intimidad, y romperé el contrato de la relación (esto podría darse si se esta teniendo un affaire amoroso más fuerte con otra persona).

Segundo Acuerdo:

Cada uno debe aceptar al otro como es. Esto hace del amor un acto de energía. Usted no puede intentar hacer que todos los demás cambien para satisfacer sus necesidades. Si no puedo aceptar que mi pareja nunca va a cambiar en ciertas cosas, no debo estar con él o ella.

Para hacer que este acuerdo funcione, es necesario dejar atrás todas las limitaciones y prejuicios. La pareja entonces debe ser interdependiente, no co-dependiente.

Posiblemente usted querrá que su pareja tenga libertad y pueda crecer, por lo que no debe refrenarlo (por supuesto, si no existe algo que le lastime muy directamente), y sí honrar sus acciones. Pero esto no significa que a usted tengan que gustarle todas esas acciones.

Tercer Acuerdo:

Deje que el pasado se vaya totalmente. El pasado se debe tener en cuenta sólo cuando es muy necesario. No debe haber ninguna expectativa de que, rememorándolo, algo del pasado cambie.

Sí podemos, en cambio, observar nuestro patrón de conducta para ver si podemos intentar cambiarlo, si es que somos lo suficientemente listos como para hacerlo. Si es así, trabajaremos juntos en ello. Cuando se haga este acuerdo, se incurrirá definitivamente en un karma.

Recuerde, no se puede hacer nada sobre el pasado, sino sólo aprender de él. Si no puedo cambiarlo, todo lo que puedo hacer entonces debe ser cambiar mi actitud y manejarme de otra manera.

Cuarto Acuerdo:

La lealtad es la buena voluntad para perdonarse las transgresiones, porque se tiene un acuerdo mutuo de honrarse a sí mismos y al crecimiento y desarrollo propio lo mejor posible.

Este es el medio para estar abiertos sexualmente, en la intimidad, con un sentido de aventura con uno mismo, de explorar abiertamente la sexualidad de cada miembro de la pareja desde la perspectiva de la curiosidad y el aprendizaje, que sólo pude darle una pareja (su pareja) apasionada.

No debe existir ninguna limitación sexual con su pareja monogámica. La santidad de una relación se puede romper solamente con el intento voluntario de lastimarse el uno al otro.

Quinto Acuerdo:

La Cláusula de Integridad es una necesidad de la relación basada en las siguientes cualidades: salud, esperanza, felicidad, humor y armonía.

Significa que juntos recolectarán el aprendizaje de todo esto, que sólo podrá ser enseñado por su pareja.

También significa que si tiene integridad, debe estar dispuesto a aceptar otras opciones para el crecimiento mutuo, y poder soportar que su pareja esté haciendo algo que está bloqueando sus crecimientos.

Eso significa que usted tiene buena voluntad para dejar a su pareja experimentar la vida. Usted puede decirle "pienso que puede suceder esto si tú haces esto", pero no intentar detenerlo en su búsqueda.

Usted debe dejar a su pareja ser responsable de sus propias decisiones y experimentar las consecuencias de ellas. Y necesita permanecer en el centro de su propio círculo, como un guerrero. Un guerrero nunca siente el efecto de una persona, tiempo, lugar, o situación.

Uno de los problemas más importantes de las relaciones monogámicas, es cuando nos encontramos atraídos hacia algún otro. El deseo de tener un affaire puede abrumar y un porcentaje muy alto de las personas engaña a sus parejas. ¿Qué hacer frente a esta situación?

Primero, cada miembro de la pareja debe acordar tomarse un tiempo profundo de introspección para intentar ver cuánto le ha dado y da su pareja, antes de tomar una decisión. Recuerde que a quien más se conoce es a la propia pareja. Esto significa mirar profundamente a sí mismo y a su pareja antes de tomar alguna decisión al respecto.

Existe una ilusión de seguridad en una relación monogámica. La seguridad otorga la satisfacción personal. La seguridad es cuando la primera medida a tomar es juntarse con su pareja en una fuerte y férrea relación para darse confianza mutua, y poder confiar en que ambos pueden sentirse protegidos.

Pero recuerde que la única cosa constante en el universo es el cambio y el cambio es inevitable. Las relaciones permanecen sanas y vibrantes cuando están al límite. Usted solo no puede hacer funcionar una relación, pero sí poner todo lo mejor de su parte.

La monogamia es una de las opciones más difíciles -pero con más recompensas- que puede tener una relación, ya que así se consiguen resolver todas las necesidades a partir de una sola persona.

En la pareja monogámica, nunca se reprimen las necesidades emocionales, mentales, físicas, espirituales o sexuales. Se puede hablar de lo “indecible” y se puede pedir todo lo que se necesita y desea. Y cuando usted da a su pareja, usted también recibe.

Una hormona -y no Cupido- podría ser la responsable.


http://news.bbc.co.uk/hi/spanish/science/newsid_3487000/3487847.stm
Amor, de Caravaggio.
Una hormona -y no Cupido- podría ser la responsable.

Es culpa de una hormona.

Todo aquello que tiene que ver con el amor, desde el maternal hasta el curioso hecho de que algunos logren permanecer felices por décadas con la misma pareja, o que otros sean incapaces de jamás forjar una relación duradera, es culpa de una hormona.

Sí. Al parecer, las cosas del amor no son tan caprichosas como aparentan.

Según el experto en el cerebro de la Universidad de Edimburgo, Gareth Leng, la hormona oxitocina ayuda a forjar lazos permanentes entre amantes tras la primera oleada de emoción.

La hormona actúa "cambiando las conexiones" de los miles de millones de circuitos cerebrales.

Comportamiento maternal

Al explicar cómo se enamora el cerebro, Leng señala que la oxitocina ayuda a afianzar el vínculo entre una madre y su bebé, y se produce tanto durante un parto como un orgasmo.
El Beso, de Rodin.
Un interruptor central abre nuevos patrones de interacción en momentos cruciales.

Lo que hace es funcionar como un "interruptor central" en el cerebro, que abre nuevos patrones de interacción entre las células nerviosas.

Pero, al explicar por qué algunos cerebros no se enamoran, Leng le da una excusa fisiológica a los tantos (y tantas) aficionados al principio de una relación y detractores del "mañana".

Y es que quienes tienen menos receptores cerebrales de los que se necesitan para recibir la oxitocina pueden tener dificultades al tratar de establecer lazos permanentes con su pareja.

En serio

Varias investigaciones han descubierto que la hormona, que es producida en grandes cantidades por el cerebro durante el parto y cuando hay actividad sexual, es importante para incitar el comportamiento maternal en los animales.

Ratón de campo
Cómo una sola exposición a la oxitocina -por prolongada que sea- puede producir tales cambios de conducta, no sabemos, pero estamos tratando de encontrar la respuesta.
Profesor Gareth Leng

Su papel crucial en la vinculación sexual fue observada por científicos estadounidenses que estudiaban las costumbres de los ratones de pradera.

Leng explica que "los ratones de pradera tienen una sola pareja toda la vida, y ese lazo se establece durante 48 horas de intensa actividad sexual que es también la primera experiencia sexual".

"Durante ese período, grandes cantidades de oxitocina son producidos en el cerebro", agrega. "Los ratones de pradera tienen receptores de oxitocina en diferentes partes del cerebro y los científicos descubrieron que si bloquean esos receptores, no se establece ese vínculo en las hembras".

Aún no está claro cómo una sola exposición a la oxitocina -por prolongada que sea- puede producir tan profundos cambios de comportamiento, pero se está investigando.

"Comprender el proceso es esencial para entender cómo las drogas pueden influenciar el genio y el comportamiento -para bien o para mal", concluye Leng.

Del enamoramiento al amor


http://www.hoymujer.com/amor-y-sexo/enamoramiento,amor,101529,11,2009.html

Del enamoramiento al amor

Isabel Menéndez

Del enamoramiento al amor

Autor: M. NIEBLA

Cuánto tiempo dura una pasión? ¿Por qué se rompen algunas parejas tras las primeras decepciones? ¿En que se diferencia el enamoramiento del amor? Elsa llevaba cinco años enamorada. Cinco años enferma de una tontería que no le había dejado darse cuenta de cómo era su marido. No entendía qué había pasado para que ya no le gustara. Lo mismo que al principio le atraía, ahora le parecía molesto. ¿Qué le estaba pasando?

Lo había conocido en la calle. Ella se cayó y Alberto fue a su encuentro y le preguntó si se había hecho daño y cómo se sentía. A Elsa dejó de dolerle el alma. Llevaba toda la vida esperando que un hombre le preguntara cómo se sentía. Fue un flechazo. Se miraron y, sin saber cómo, Elsa acabó en casa de Alberto. Él le puso una venda no sólo en su tobillo, sino también en su corazón. Diez meses después planeaban su boda.

Palabras y silencios

Alberto era médico. Se interesaba mucho por sus pacientes, pero era poco hablador. Esto, que al principio había cautivado a Elsa, ahora le molestaba. Le reprochaba que no le hablara de sus cosas, pero no veía el valor de sus silencios. Él sabía escucharla, algo que ella nunca había sentido cuando hablaba con su padre. Elsa era la menor de tres hermanas. En una psicoterapia comprendió que había tratado de calmar con Alberto la carencia afectiva que había sentido hacia su padre, que nunca se había interesado por sus preocupaciones. La actitud del marido señalaba aún más lo que el padre no había podido hacer. Cuando pudo aceptar las carencias paternas y llegar a quererle como era, dejo de recriminar a Alberto lo que no le daba y supo reconocer lo que sí le ofrecía: escucha y atención. Claro que para ello también tuvo que reconocer lo que ella podía ofrecerle y lo que no.

En una nube

El éxtasis que siente el enamorado se debe a la ilusión de sentirse pleno. Se imagina que nada le falta, que todas sus carencias están cubiertas. Se siente en una nube, en un mundo donde todo lo que le interesa está a su alcance. Puede perder la voluntad junto a su amado: pierde el sentido crítico y se somete a él. Freud comparó el enamoramiento con la sugestión hipnótica. La percepción de la realidad es distorsionada por la imagen ideal que el enamorado proyecta sobre el objeto de su devoción. ¿Dónde queda él ante una persona tan magnífica, tan ideal? Por lo general se siente inferior, a disposición de su amor. Este estado provoca una sobreestimación de la persona amada y un empobrecimiento del “yo”. La energía vital se halla focalizada en el otro. Ya nada importa, sólo él o ella. Los amantes crean un mundo propio y sólo él les interesa.

La transformación de la pasión en un amor duradero requiere profundos cambios internos. El que vive una pasión niega los defectos y las carencias; los protagonistas del amor reconocen las debilidades del otro y le quieren por ellas. La pasión nos hace altivos; el amor, humildes. La primera excluye todo lo demás; el segundo incluye lo que es enriquecedor. La pasión es rápida y el amor se logra día a día. Pero es preciso que en la pareja se hayan aceptado las carencias de ambos.

La vida de pareja es como una planta, que requiere luz, cuidado y paciencia: la luz da el conocimiento de algunas características del amor; el cuidado implica darle el tiempo que necesita; y la paciencia, atención y energía. A veces, tras un flechazo, el amor muere muy rápido. En otras ocasiones, crece. Depende mucho de la manera en que ambos lleven su relación. Ahora bien, para manejarla mejor hay que conocerla.

En el amor es necesario aceptarnos incompletos y limitados. Esto nos facilitará aceptar los límites del otro y así la pareja podrá acompañarse mutuamente y, tras las inevitables decepciones, podrá afrontar los necesarios reajustes que la conduzcan al amor. Si aceptamos que siempre nos faltará algo, quizá lo que no nos falte sea el amor. Habremos dejado atrás la omnipotencia de suponer tenerlo todo cubierto con el amado y no le pediremos más de lo que nos puede dar. El amor es generoso y no espera de la pareja lo imposible. Tiene más en cuenta al otro en su realidad y en sus limitaciones, pero, para que esto se produzca, tenemos que haber aceptado las nuestras.

¿QUÉ PODEMOS HACER?

• Si piensas que el amor no es como antes, pregúntate: ¿Por qué elegí a mi pareja? ¿Cómo la he idealizado? ¿No soporto sus defectos? ¿Cuáles son los míos?

• Valorar las cualidades del otro es lo opuesto a idealizarlo. Reconoce sus cualidades y su subjetividad, no intentes “poseerle”. Esto requiere que aceptes tus dificultades y que no le uses para tapar tus frustraciones.

• Un cierto grado de idealización del otro siempre existe. Si es excesivo, lleva a una decepción, cuando descubres en él lo que tu mirada infantil y exigente había suprimido.

• Si tu autoestima es baja, idealizas al otro para reparar las dificultades de adecuar tu ideal a nuestra realidad. Así, al identificarte con él, reparas imaginariamente tus fallos.

En busca de una relación larga y feliz


Casarse, convivir sin casarse, vivir juntos pero aparte, nunca vivir juntos, da igual. La forma como se articula el amor de pareja se transforma según usos y costumbres, con la idea cada vez más apremiante de nivelar la preservación de la individualidad, de la autonomía, con el anhelo de cariño, afecto y refugio.
Si hay algo que no cambia, es que seguimos queriendo intercambiar amor en un contexto de pareja. Pero aun así, aquello que en un momento dado sentimos que es amor a menudo se acaba fundiendo y dura menos que un caramelo en la puerta de un colegio.
Inspiradas en diversas fuentes de estudiosos del amor y de la pareja, estas son unas pautas que podrían llamarse universales o básicas, sin las cuales las parejas no podrían nacer y gozar de una vida saludable y longeva:

Para empezar bien
• Elegir la pareja de un modo correcto y sensato. Hay que tener en cuenta que somos atraídos por muchas razones. Puede ser que una persona nos recuerde a alguien del pasado, que nos cubra de regalos y nos haga sentir importantes. Es recomendable elegir una pareja de la misma forma que se valora a un amigo: tener en cuenta el carácter, la personalidad, los valores, la generosidad de espíritu, la relación entre lo que dice y lo que hace y su relación con otras personas.
• Conocer la idea del otro sobre las relaciones. En nuestro tiempo existe mucha diversidad de conceptos e ideas divergentes sobre las relaciones. Sería básico tener las mismas ideas al respecto.
• No confundir atracción física y compatibilidad sexual con amor. Aunque parezca un lugar común, al principio de las relaciones es muy fácil equivocarse.
• Conocer las propias necesidades y hacerlas saber al otro. No esperar que el otro las adivine. Si se ocultan las necesidades, estas actúan como una agenda oculta que puede generar resentimientos y rabia si no acaban siendo cubiertas. La honestidad es la base de la intimidad.

Para mantener una relación saludable
• Considerar el respeto como actitud primordial. Tanto en el interior como en el exterior de la relación, habría que actuar de modo que la pareja siempre nos pueda respetar. El respeto mutuo es esencial.
• Considerar a la pareja como un equipo. Esto significa ser dos individuos únicos que aportan activos y perspectivas distintos. El valor de un equipo se apuntala en las diferencias.
• Gestionar con inteligencia las diferencias; esta es la clave del éxito. Los desacuerdos no son los que hunden las relaciones. Lo que sí las destruyen son los insultos y la hostilidad. Todas las parejas tienen conflictos de intereses. Sólo sobreviven las que saben negociarlos. No se debe confundir ignorar el conflicto con la paz.
• No dar nada por supuesto. Si hay algo que no se entiende del otro, no dudar en preguntar, hablar, explorar, cerciorarse. No reaccionar antes de hacerlo.
• Resolver los problemas en el momento que surgen. No dejar que se acumulen resentimientos. Estos se transforman en defensas de uno contra el otro convirtiéndolos en extraños e incluso en enemigos.
• Cada pareja crea actualmente sus propios roles. Estos ya no son los heredados por la cultura. Por esta razón hay que negociar y renegociar constantemente cada acto para mantenerse fluidos y preparados para todas las nuevas situaciones.
• Escuchar al otro de modo muy atento. No dar por sentado que ya se le conoce. Saber sus preocupaciones y quejas sin juzgarlo. Darle espacio para que se abra en confidencias. Tratar de ver las situaciones también desde la perspectiva del otro, con empatía.
• Luchar por mantener la cercanía entre los dos. Cuando esta se pierde, la pareja se distancia y existe el riesgo de que se busque en otras personas esta intimidad.
• Estar atento al crecimiento de la intimidad entre los dos. Esta se nutre de honestidad y apertura, de confiarse los miedos, preocupaciones y tristezas así como las esperanzas y los sueños.
• Intentar no irse a dormir enfadados. Tratar de acercarse con algo de ternura.
• Disculparse mucho, sin orgullo. Todos cometemos errores. Toda pareja que funciona utiliza muchas formas de compensación por los errores.
• Mantener la dependencia de la pareja en un nivel moderado. La excesiva dependencia del otro para las propias necesidades es una causa de infelicidad para ambos.
• Conservar el autorrespeto y la autoestima. Es más fácil para los demás estar con alguien que se aprecia a sí mismo.
• Alimentar la relación introduciendo intereses provenientes de fuera de esta. Cuantas más pasiones tenga una persona en su vida, más tendrá para compartir. No es realista esperar que una sola persona cubra todas nuestras necesidades.
• Colaborar como actitud permanente. Compartir responsabilidades. No olvidar que la relación de pareja es un dar y recibir constante. No es un amor incondicional.

Para sobrellevar los bajones.
• Aceptar y reconocer que una relación tiene sus subidas y bajadas, no siempre está en estado de felicidad perenne. Resolver conjuntamente los malos momentos fortalece la pareja.
• Aprender de una mala relación mirándola como un reflejo de las propias actitudes. No limitarse a escapar de una relación deteriorada, sino también tratar de entender que parte de nosotros es responsable de su final. Intentar cambiar uno mismo antes de cambiar de pareja para no repetir los problemas con la nueva.
• El amor no es algo permanente y fijo. Es un sentimiento que puede crecer o morir, según cómo tratamos y somos tratados. La pareja no está asentada en un amor incondicional. Los dos son responsables de su cuidado y alimento por medio de un amor activo y atento al día a día.


Actitudes clave para una buena relación de pareja
1. Prestar total atención al otro.
2. Conocer bien y darse a conocer.
3. Respetarse mutuamente.
4. Discriminar entre lo aceptable y lo no aceptable.
5. Negociar las diferencias día a día.
6. Compartir responsabilidades.
7. Disculparse con frecuencia.
8. Responsabilizarse de mantener activo el amor.
9. Cumplir el compromiso bilateral de la pareja.
10. Pedir lo que se necesita.

"Inteligencia erótica" de Esther Perel.: obsesiones amor


foro.http://www.fobiasocial.net
fuente:

Otra cosa que se me ocurre es a raíz de un libro que he leído hace poco y que se llama "Inteligencia erótica" de Esther Perel. Os lo recomiendo ya que os abrirán los ojos sobre cosas que normalmente nadie habla o no sabe la explicación.Trata sobre el tema de por qué se acaba la pasión en las parejas, se sienten menos enamoradas el primer día. O por qué los cabrones seducen más y levantan más pasiones que los buenos chicos. Por qué el sexo con tu marido y en tu familia es soso o directamente no existe, y con un amante o una aventura es la bomba etc... Trata el caso de parejas que se quieren pero que sin embargo no se desean, no tienen sexo y ellas piensan que no se quieren aunque no quieren dejarlo tampoco. También habla de un hombre que las relaciones le duraban 6 meses, porque al cabo de ese tiempo veía que la pasión se enfriaba y el lo interpretaba como que no estaba realmente enamorado. Me recuerda lo que contáis por aquí.

Esta autora defiende la idea de que la afectividad (el ser el mejor amigo de tu pareja, tenerle cariño, apreciarle, respetarle, convivir etc...) y el deseo (verle atractivo, deseo sexual, pasión sentirse "enamorada") se autoexcluyen mutuamente en nuestra cultura. Lo expresa con la frase de que el amor es el mayor antiafrodisíaco que existe. Ella supone que es por un tema cultural.
Nosotros vivimos en una cultura que defiende los valores románticos y democráticos, y así entendemos las relaciones o pensamos que deben construirse sobre esos valores. Esta necesidad es producto de nuestra mente racional y superior. Y funciona bien en el ámbito de la afectividad y la relación personal.
Sin embargo, la atracción, el deseo sexual y esa sensación de sentirse enamorada pertenecen a un plano mucho más antiguo y primitivo, más emocional. De los tiempos en que vivíamos en la selva y tener relaciones sexuales para perpetuar la especie con el más fuerte era cuestión de vida o muerte. Es de nuestra parte salvaje y animal. El deseo, al atracción fatal y el sexo, no podemos entenderlo como algo descafeinado, acaramelado ni democrático porque entonces pierde su esencia misma. Nuestro error es querer introducir aquellos valores democráticos y románticos en este ámbito.

Para recuperar el deseo y la chispa tienes que ser capaz de hacer salir tu parte animal, y ver la parte animal y salvaje de tu pareja. Es necesario volver a reconectarse con eso, sobre todo en el ámbito sexual. En el ámbito personal y de la vida diaria por supuesto que no, sería un error, pero en el sexo sí. Esta autora recomienda a veces para ayudar a esto, durante un tiempo separarse un poco y establecer una cierta distancia, dejar un poco de independencia a tu pareja. No estar tan pendiente de todo ni encima. Ni que lo estén de ti tampoco. Entrenarse en ver también a tu pareja no solo como un amigo majo, sino también como con esa parte de animal salvaje que todos tenemos. Y eso hará recuperar la chispa un poco.

También habla de que parece que cuando se tienen hijos vida familiar etc... es un rollo y adios atracción y deseo. Y para nada. Es también cultural.

Bueno yo os recomiendo que os compréis el libro. Creo que puede beneficiar a muchas parejas y contribuir a acabar con la cultura de los cuernos, la falta de deseo, y que los cabrones liguen tanto jeje.

Saludos

relacion de pareja


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No existe ninguna fórmula ni teoría universal respecto a las uniones duraderas. Pero sí existen ciertas claves que toda pareja que quiera perdurar debe respetar.

Casi todos los libros sobre parejas que funcionan, escritos por psicólogos y consejeros matrimoniales, acaban citando una serie de ingredientes indispensables en ellas. Te resumimos esos factores en diez claves que toda pareja debería cumplir si quiere sobrevivir al paso de los años y a la rutina.


Saber si tú y tu actual pareja cumplen la mayoría o fallan en muchos de estos pilares, te permitirá hacer una previsión de futuro sobre tu relación y ponerle remedio si aún estás a tiempo.

1. Comunicación: el ingrediente estrella

Aunque lo hayas oído mil veces, no deja de ser cierto. Es imposible que una pareja funcione o ambos miembros se sientan felices con la relación si no existe una buena comunicación entre ellos.

Pero comunicarse no se refiere a hablar mucho, sino a poder expresarle a nuestra pareja nuestros sentimientos, inquietudes, proyectos…, y obtener un “feedback” por su parte. Si existe una buena comunicación es fácil resolver los problemas que van surgiendo.

2. Escuchar: la otra cara de la moneda

Es tan importante como ser capaces de hablar y comunicarnos. Si tú hablas sin parar pero cuando él quiere contarte algo suyo (¡aunque sea sobre fútbol!) enseguida cambias de tema, estás fallando en un punto muy importante. Y no se trata de mantenerse callado y oír lo que el otro dice, sino de escucharle y tratar de entenderle.

Tu pareja debe saber que puede contarte cualquier cosa porque tú le vas a prestar toda tu atención. Saber escucharlo te ayudará a comunicarse mejor, a crear lazos especiales de complicidad entre ustedes y a saber qué quiere, qué necesita o qué preocupa al otro.

3. Ser comprensivos: Ponerse en su lugar

Antes de juzgar una situación, por muy grave o absurda que te parezca, intenta ponerte en su lugar, tratar de averiguar qué siente, cómo piensa, por qué se ha comportado así. Nadie tiene nunca la razón absoluta y siempre hay muchas versiones para la misma historia.

Tu pareja no puede ni debe comportarse igual que tú; enfadarte por todo lo que hace sin tratar de entenderlo o intentar cambiarlo es un error. Aunque debes tener cierta afinidad, no tienen por qué pensar igual. Entender esto los ayudará a ser mucho más comprensivos el uno con el otro, más tolerantes y justos.

4. Tolerancia: Libertad bien entendida

Debes ser tolerante con tu pareja siempre que su comportamiento o actitud sea honesta o no te haga daño física o emocionalmente. Este es uno de los puntos más difíciles de llevar a cabo, ya que normalmente, aunque la queramos para nosotros, nos cuesta mucho darle libertad a nuestra pareja. Cada miembro de la pareja tiene derecho a sus momentos de independencia e intimidad, a desarrollar sus proyectos, aficiones o ilusiones sin sentirse coartado por el otro.

Aunque te parezca lo contrario, controlar a tu pareja, querer estar siempre con ella o prohibirle hacer ciertas cosas simplemente por inseguridad, es lo que más puede alejarte de ella. Una pareja no supone un contrato de esclavitud sino de colaboración.

La postura más generosa y beneficiosa para la relación es apoyar a la pareja de un modo constructivo en su desarrollo individual. Es importante que sientas que existe entre ustedes un tipo de unión que va más allá de lo material

5. Desarrollo personal, no fusional

Es muy importante entender que aunque sean pareja siguen siendo personas independientes, con una personalidad y una vida propias. Deben madurar y desarrollarse de forma individual para que exista un equilibrio en la pareja; ninguno debe vivir a la sombra del otro o ser totalmente dependiente de él. Por supuesto, este desarrollo debe ser paralelo a su desarrollo y madurez como pareja.

Para conseguirlo es fundamental que tengan unos objetivos comunes en la vida: casa, trabajo, hijos, viajes, vida en pareja, etc. Además, es importante que sientan que existe entre ustedes un tipo de unión que va más allá de lo material, una conexión espiritual, una forma común de sentir la vida y la relación.

Al principio el enamoramiento y la pasión proporcionan esta unión especial; después hace falta algo más. Esto os permitirá que no haya un desequilibrio entre sus intereses individuales y en común.

6. Tener vida social

Aunque al principio sólo les apetezca estar juntos y solos, es fundamental que tengan vida social. Pero no sólo de forma individual sino como pareja. Esto significa que tengan amistades comunes con las que puedan hacer planes. Esto también puede hacerse extensivo a la familia.

Salir y divertirse juntos los hará sentir bien y le dará una pizca de emoción a su vida de pareja. La vida social también se refiere, por supuesto, a la que además tengan cada uno por su cuenta.

Es importante que ambos puedan seguir disfrutando de sus propios amigos solos, por supuesto, de una forma honesta y sana. Para ello es fundamental tener confianza en la pareja, el siguiente punto de la lista.

7. Confianza: Evita el desamor

Una relación sin confianza mutua no va a ninguna parte. No una confianza ciega sino racional. Si no tenemos motivos reales o probados para desconfiar, agobiar a nuestra pareja con nuestros miedos o inseguridades la apartará de nosotros. La falta de confianza enrarece las relaciones y hace difícil la convivencia.

El que es objeto de sospecha o acoso suele acabar desenamorándose porque la actitud de su pareja le impide disfrutar de las cosas más simples; para no crear situaciones incómodas acaba renunciando a muchas cosas. Pero la persona que desconfía también sufre mucho y puede pasar fácilmente del amor a la obsesión. La solución a este problema pasa por la comunicación.

8. Afecto: Después de la pasión

Es imprescindible para que una relación sobreviva. Las carencias afectivas suelen terminar con muchas parejas. El afecto es la demostración del amor, fundamental una vez que el enamoramiento y la pasión empiezan a decaer. Es muy importante tener siempre una actitud cariñosa hacia nuestra pareja y hacerle demostraciones de cariño pese a que lleven mucho tiempo juntos. No sentirse queridas es una de las principales quejas de las mujeres.

El cariño es algo que debe cuidarse cada día, ya que es lo que más fácilmente se pierde con el tiempo y la rutina. Conoces tanto a tu pareja que no crees que necesite tu mimos y caricias. Si no recibimos cariño debemos hacérselo saber a nuestra pareja para ver si se trata de una cuestión de descuido o existe una causa más profunda. Cuando el deseo está inhibido hay que buscarlo y propiciarlo

9. Sexo: La sal de la relación

Que el sexo funcione es un gran punto a favor para que una relación dure, pero tampoco debe serlo todo. Si sólo están para practicar sexo es difícil que su relación llegue a algo más. Es importante que ambos disfruten con las relaciones sexuales y tomen la iniciativa a la hora de mantener relaciones. El sexo, como el cariño, también hay que cuidarlo, no volverse cómodos con el paso del tiempo.

El cansancio, el estrés, los niños y las preocupaciones hacen estragos en la vida sexual de muchas parejas. Cuando el deseo está inhibido hay que buscarlo y propiciarlo, mantener una vida sexual activa es un trabajo y una cuestión de los dos.

10. Amor: Saber dar y recibir

Amar también se aprende. De hecho, es un acto maduro y puede ser muy consciente. En casi todas las parejas suele haber uno que desempeña el rol de amante y otro el de amado. Es muy cómodo dejarse querer, pero no siempre es la postura que más felices nos hace dentro de una relación.

Tan importante es que nuestra pareja nos diga que nos quiere, como poder decirlo nosotros. Hay personas que tienen una enorme capacidad para amar y entregarse y otras a las que les cuesta tanto que llegan a fracasar en sus relaciones aún queriendo a la otra persona.

Via: www.terra.com.mx