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Las obsesiones mezclan rituales y creencias

Son de cualquier tipo e intensidad y acompañan a todas las personas. Descubrir su sentido es la clave para liberarse de ellas.
“¿YO, MANIATICO?” Las causas de las obsesiones compulsivas pueden ser la inseguridad social la incertidumbre generalizada y el estrés.

“Limpiando, siempre limpiando”

“A mí gus­ta que to­do es­té muy lim­pio. Cuan­do lle­gan vi­si­tas y veo que apo­yan el va­so en la me­sa afue­ra del po­sa­va­sos me de­ses­pe­ro. No pue­do es­tar quie­ta, siem­pre ten­go que es­tar lim­pian­do al­go, lo que sea. Mi ma­ri­do siem­pre se que­ja por­que di­ce que pa­re­ce que quie­ro co­rrer a las vi­si­tas”, cuen­ta Mar­ce­la Las­tra.
Se­gún Car­los Lu­na, su ob­se­sión es con el ba­ño, por­que siem­pre que en­tra se fi­ja si la ta­bla es­tá lim­pia. “En al­gu­nas oca­sio­nes y lu­ga­res pue­do ‘con­vi­vir’ con el de­sor­den. En don­de no lo so­por­to es en la co­ci­na. No pue­do co­ci­nar si hay pla­tos y ca­ce­ro­las su­cias o si la me­sa­da es­ta se­miocu­pa­da. Ne­ce­sa­ria­men­te ten­go que or­de­nar to­do y lue­go re­cién co­mien­zo a co­ci­nar. Ade­más, mien­tras lo ha­go voy la­van­do lo que en­su­cio, ti­ran­do los res­tos a la ba­su­ra y lim­pian­do el es­pa­cio en el que apo­yo los ali­men­tos o las fuen­tes”, se­ña­la Mi­riam.
Separó su casa en dos áreas: una segura y otra contaminada
Un problema que afecta a más de 100 millones de personas
De las extravagancias de un sultán insomne
“Hay maníacos del orden que terminan siendo desordenados”
Melvin, un obsesivo que hizo historia
El deber ser como autoexigencia y causante de obsesiones
Monica es “amiga” de un buen número de manías
Manías cotidianas
Las manías desnudan temores y ansiedades


“Dentro de la billetera tengo que tener acomodados todos los billetes por valor, comenzando por los más chicos. Además las imágenes de los próceres deben estar mirando para arriba”, cuenta Juan, licenciado en Relaciones Internacionales.
Cuando de obsesiones se trata, hay algunas que son de lo más pintorescas y acompañan a la persona en diferentes momentos de su vida: antes de dormir, al levantarse, durante el almuerzo o en el trabajo. Pueden aparecer en cualquier circunstancia y lugar.
Los especialistas explican que se trata de pequeños “rituales” que acompañan al sujeto, en los cuales se mezclan temores y hasta supersticiones. “Una obsesión es algo que se introduce en el pensamiento de manera recurrente”, explica Alfredo Ygel, psicoanalista.

“Extrañezas”
Nadie se salva, todos conviven con algunas “extrañezas” que determinan parte de la personalidad. Mientras no se conviertan en un obstáculo para desarrollar las actividades cotidianas y tampoco generen problemas a las personas con las que se convive, entonces todo está dentro de los parámetros de la “normalidad”.
“Hay personas que tienen temor a salir de noche, por ejemplo; eso puede servirles para ser cautelosos, pero si se trata de un temor que no los deja salir de casa, entonces puede derivar en un problema patológico”, agrega el psicoanalista, quien alerta sobre algunos temores que derivan en fobias, las cuales necesitan un tratamiento médico especial. La clave, señala, está en la intensidad de estas obsesiones.

Revisando puertas
Según la Asociación Argentina de Trastornos de Ansiedad (AATA), en el país el 3 % de la población sufre trastornos “obsesivos compulsivos”. Dentro de este grupo están las personas que no pueden ver los objetos fuera de lugar, los que deben revisar que las puertas estén cerradas cientos de veces y quienes siempre se visten comenzando por la cabeza hasta llegar a los pies. Además de las obsesiones compulsivas, están las ansiedades que las sufren, por ejemplo, personas que siempre están preocupadas por algo. Las causas pueden ser: la inseguridad social, la incertidumbre generalizada, la violencia y el estrés. En cuanto al Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC) las estadísticas dicen que afecta por igual a varones y a mujeres y que generalmente se manifiestan en la adolescencia, entre los 11 y 12 años. A nivel mundial, alrededor de un 28 % de la población sufre algún trastorno de ansiedad. Cuando se les pregunta la primera vez todos lo niegan: “¿Obsesiones, yo? No, la verdad que no”. Pero cuando se comienza a indagar un poco más, la mayoría se acuerda de esas pequeñas mañas con las que convive.
“La obsesión tiende a convertirse en un ritual, en algo que hacemos para evitar un mal mayor. Por ejemplo: ‘si salto las baldosas de dos en dos, entonces evitaré que mi madre muera’”, explica Ygel.

Por el mismo camino
Muchas veces las supersticiones se mezclan en estos comportamientos obsesivos de manera inconsciente. Claro que hay obsesiones que son graves y que, según el especialista, “no sueltan al sujeto”.
“Conocí a una persona que cuando iba a algún lugar por un camino, al regreso debía volver por el mismo. Esto era un problema porque si iba en auto, el camino de vuelta no podía hacerlo por las mimas calles porque debía andar a contramano, entonces se volvía caminando”, recuerda.
Para lograr superar estas manías o rituales, especialmente, los que alteran la armonía personal es importante que quienes conviven con la persona no se rían ni se burlen de este comportamiento.
“Lo que hay que descubrir es que sentido tiene para el sujeto ese rito obsesivo, eso lo puede ayudar a liberarse ”, comenta Ygel.

“Los broches deben ser iguales”
“Cuando cuelgo la ropa, los broches que la sostienen deben ser iguales (mismo tipo, misma calidad, mismo color). Otra obsesión es con las llaves de luz en una habitación. Tengo una pieza cuya luz la encienden, indistintamente, dos llaves. Si prendí la luz con una, debo apagarla con la misma. No importa que me quede más lejos que la otra y que, por consiguiente, deba caminar en la oscuridad unos metros; siempre debo apagar la luz desde la misma llave con la que la prendí”, cuenta Santiago. Pero se preocupa por aclarar que lo mismo puede ponerse una remera que se secó sujetada de dos broches distintos o dormir si la luz la apagaron desde la otra llave.
“Cuando me devuelven las remeras lavadas y planchadas automáticamente las pongo debajo de la pila para no ponerme siempre las mismas e ir rotando. Lo mismo hago con los pantalones y las corbatas, los que usé al último van al principio para que pasen varios días hasta que me los vuelva a poner”, asegura Gustavo. “Las camisas van una en cada percha, no me gusta amontonar. Además, soy obsesivo con el planchado de las camisas, me gusta que estén impecables, si no, no me las pongo”, dice Martín.

“El tic tac no me deja dormir”
“Antes de salir de casa reviso que la llave del gas esté cerrada, a veces me ya estoy en la calle y no me acuerdo si la cerré o me da miedo que no haya quedado del todo girada la llave; entonces regreso, no me importa nada”, confiesa Luciana. “No puedo dormir cuando hay ruidos. Sobre todo cuando se trata de sonidos constantes y parejos, por ejemplo, el tic-tac de un reloj o el de un grifo que gotea. Para evitarlos cierro bien todos los grifos y las puertas que den hacia la cocina donde hay un reloj con agujas y en mi dormitorio solo tengo un despertador digital”, comenta la joven.
“Soy obsesivo con la limpieza. Tengo un hijo de 10 años y, cada vez que llego a casa, tengo que levantar todas sus cosas y limpiar el piso, pero jamás camino descalzo”, explica Jorge Fernández. Mientras Celeste, estudiante de Zootecnia, confiesa que tiene varias obsesiones, especialmente, cuando se trata de comida. En primer lugar, el vaso y los cubiertos deben estar a su derecha y la servilleta abajo del plato. Cuando come sandwichs, debe hacerlo siempre desde el borde hacia adentro, y con las mordidas debe ir moldeando la forma de algún animal. Siempre le pide a la persona que está comiendo con ella que adivine qué animal es son.

“Tiene una manía con los rulos”
“No puedo salir sin ponerme un par de aros que combinen con la ropa que llevo puesta. Si salí rápido y me los olvidé, entonces vuelvo a mi casa o me compro otros en el primer negocio que veo”, dice Nélida Linares, quien agrega que otra obsesión que tiene es la adelgazar, aunque para eso necesitaría tener más tiempo libre para hacer gimnasia. “Lo que intento es comprar todo natural y que sea de bajas calorías”, dice.
“No puedo acostarme maquillada. No importa la hora que sea o el cansancio que tenga. No puedo dormirme con los ojos endurecidos por el rimel o con rubor, siento que mi piel no puede respirar”, señala Josefina.
“Tengo una amiga a la que le obsesionan sus rulos. Le gustan, pero no que empiecen desde las raíces del pelo. Para evitarlo se pone toneladas de crema. Para peinarse utiliza peines muy finitos; de esa manera se aplasta los primeros cinco centímetros. Es muy gracioso porque pasa 10 minutos frente al espejo haciendo eso cada vez que tiene que salir”, cuenta Dolores.

“Miro todo el tiempo el reloj”
“Yo miro todo el tiempo el reloj, sin ningún motivo. A veces estoy en mi casa y no tengo ninguna obligación, pero a cada rato voy hasta la cocina para ver qué hora es”, dice Natalia.
Marcela Rosales explica que es “propietaria” de un montón de pequeñas obsesiones, pero la peor tiene que ver con los relojes. “Tengo pánico a que dejen de funcionar por la noche y no me suene la alarma para ir a trabajar. Por eso tengo tres sobre la mesa de luz y, además, programo el celular”, comenta.
“Igual que en la película ‘Mejor, Imposible’ yo tampoco puedo pisar las fisuras de las baldosas mientras camino. A veces me siento un poco ridículo y trato de controlarlo, pero es más fuerte que yo”, dice sonriendo Juan José.
José es actor y cuenta que debe llevar su reloj al baño para calcular que su ducha dure, exactamente, 20 minutos, ni más ni menos.

“Temo perder las llaves”
“Yo me desvivo por el tuneado del auto. Todos los meses tengo que invertir en algo para ponerle; ya tiene escape ‘silens”, vidrios polarizados, entre otras cosas. Para mí es como un hobby”, comenta Lalo.
María Estela Vega dice que tiene un temor recurrente que es el de perder las llaves: “Siempre me toco los bolsillos para ver si las tengo, lo mismo hago cuando salgo a la calle, me fijo en la cartera cientos de veces”.
“Nunca puedo salir de casa sin las llaves, un pañuelo y el celular en el bolsillo. Si me olvido alguna de estas cosas tengo que volver, no puedo dar ni un paso más”, dice Ignacio.
“Yo tengo varias manías, por ejemplo, no puedo dormir con las puertas del ropero abiertas o con la ropa encima de la silla, por lo menos tengo que doblarla si es que no la voy a guardar. Otra cosa que no me gusta es ver la cortina de la bañera corrida, eso me mata”, asegura María Laura García.

las extravagancias de un sultán insomne


De las extravagancias de un sultán insomne
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Análisis. Por Roberto Espinosa - Redacción LA GACETA
Cada vez que se alejaba del oasis, a las pocas leguas le sobrevenía la angustia de que lo hubiesen secado tras su partida, de manera que los beduinos y los camellos morirían de sed. Deshacía entonces el camino con el noble Almanzor. Llegaba al lugar y con alegría constataba que el vergel seguía existiendo. Volvía a partir. Ya en medio de los inmensos médanos lo asaltaba nuevamente la desdichada idea. Trataba de dominar el pensamiento de regresar sobre sus pasos. La sed le trepó por el cuerpo... La agitación lo desbordó. Shahriyar se despertó perturbado. Scheherezade le asentó la cabeza en el pecho y la ternura sosegó el estruendo de latidos. “¿Qué os pasa, amado mío?”, dijo la bella doncella. “Una obsesión me persigue en sueños. Me surge el presentimiento de que unos hombres contaminarán las aguas, cortarán las palmeras y destruirán el oasis. Y cada vez que me voy de él, siento la necesidad de volver para verificar que todo sigue como entonces”, explicó el monarca. Ella supo en ese instante que iban a protagonizar las mil y cincuenta noches.
Se acomodó en los almohadones. Escanció vino tinto para ambos. “Háblame de tus obsesiones, mi hermosa flor”, pidió él. “Ya habrás observado que me baño dos o tres veces por día o me lavo las manos a cada rato... Soy una obsesiva del orden... no entiendo bien por qué hago estas cosas repetitivas; no puedo controlarlas”.
– Es la ansiedad. Son trastornos de la personalidad. Por ejemplo, a mí me atormenta la idea de quedarme justamente sin ideas, sobre todo ante una situación límite. Como quedarse sin respuestas frente a uno mismo y a los demás. Todos los días, cuando me levanto, me imagino inmerso en alguna situación crítica y pienso en cómo debería abordarla.
– Cuentan que en una comarca, hubo un sultán poderoso que soñaba con sobrepasar a Alá. Apenas amanecía se dirigía al gran espejo que había en el baño de su habitación. Se miraba con detenimiento y se decía a sí mismo: “Soy el mejor monarca que ha tenido esta tierra. Todos me aman porque soy un gran hombre. ¡Qué harían los demás sin mí! ¿Qué sería de este pueblo sin mi guía?” Luego se dirigía a su despacho en el palacio donde escuchaba de boca de sus ministros los problemas del reino. Estaba rodeado de espejos. Ni en broma permitía que alguien se sentara en el trono. Cuando nadie lo veía, se sentaba y se paraba, se alejaba un metro y volvía rápidamente a sentarse.
– Seguramente soñaba con atornillarse al poder.
– Efectivamente. Había construido un imperio económico. Los negocios inmobiliarios engrosaban sus arcas. Todas las noches, antes de dormir, repasaba mentalmente cuánto dinero había ganado y si hallaba una diferencia de centavos llamaba inmediatamente a sus ministros para que dieran las explicaciones del caso. Le sobrevenía luego una gran tranquilidad porque no viviría el infierno de los miles de jubilados que cobraban haberes indignos y a los cuales hostigaba incumpliendo una orden de la Justicia.
– Parece que le funcionaba bien la hormona megaloman...
– A veces el insomnio se le volvía intolerante. Entonces entraba y salía sistemáticamente del palacio, abriendo y cerrando la puerta principal como un autómata.
– ¿Y por qué hacía eso?
– Practicaba porque quería entrar por la puerta grande de la historia y opacar la figura del emir Celestino Gelsi que lo atormentaba. Había adiestrado a sus adláteres para que siempre lo complacieran y le dieran la razón. Anhelaba torcerle el brazo a la Justicia y domesticarla. Deseaba reformar por segunda vez la Carta Magna para que los súbditos tuviesen Al Rachid hasta el más allá. “Yo no he prometido en absoluto y vengo a dar una escuela para la gente humilde... a dar educación, trabajo, obras, salud”, discurseaba. En secreto, sus seguidores habían encargado un monumento en su honor.
Scheherezade bebió vino y observó el silencio de Shahriyar. “¿Qué pensáis, amado rey?” “Delirios de grandeza, de inmortalidad. Autoritarismo, soberbia. La caída de un megalómano puede abrir un boquete en los sótanos del absurdo. En ese jardín pantagruélico, de la desmesura, todo es posible.

el blog olvidado


ayer revisando el correo cual no sería mi sorpresa, al ver que blogger me enviaba un email ,preguntándome si quería reclamar un blog del año 2006, por supuesto pinche que si.
extrañada por que ni siquiera recordaba el tener un blog, lo volví a leer con curiosidad, y si era mio eran mis palabras, era el dolor que sentía esos días por el daño que nos había hecho mi cuñado,es el diario de un engaño, de una estafa, de como se rompió una familia, algo que yo nunca hubiese deseado, y el diario de mi sentimiento de culpa, por que fui yo quien le propuse a mi chico, el coger un pequeño negocio propiciando así todo lo que después sucedió, después de seis meses de engaño continuado los dos sin trabajo, y con las deudas hasta el cuello ocurrió el detonante que hizo que cambiase mi anterior obsesión con la rabia, animales, murciélagos etc
estaba tan destrozada animicamente deprimida, y fue tal el estado de shock, que me produjo la nueva obsesión, que se borro todo mi presente, y de repente de un día para otro deje de preocuparme, ya no sentía dolor por lo ocurrido ni me preocupaba, estaba bloqueada esta nueva obsesión ocupaba todas las horas del día y tenia la ansiedad por las nubes, pasaba el día llorando y defendiéndome de mis pensamientos y preguntándole a mi marido,
tu crees que es posible que yo de repente allá cambiado y que no me conozca que piense estas cosas tan tremendas, me extrañaba tanto el haberles perdido el miedo a los murciélagos y a la rabia esta palabra era tabú para mi solo el mencionarla o oírla activaba la obsesión,en estos momentos esta obsesión rabia etc es minima alguna vez viene puede durar un par de dias y desaparece.
ahora se cumplen tres años de la ya no tan nueva obsesión,estoy mejor gracias a el trabajo, que he realizado cara a el publicó y que me ha servido de exposición a mis temores.
y he comprobado con mucho trabajo a el principio y luego ya mas relajada que mis creencias son erroneas, no me he comido a nadie y todo el mundo al que he tratado a quedado contento, ya casi casi no me produce ansiedad el tratar con ancianas ,adolescentes,jóvenes, adultas, y niñas pero las obsesiones están hay en menor medida eso si pero recordándome que no debo bajar la guardia ya que cuando las dominé pueden cambiar por cualquier otra a la que hoy ni siquiera le tengo miedo.
un saludo amatista

La anorexia y bulimia se asocia a ciertos tipos de personalidad




Pocos jóvenes pasan de la insatisfacción a la anorexia
Aumentan trastornos alimentarios entre universitarios
La hospitalización domiciliaria es adecuada en jóvenes anoréxicos
Describen los factores de riesgo que favorecen la anorexia y bulimia
La dieta restrictiva en hidratos de carbono logra más pérdida de peso
El 9% de la población española sufre trastornos alimentarios, según psicólogos
Los casos de anorexia y bulimia resultan cada vez más precoces
Récord local en anorexia y bulimia
Valencia extiende la detección precoz de trastornos alimentarios
Crecen los casos de bulimia y anorexia en Canarias

La anorexia y bulimia se asocia a ciertos tipos de personalidad. Muchos pacientes presentan conductas obsesivas, aunque un trastorno verdadero (TOC) se detecta en el 28 por ciento de anoréxicos y el 30 por ciento de bulímicos, cifras que aumentan en los enfermos que exigen ingreso hospitalario.

Los pacientes con anorexia nerviosa y/o bulimia suelen presentar trastornos de la personalidad, entre los que son más habituales el trastorno por evitación y el trastorno obsesivo compulsivo (TOC). Un estudio sobre 84 anoréxicos nerviosos y 154 bulímicos revela que el 28 por ciento de los primeros y el 30 por ciento de los bulímicos tiene TOC, cifras que ascienden hasta el 40 y el 48 por ciento respectivamente si los enfermos son ingresados, ha señalado el profesor José Toro, del Departamento de Psiquiatría de la Universidad de Barcelona.

Durante su participación en el simposio Avances en fisiopatología y tratamiento de la obesidad, bulimia y anorexia nerviosa, que concluyó ayer en la Fundación Ramón Areces, de Madrid, ha añadido que en los pacientes que presentan el trastorno obsesivo son tres años más jóvenes que los que sólo tienen anorexia o bulimia, y "la conducta obsesiva también se asocia a una duración superior (unos 3 años) del trastorno de la conducta alimentaria (TAC)".

Dado que existe una clara base genética en el TOC, y que no es infrecuente que los pacientes con TAC presenten ese tipo de trastorno, cabe suponer que los jóvenes con antecedentes familiares de TOC tengan un mayor riesgo de anorexia o bulimia, extremo que Toro ha rechazado. Y ha ido más allá al señalar que "la curación es posible aún cuando el paciente presente comorbilidad".

Tratamiento mixto
Cuando en un enfermo coexisten ambos tipos de trastornos, el tratamiento es mixto, aunque "hay que priorizar la corrección del TAC, ya que la desnutrición provoca síntomas obsesivos, con lo que se potencia el TOC. No obstante, en términos generales, cede antes la obsesividad que la anorexia o la bulimia".

El psiquiatra de Barcelona también ha explicado que los pacientes con TAC pueden clasificarse en tres grupos de personalidades: perfeccionistas, hipercontroladas y disreguladas, cuyo predominio varía en anorexia y bulimia. Además, ciertas características clínicas, como el peso o los atracones, también están relacionadas con el tipo de personalidad.

Ha insistido en que la obsesividad está presente en buena parte de esos pacientes, y que es tanto mayor cuanta más patología de la conducta alimentaria haya. No ha obviado señalar que los padres de anoréxicos suelen tener conductas más perfeccionistas.

Javier Salvador, del Departamento de Endocrinología y Nutrición de la Clínica Universitaria de Navarra, y coordinador del simposio, ha insistido en la dificultad que existe para clasificar los TAC, en el sentido de que la incidencia real no se corresponde con la que presenta cada uno de los trastornos claramente definidos. "Esto nos conduce a pensar que, probablemente, tengamos que hacer un esfuerzo para tipificar esos trastornos inespecíficos. En este sentido, desde el punto de vista funcional puede ser muy importante conocer los rasgos de la personalidad".

Frente a estas dudas, Salvador se cuestiona si las alteraciones genéticas pueden tener más relación con los trastornos funcionales de la personalidad que la catalogación del paciente en unas categorías teóricas empleadas para el diagnóstico. "Ello puede tener repercusión desde el punto de vista clasificatorio y, en consecuencia, terapéutico".

Obesidad epidémica
Salvador reconoce el impacto que tienen los TAC, aunque concede prioridad al problema que conlleva la obesidad, entre otras razones "por su altísima prevalencia", que puede ascender hasta el 60 por ciento. Además, "la comorbilidad que se deriva de la obesidad es más peligrosa y atenta más contra la calidad de vida y las expectativas de vida".

El endocrinólogo ha destacado la aparición de fármacos contra la obesidad y ha manifestado su confianza en que pronto aparecerán otros nuevos. En su opinión, la necesidad clínica ha impulsado la investigación para conocer las bases fisiopatológicas de la obesidad. "Esto debe ser así porque si seguimos por el camino actual la obesidad acaparará todo el gasto sanitario de muchos países".

Respecto al deber que tienen los científicos para presionar a las autoridades sanitarias a instaurar políticas que contribuyan a prevenir la obesidad, ha recordado que "a instancias de las sociedades españolas de nutrición y endocrinología, y con el apoyo de un laboratorio farmacéutico, se han lanzado campañas como la de Pierde peso, gana vida ", aunque ha subrayado que es una responsabilidad de toda la sociedad.

Efectos futuros
La anorexia nerviosa conlleva alteraciones durante la enfermedad y a largo plazo, ha recordado Janet Treasure, del Departamento de Psiquiatría del Guys Campus de Londres, en el Reino Unido. Ha destacado que el índice de masa corporal (IMC) y el peso pueden no ser fiables para evaluar el riesgo real del paciente. Por ello, "para hacer una evaluación real hay que hacer una exploración física completa que incluya la temperatura, la tensión arterial (en bipedestación y sentado) y mandar al paciente ponerse en cuclillas y volver a levantarse sin apoyar los brazos, con lo que despistaremos bloqueo periférico".

Los órganos sobre los que más puede incidir la anorexia son el cerebro, los huesos y la capacidad reproductiva. Según Treasure, "la anorexia suele aparecer en una fase crítica del desarrollo cerebral. En los afectados, el cerebro se encoge, y tras la recuperación apreciamos un descenso de la materia gris, pero no de la materia blanca, disminución que persiste en el futuro".

La especialista también ha destacado la pérdida de masa ósea que conlleva la anorexia, pérdida que se recupera con la ganancia de peso y la menstruación. Sobre la reproducción, ha comentado que es más baja en mujeres que han padecido anorexia.


Fuente: Diariomedico.com

Fuente:nutrar

MECANISMOS SEROTONINERGICOS EN EL TRASTORNO OBSESIVO-COMPULSIVO. RELACION CON LA CO-MORBILIDAD. ESTUDIO NEUROENDOCRINO Y DE FLUJO SANGUINEO CEREBRAL


FUENTE:http://www.cibernetia.com
MECANISMOS SEROTONINERGICOS EN EL TRASTORNO OBSESIVO-COMPULSIVO. RELACION CON LA CO-MORBILIDAD. ESTUDIO NEUROENDOCRINO Y DE FLUJO SANGUINEO CEREBRAL.
Autor: LOPEZ IBOR ALCOCER M. INES .

Universidad: COMPLUTENSE DE MADRID.
Centro de lectura: MEDICINA.
Centro de realización: DEPARTAMENTO: PSIQUIATRIA Y PSICOLOGIA MEDICA PROGRAMA DE DOCTORADO: PSIQUIATRIA.

Resumen: LAS INVESTIGACIONES EN EL TOC ESTAN CAMBIANDO MUCHO EN TODO EL MUNDO, CON LA COMBINACION DE PRUEBAS NEUROENDOCRINAS ES POSIBLE QUE SE PUEDA DAR UN PASO MAS EN EL CONOCIMIENTO DE LAS ALTERACIONES NEUROENDOCRINOLOGICAS Y LA LOCALIZACION NEUROANATOMICA DE ESTE TRASTORNO. AL HABERSE DIVIDIDO LOS PACIENTES EN TRES GRUPOS SEGUN LA PSICOPATOLOGIA ASOCIADA SE PUEDEN ESTABLECER DIFERENCIAS DENTRO DEL TRASTORNO OBSESIVO-COMPULSIVO EN FUNCION DE SU COMORBILIDAD. LA INTEGRACION DE LOS DATOS OBTENIDOS DE LAS TECNICAS FUNCIONALES DE IMAGEN CON LOS DATOS OBTENIDOS EN EL TEST DE CMI, CON LOS CONOCIMIENTOS SOBRE LA DISTRIBUCION Y FISIOLOGIA DE LOS RECEPTORES SEROTONINERGICOS, SUGIERE LA EXISTENCIA DE UN CIRCUITO REVERBERANTE EN EL TRASTORNO OBSESIVO-COMPULSIVO, CON UNA FUNCION ALTERADA EN LOS RECEPTORES DE LA SEROTONINA.

ojito con las plantas


fuente:http://www.interelectron.com/psicologia/sexualidad/efectos_secundarios_maca_andina.html

Ultima Noticia sobre la Testosterona, la hormona masculina por excelencia y su
mecanismo regulador

¿Cómo puedo aumentar los niveles de Testosterona?

Posibles efectos secundarios de Tríbulus Terrestris y Maca Andina

VIRILIDAD SÍ, TRASTORNOS MENTALES NO

Muchos de ustedes se preguntaran como es posible que dos plantas 100% Naturales puedan tener efectos secundarios. La cuestión radica en que al ser plantas naturales provenientes de la tierra no poseen, en efecto, ningún efecto perjudicial para nuestro cuerpo pero ATENCIÓN, se preguntaran entonces donde pueden surgir los efectos secundarios? En la Psicología personal.

Esta información es meramente informativa. Maca Andina ante todo es Natural y Buena para la salud si se usa correctamente.

Lea atentamente la información aquí descrita. Le será de utilidad.


Maca Andina y Tribulus Terrestris, las dos plantas más conocidas hasta el momento para el incremento de la Libido (deseo sexual) y energizantes por sus numerosas propiedades pueden influir en nuestra Psicología debido a que al elevar la libido, la energía, las facultades de concentración, las facultades mentales y en el caso de Tribulus Terrestris aumento de la LH, FSH, con el incremento de testosterona en el cuerpo, todos estos incrementos de forma controlada y gradual pueden ser beneficiosos pero...

ATENCIÓN: El incremento excesivo, de golpe, sin control de la libido y de cualquier otra función en nuestro cuerpo conlleva los llamados Efectos Secundarios Psicológicos de estas plantas pudiendo ser mas grabes que los efectos a nivel físico, estomacal. De estos efectos psicológicos nunca se hablan porque la gente se piensa que es "algo normal" o que es parte del tratamiento. Sepa que NO es normal y deben evitarse a toda costa. Estos efectos se traducen en:



Desorden de personalidad

Disforia del Yo, es decir, cambios repentinos y transitorios del estado de animo, tales como sentimiento de pena, angustia, tristeza, malestar psíquico acompañado por sentimientos depresivos, melancolía, pesimismo e insustancialidad.

Inquietud e irritabilidad

Rechazo hacia los seres queridos y trato indiferente o agresivo

Sensación exagerada de introversión

Sensación exagerada de sentirse joven

Excitación mental excesiva, atención desorbitada de todo lo que ocurre a tu al rededor (personas que hablan, ruidos)

Sensación de virilidad y euforia desorbitada

Ideas falsas, pensamientos obsesivos recurrentes

Algunas personas llegan a pensar que alguno de estos "nuevos estados psicológicos" son lo normal y es como funcionan las personas

Y el más grave: La perdida de contacto con la realidad y/o dificultades para diferenciar lo ficticio de lo real.

En estos casos usted está excediendo la toma y debe reducirla o suspenderla inmediatamente!

La causa más frecuente es la idea obsesiva de querer "sentirse hombre" , de que los demás le vean como "prototipo de hombre viril" o de querer tener una mayor potencia sexual para satisfacer a su pareja, esto suele llevar a la ingesta rápida y excesiva de pastillas buscando efectos rápidos y a corto plazo generando como es lógico trastornos de personalidad y otros trastornos.

Si Ustd. en efecto, tiene esa obsesión, tome 1 sola cápsula diaria durante un mes y vaya observando los efectos aunque estos sean lentos, no importa. Nunca busque el llamado "efecto inmediato" poniendo excusas como que si el bote pone que debo tomar 10 cápsulas tengo que tomarlas me afecte como me afecte NO, ya que esto puede ser devastador, afectándonos a nivel psicológico a corto y largo plazo seriamente. Es mejor tardar 1 mes en conseguir la virilidad deseada a conseguirla en 1 semana y a la siguiente tener que pedir cita al psicólogo.

También es frecuente pensar que "yo como soy hombre puedo tomar lo que sea que no me afecta" . Totalmente erróneo. Una persona informada y en el siglo en que vivimos jamás afirmaría tal cosa. Para la toma de pastillas excesivas existen mil excusas, simplemente no caiga en ese error, eso demostrará su inteligencia.

¿Estos problemas psicológicos puedo tenerlos con otras plantas y/o medicamentos?

Sí, sin duda alguna, cualquier producto en dosis elevadas puede hacernos cambiar nuestro humor, y pasar de ser un producto para nuestro bien estar a ser un producto que induzca al rechazo, malhumor, indiferencia, agresividad, etc. Insistimos en que estos efectos NO SON NORMALES.

¿Cómo evitarlo un exceso?

Se debe tener mucho cuidado con las dosis (mgrs.) que se toman ya que aunque el envase de las cápsulas ponga "Tomar 4 cápsulas diarias" en muchos casos es más que suficiente con 1 cápsula al día. La mejor forma es comenzar la toma con 1 sola dosis diaria y a medida que pasan los días ver los efectos que ha surgido. Ello evitará los problemas psicológicos anteriores.

¿A que edad se pueden tener problemas psicológicos con plantas naturales y/o medicamentos?

Dependiendo de la edad y del estado psicológico de cada persona puede afectar o no a la persona. A cualquier edad la persona como ser humano esta expuesta a este tipo de problemas pero sobre todo afectará más fácilmente a aquellas personas en estado de crecimiento y desarrollo y personas que adquieren estos productos naturales buscando no solo sus efectos beneficiosos para el cuerpo sino buscando además algún tipo de efecto psicológico. Pongamos algunos ejemplos:

Personas extrovertidas que desean volverse introvertidas y viceversa

Personas que buscan en las pastillas un efecto de alivio frente a un estado de infelicidad

Personas que deseen cambiar su orientación sexual y/o gustos sexuales

Personas que desean vivir en "su mundo", estas son las mas peligrosas pues toman pastillas con ese objetivo y con el tiempo acarrea mayores problemas psicológicos.

En otros casos, medicamentos antiacné como Dercutane han descrito efectos adversos graves (trastornos psiquiátricos) como depresión, estados bajos de humor, suicidio e intentos de suicidio y trastornos psicóticos como alteración de la personalidad.

Intrusos de la mente: los pensamientos no deseados


Intrusos de la mente: los pensamientos no deseados

http://www.cepvi.com/articulos/pensamiento.shtml

fuente:Copyright © Cepvi.com. Ana Muñoz


A veces los pensamientos parecen tener vida propia y surgen en la mente de imprevisto. En ocasiones son ideas o pensamientos absurdos, que incluso te hacen reír y que descartas al instante, pero otras veces se trata de ideas que rechazamos e incluso de las que nos podemos sentir avergonzados o nos producen temor y extrañeza.




Los pensamientos no deseados son aquellos que consideramos que no deberíamos tener porque violan los códigos éticos, culturales o morales de la sociedad.



Esos pensamientos pueden expresarse en frases, como una voz en nuestra mente, o pueden tener la forma de imágenes mentales, pero tienen en común el hecho de que resultan desagradables. Pueden ser pensamientos relacionados con inflingir daño a otras personas, pensamientos de actos sexuales considerados inmorales, ideas relacionadas con miedos, como la de perder el control y hacer daño a los propios hijos, o simplemente ideas como irte de casa, dejar a tu pareja y tus hijos, hacerte daño a ti mismo, etc.


fuente:http://www.cepvi.com
Sea cual sea el pensamiento, lo cierto es que el ser humano pasa bastante tiempo pensando cosas que preferiría no pensar. A veces, este tipo de ideas van acompañadas de impulsos; es decir, de un deseo de hacer realidad aquello que has pensado.


no obstante, pueden sentirse muy mal por el simple hecho de haber pensado algo así, pueden castigarse a sí mismos haciéndose reproches, considerarse malas personas o tener miedo de perder el control o de volverse locos. Elsa, por ejemplo, tenía imágenes mentales en las que se veía a sí misma haciendo daño a sus hijos, lo cual le resultaba aterrador.

Ella amaba a sus hijos y eran lo más importante para ella, de modo que empezaba a preguntarse si se estaba volviendo loca o si en realidad lo que pasaba es que odiaba a sus hijos sin ser consciente de ello. Pero lo cierto es que no es infrecuente que los padres y madres tengan imágenes mentales relacionadas con el daño a sus hijos, bien inflingido por otras personas, por accidentes o incluso por ellos mismos. Por lo general, es solamente un reflejo de la preocupación por ellos y del miedo que tienen de que llegara a pasarles algo o incluso de lo horrible que sería que se volviesen locos y los dañaran sin querer. Es decir, este pensamiento es más un reflejo del miedo a que algo malo le suceda a alguien a quien amas, que de un deseo de hacerle daño. No obstante, cuando estos pensamientos son interpretados como un deseo de hacer daño, producen una ansiedad intensa que puede llegar a obsesionar a la persona. Esta obsesión hace que dichos pensamientos se vuelvan más frecuentes, entrando en un círculo vicioso difícil de romper.



Luchar contra los pensamientos prohibidos puede fortalecerlos porque los transforma en obsesión. Si te empeñas en que tienes que dejar de pensar en algo, que pensar eso es horrible y que eres una persona despreciable por pensarlo, entonces lo único que haces es centrar tu mente en dicho pensamiento, de modo que acabas haciendo justo lo opuesto de lo que deseas; es decir, no puedes dejar de pensar eso tan "terrible".



Sin embargo, los pensamientos no deseados son universales, aunque los contenidos específicos pueden variar según las diversas culturas. Las fantasías sexuales indeseadas, por ejemplo, suelen implicar actos sexuales que la sociedad considera inapropiados, como violación, infidelidad, incesto, etc.



Algunos investigadores se han centrado en los mecanismos mediante los cuales las personas suprimen estos pensamientos indeseados y los efectos de dicha supresión. Pero también han investigado por qué esos pensamientos se vuelven prohibidos. Algunos estudios sugieren que nuestra vulnerabilidad ante los pensamientos prohibidos es genética y que algunas personas están más predispuestas a ellos. No obstante, las investigaciones también muestran que la mayoría de las personas pueden volverse vulnerables a través de una serie de influencias externas. De hecho, algunos investigadores consideran que nuestro sistema de valores cada vez más permisivo y flexible puede hacernos más vulnerables a este tipo de pensamientos, aunque resulte paradójico, así como menos capaces de manejarlos.

el mal de nuestro dias

fuente:revistafusion.com


Trastornos mentales

Una epidemia silenciosa



Por primera vez la encuesta Nacional de Salud incluye datos relativos a las enfermedades mentales. Uno de cada cinco españoles está en riesgo de sufrir un trastorno de esta índole. A nivel mundial las cifras son preocupantes, según la OMS. Expertos hablan ya de la epidemia silenciosa del siglo XXI.

Texto: Mariló Hidalgo.


Cifras que salen a la luz


El problema no es nuevo. Los datos estaban ahí delante hace tiempo. Un informe de la Dirección General de Farmacia del Ministerio de Sanidad y Consumo reconoce que en sólo cinco años el consumo de ansiolíticos y tranquilizantes ha aumentado en nuestro país casi en un 40% Estos medicamentos se emplean para problemas de ansiedad, fobias, trastornos alimentarios, dolor y otras adicciones. El consumo empieza cada vez a edades más tempranas, infancia y adolescencia. Existen trastornos psicológicos, alteraciones en la vida de las personas que están repercutiendo negativamente en su salud. ¿Qué dimensión tiene todo esto?

Cuatrocientos cincuenta millones de personas en el mundo están aquejadas de algún tipo de enfermedad mental, de los cuales 350 millones padecen depresión. Son datos de la OMS, organismo que prevé que para el año 2020 la depresión sea la causa más importante de incapacitación y muerte después de las enfermedades cardiovasculares.
En España, la última Encuesta Nacional de Salud por primera vez recoge cifras sobre esta patología. Los resultados son preocupantes. El 21,3% de la población mayor de 16 años tiene riesgo de padecer una enfermedad mental. Y este riesgo se incrementa a medida que aumenta la edad. En la población infantil los números no son mejores, ya que el 22,1% de los menores de entre 4 y 15 años presentan problemas de conducta relacionados con la hiperactividad y la socialización. Como decimos, el tema preocupa a las autoridades que ven la necesidad de tomar medidas para intervenir y revertir esta tendencia. Aunque insisten en que de momento se habla de "riesgo", no de "diagnóstico". §



Gritos desesperados


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La salud mental es hoy por hoy uno de los problemas de salud pública más apremiantes a escala mundial. Pero dentro de ello, preocupa especialmente el gran número de suicidios entre personas que padecen enfermedades mentales. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), entre veinte y sesenta millones de personas intentan suicidarse cada año. De ellas, un millón lo consigue. Y más del 90% de esos desenlaces están relacionados con trastornos mentales como la depresión, esquizofrenia o alcoholismo.
Un dato curioso es que las cifras de suicidios aumentan en la medida que crece la economía y el nivel de bienestar de un país. Las autoridades por su parte evitan, en la medida de lo posible, analizar este problema con rigor por temor a generar una alarma social. Carmen Tejedor, psiquiatra especializada en suicidiología en el Hospital Sant Pau de Barcelona, nos comenta que en general se teme hablar de este problema por varias cuestiones. "Por un lado, unos justifican el silencio para evitar un posible contagio de conducta. Otros creen que el suicidio y el intento suicida son decisiones libres, por lo tanto siempre hay culpables o víctimas, cosa cada vez menos aceptada. Todo esto provoca el tabú y silencio social".
Un silencio que la OMS, junto con organizaciones de salud mental de todo el mundo, está dispuesta a romper a través de sus campañas de sensibilización y educación. Al tiempo que exigen a los gobiernos voluntad política firme para poner los medios necesarios que ayuden a erradicar el problema. La alerta está ahí: las enfermedades mentales pueden ser mortales y por tanto, hay que concederles una importancia capital.


Foto: Fusión

El suicidio es la primera causa de defunción entre la población joven. El porcentaje más elevado lo encontramos en los varones entre 15 y 24 años

¿Quién se suicida? Es la primera causa de defunción entre la población joven. El porcentaje más elevado lo encontramos en los varones entre 15 y 24 años (6,7%) y entre 25 y 34 años (11,5%) Las cifras se disparan cuando hablamos de varones mayores. Expertos en gerontología denuncian que cada año se producen en España (www.suicidioprevencion.com) más de mil suicidios de personas mayores de 65 años, principalmente ancianos. Y el porcentaje aumenta cuando hablamos de mayores de 80 años.
Los motivos desencadenantes de una situación así son variados, según el Informe elaborado por la Sociedad Española de Salud Pública y Administración Sanitaria (SESPAS). Se ha comprobado que el riesgo de suicidio aumenta en parados, jubilados y trabajadores irregulares. Esto por lo general deriva en problemas de identidad, pérdida de control, desamparo y depresión. Trastorno este último presente en más de un 65% de los suicidios. No obstante, apunta este documento, aunque la depresión es más común en las mujeres, el suicidio al final es más frecuente en los hombres: son más reacios a consultar su problema, a dialogar y acaban utilizando métodos más efectivos para lograr su objetivo.

En el caso de los jóvenes, aparte de las cifras de los que consuman el suicidio, "lo más llamativo y alarmante, señala la doctora Tejedor, es el aumento exponencial de los intentos de suicidio sobre todo por intoxicaciones medicamentosas voluntarias, seguido de autolesiones -cortes y venoclisis-". Por cada joven español que se ha suicidado, han tenido lugar entre treinta y cincuenta tentativas. ¿Cómo un joven llega a una decisión así?



Es el sentido de la vida lo que da significado y ayuda a dar soporte físico a la existencia de una persona. Sin ello la mente se vuelve frágil

"Hablar de decisión en estos casos es poco adecuado -advierte Tejedor-. La autodestrucción no se decide ‘libremente’, sino que está mediatizada por unos factores de riesgo. En los jóvenes son los trastornos mentales, afectivos y el consumo de tóxicos. En general afectan fundamentalmente todas las situaciones de cambio vital que conlleven pérdidas, rupturas de relaciones significativas, frustraciones profesionales, problemas familiares, etc. La prevención del suicidio comienza por la información objetiva del problema, por sensibilizar a la población y por ofrecer recursos asistenciales adecuados. Concretamente en el Hospital de Sant Pau y el Centro de Psicoterapia de Barcelona, estamos realizando un plan de prevención del suicidio pionero en España con resultados interesantes".
El psicólogo Javier Urra, primer Defensor del Menor, habla de la depresión profunda como principal motivo para llegar a este fatal desenlace, que además afecta de forma distinta a jóvenes y adultos. "En un adulto se traduce en melancolía, en esa incapacidad de subsistir. El joven empieza a no sentirse querido, cree que es la oveja negra de la familia, que no cumple expectativas y que es un fracasado ante sus amigos o en el ámbito escolar. Apenas existen suicidas por cuestiones amorosas entre los jóvenes. Y por último, estoy convencido de que existen suicidios encubiertos. Hay quien se quita la vida con el coche, por ejemplo, aunque es algo que no se llega a demostrar". Al final parece que nos encontramos ante un tema tabú, del que pocos quieren hablar, pero dado el elevado número de suicidios en nuestro país, llega el momento de preguntarnos ¿qué está pasando? ¿qué quieren decirnos? §


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Origen de la "epidemia"


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Aseguran los profesionales que un porcentaje muy elevado de pacientes que acuden a sus consultas en busca de psicoterapia presentan problemas graves que tienen que ver con la falta de sentido de sus vidas. El reconocido psiquiatra y doctor en filosofía Viktor Frankl advertía hace ya unos años que "el deseo de significado se está frustrando a nivel mundial, porque aumenta el número de personas que experimenta un sentimiento de falta de sentido y esto deriva en comportamientos neuróticos con diferentes cuadros sintomáticos: alcoholismo, depresión, obsesión, etc. Los síntomas en estas neurosis, son una manifestación de desviaciones en la voluntad de significado". Es por tanto, el sentido de la vida lo que da significado y ayuda a dar soporte físico a la existencia del ser humano. Sin ello, la mente se vuelve frágil y surge la enfermedad, advierten los expertos."Hablamos de una necesidad específica que en mayor o menor grado, está presente en todos los seres humanos, -apunta la psiquiatra Maribel Rodríguez-. Y este sentido no es el mismo para todas las personas. Cada uno ha de hallarlo en función de sus propias circunstancias y en función de sus propios objetivos en la vida y sus posibilidades. Cada uno ha de encontrar aquello que para él da un significado a su vida. Se trata de una búsqueda personal, no puede hacerlo otro. No hay respuestas estándar. Aunque haya elementos comunes -escalas de valores-, cada uno ha de llegar a su propia solución por sí mismo y debe encontrarla en la vida misma".

Estamos inmersos en un sistema que ha conseguido proyectar un ideal de vida que no está al alcance de todos. El que no es capaz de imitarlo acaba sintiendo frustración

¿Qué da sentido a nuestra vida? Muchas de las personas que sufren enfermedades mentales hablan más bien de lo que no da sentido a la vida. Y en ello, aunque no se puede generalizar, sí hay una serie de líneas comunes. Hablamos por ejemplo de la dimensión social y la importancia que tiene para el individuo la sociedad en la que vive. Una sociedad que fomenta la competencia, el egoísmo, el éxito a partir del dinero. Una forma de vida acelerada, deshumanizada donde todo parece tener precio y donde la búsqueda del placer como único fin, conduce a la búsqueda de poder para sobrevivir. Estamos inmersos en un sistema que ha conseguido proyectar un ideal de vida que no está al alcance de todos. El que no es capaz de imitarlo, acaba sintiendo frustración, falta de confianza en sí mismo, de motivación, soledad, etc. El individuo se da cuenta de que cuanto más tiene más insatisfecho se encuentra. ¿Consecuencia? Cortocircuito. Trastornos mentales que cada vez empiezan a edades más tempranas. El poner toda la energía en el "tener" -cuantas más cosas mejor- y dejar a un lado el "ser", está generando muchos problemas como nos recuerda el filósofo y teólogo, Leonardo Boff: "El hombre no funciona sólo en base a expectativas externas. La vida interior representa en estos momentos una de las dimensiones más olvidadas de la humanidad y esto está generando muchos problemas que aún no se identifican como tales. Urge rescatarla porque en ella se encuentra nuestro punto de equilibrio, es lo que realmente aporta una calidad de vida. Interior significa profundidad y ese interior emerge cuando el ser humano se detiene, calla, comienza a mirar dentro de sí y a pensar seriamente. Cuando se plantea cuestiones decisivas como ¿qué sentido tiene mi vida y todo este universo de cosas que me rodea? ¿Hay vida más allá de la vida? ¿Por qué estoy en este planeta tan hermoso pero tan maltratado? ¿Quién ofrece respuestas?... La vida interior no es monopolio de las religiones. Es una dimensión de lo humano. Pero es universal. Está en todos los tiempos y culturas. Vida interior es escuchar voces y movimientos que vienen de dentro. Es lo que nos habla de lo que realmente cuenta en nuestra vida, de aquello que es decisivo y que no puede ser delegado en nadie. El efecto más inmediato de esta vida interior es una energía que permite encarar los problemas cotidianos sin agitaciones. Con serenidad, con profundidad".

"La vida interior es una de las dimensiones más olvidadas de la humanidad y esto está generando muchos problemas que aún no se consideran como tales"

(Leonardo Boff. Filósofo y Teólogo)

Estamos atravesando un tiempo de cambio que nos afecta no sólo a nosotros sino a todo nuestro entorno. En paralelo y a juzgar por lo hasta aquí expuesto, coincide con una profunda crisis de valores provocada por una fuerte ruptura entre la necesidad interna del ser humano y lo que vive fuera. En cierta forma el individuo "ha perdido el Norte", se ha "desconectado" de sí mismo, del entorno, de los demás... y pide ayuda. La farmacología en estos casos poco puede hacer. Negar el problema no es la solución. Pensar que no depende de nosotros sólo conduce al inmovilismo. La tercera opción es volver a "conectarnos" y para ello debemos empezar por nuestro entorno. No estamos solos. Vivimos interrelacionados con los demás y con el mundo que nos rodea. Somos una red -seamos conscientes o no de ella-, que funciona sin depender de nosotros. "La persona es una unidad de varias dimensiones: biológica, psicológica, espiritual y social", recuerda la psiquiatra Maribel Rodríguez. Y no se puede separar una de las demás. Partir de esta unidad ayuda al equilibrio global".
Más de 1.200 estudios de psicología publicados en los últimos diez años -el 90% de ellos realizados en EEUU-, relacionan esa dimensión de vida interior del hombre con la salud. La creencia en algo superior, en las personas que nos rodean, parece ser un elemento que ayuda a mantener el equilibrio mental y potencia la eficacia del sistema inmunitario humano frente a las distintas enfermedades, desde el cáncer hasta las cardiovasculares. §


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El ordenador central


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Si hablamos de salud mental tenemos que referirnos al ordenador central: el cerebro. Una especie de universo en pequeño donde miles de neuronas extienden sus brazos y se relacionan a través de pequeñas chispas eléctricas. Así es como viaja la información que recogen nuestros sentidos y luego es interpretada por cada individuo, construyendo con ello su realidad. El cerebro tiene la capacidad tanto de captar información de lo que ocurre en el interior de nuestro cuerpo como fuera de él. Y aún más. Los investigadores de la Universidad de Pennsylvania, Andrew Newberg y Eugene D’Aquilli, aseguran haber encontrado en el cerebro el circuito de la religiosidad del hombre. Este órgano estaría preparado biológicamente para mantener relación con lo que pueda existir oculto más allá del universo físico. Ello ha dado lugar a una nueva disciplina que denominan neuroteología, según la cual Dios habría dejado huellas de su presencia en el cerebro del hombre para que puedan llegar a conocerle y sientan la necesidad de llegar hasta él. Una realidad de la que ya nos hablaba hace tiempo la Mecánica Cuántica y que ahora la ciencia está empezando a vislumbrar.
No existen dos cerebros iguales -"Cada mente es un mundo"- ni por tanto, dos concepciones del mundo que se parezcan. Pero sí hay un debate común a todos los seres humanos desde el principio de los tiempos: Quién soy y qué sentido tiene mi existencia. Hay quien sugiere que en el fondo somos seres espirituales viviendo una experiencia humana. Un interesante camino por recorrer. §





El sentido de la vida y salud mental


"La búsqueda del sentido de la vida es mirar al centro del corazón del hombre"

Hablamos de salud mental con una especialista en la materia que sin duda nos aporta una visión más profunda del problema de la que reflejan las estadísticas. Maribel Rodríguez, psiquiatra y profesora en la Facultad de Medicina de la Universidad CEU-San Pablo contesta a nuestras preguntas.

-¿Qué es la salud mental?
-La salud mental sería un estado de armonía interior o psíquica, además de la ausencia de trastornos o alteraciones psicológicas, que alteran la vida de una persona o de quienes le rodean. Aunque "salud mental" es un término que actualmente me resulta un tanto limitado, prefiero hablar de "salud integral", pues la persona es una unidad de varias dimensiones: la biológica, la psicológica, la espiritual y la social. Me resulta artificial separar o disociar una sola de las dimensiones y alejarla de las demás y cada vez me parece más importante la idea de la unificación, pues eso ayuda al equilibrio global y de cada una de las partes.

-¿Por qué se ha convertido en uno de los problemas de salud pública más apremiantes a nivel mundial? (La última Encuesta Nacional de Salud también habla de este riesgo).
-El tema de la salud mental se ha ido convirtiendo en un problema de salud pública apremiante por varios factores. El primero tiene que ver con una mayor sensibilidad hacia estos temas dentro del ámbito de la ciencia, lo que lleva a hacer más estudios que detectan problemas psíquicos y, por lo tanto se tienen en consideración con más frecuencia. El segundo puede tener que ver con un menor pudor a hablar de la vida anímica de las personas y por lo tanto, a que el individuo que tiene un malestar subjetivo lo exprese con más facilidad y pida ayuda. El tercero puede deberse a que hay demasiados cambios y presiones en la vida de las personas, que resultan difíciles de asimilar. Y por último, señalo un factor que me parece básico y fundamental en todo esto, que sería la cuestión de cómo las personas ven la vida globalmente, de cómo se dan cuenta de su sentido o de cuáles son las estructuras de significado con las que viven. Antaño, estas estructuras de significados nos venían dadas desde fuera, por una identidad cultural, una religión, una familia estable, etc. Hoy en día, cada uno tiene que apañarse por sí mismo para encontrar su propio camino, careciendo de mapas o puntos de referencia o habiéndolos perdido o no fiándose de ellos, y sin tener muchas veces criterios ajenos ni propios para diferenciar lo verdadero de lo falso, la verdadera luz de los falsos brillos que confunden y nos hacen perdernos por caminos erróneos. Y si nos perdemos, perdemos el norte y es más fácil que peligre la armonía interior y por lo tanto, la salud psíquica.

-La puerta para solucionar este tipo de problemas se ha demostrado que no está fuera -farmacología- sino dentro del propio individuo. ¿Cómo volver a "conectar" ese complejo sistema que es nuestra mente?
-No me parece que establecer una dicotomía dentro-fuera, ayude a encontrar soluciones; pues establece un dualismo en el que se puede perder alguna de las dimensiones de la persona. Es cierto que la farmacología no es la solución, pero puede aliviar el sufrimiento de personas con trastornos mentales severos, que sin ella no podrían vivir, por ejemplo, fuera de una institución. A veces, esa farmacología puede servir de muleta para seguir adelante, aunque quien sale adelante es uno mismo, siempre que haya un "uno mismo" que cumpla unos mínimos para poderse articular y caminar. El decir, que la solución "está dentro" es en parte cierto, pero en parte no lo es, pues tiene su "peligro". Me explico. En mi experiencia, he podido comprobar que tanto las personas que sólo buscan soluciones fuera, como quienes sólo las buscan dentro, se pueden perder. Los primeros, en que los demás les arreglen la vida, en buscar una solución o un medicamento mágico, etc. Los segundos, si se meten demasiado hacia dentro, pueden desconectar del mundo ajeno y caer en un narcisismo o vanidad desmedidas que les hagan aislarse de otros, crear un mundo aparte en el que pierdan sensibilidad por entrar en relación con los otros o comprender sus propias dinámicas internas. Me parece que el equilibrio entre la conexión con el mundo de los demás y el mundo interno nos da pistas de que vamos por buen camino y de que nuestro "complejo sistema" se está "conectando". Se trata una vez más de integrar dimensiones y de tratar cada alteración al nivel que le corresponde, sea biológico, psíquico, espiritual, social, interno o externo.

-En uno de tus artículos hablas de la necesidad de encontrar el sentido de la vida para poder enfrentarnos al mundo que nos rodea. Tras el fracaso de muchas religiones que intentaron monopolizar esta cuestión, ¿cómo crees que debe enfrentarse el hombre a esta "asignatura pendiente"?
-Lo primero es que no considero que las religiones hayan fracasado por monopolizar la cuestión del sentido, sino que han sido mal utilizadas y distorsionadas por algunos seres humanos, que se han perdido, entre otras cosas, en sus delirios de poder o de vanidad personal. Con respecto a la cuestión planteada, me parece difícil responder en sólo unas líneas así que intentaré hacer una primera aproximación.

"No debemos de caminar solos, sino atrevernos a dialogar y compartir nuestras inquietudes con compañeros de camino y a la vez escuchar a los que antes buscaron y encontraron"

Me parece que el primer paso para enfrentarse a una "asignatura pendiente" es, en primer lugar, plantearse que es posible superarla. Para ello hay que ponerse a estudiar, ¿no? Así que lo primero que me atrevo a afirmar, es que buscar sentido es posible y buscar es el primer paso para encontrarlo. Si empezamos a caminar, y ponemos la actitud adecuada de escucha y apertura ante la realidad, que se nos pone de manifiesto en nuestra vida, podremos empezar a ver cosas que nos sirven de pista. Pero me parece que no debemos caminar solos, sino atrevernos a dialogar y compartir nuestras inquietudes con compañeros de camino y a la vez escuchar a los que antes buscaron y encontraron. Pero para aprovechar la experiencia de búsqueda, además, ya he señalado la necesidad de encontrar la actitud adecuada. Por eso, aparte de nuestra mirada hacia el interior, viene bien el diálogo con la realidad y con quienes saben más que nosotros de la vida, de los errores y aciertos del ser humano, de cara a aprender a cómo encontrar la actitud adecuada para mirar o para limpiar y pulir nuestra lente que puede estar empañada o deformada.

-El número de suicidios aumenta. Es la primera causa de defunción entre la población joven. ¿Cuál es el mensaje?
-Parece que el mensaje que nos está transmitiendo este hecho tan tremendo, tiene que ver con que la gente no aguanta ni el tipo de vida que lleva ni la idea que se ha hecho de sí misma y cae en la desesperación y busca salidas. El suicidio representa con frecuencia la busqueda de salidas, para muchos que piensan en él o intentan quitarse la vida. Esa busqueda se apoya en la falsa creencia de que morir es terminar el sufrimiento, pero no se dan cuenta de que lo que termina así son las oportunidades, y de que detrás de ellos queda una herida muy profunda en las personas que les creen, aunque normalmente no sean conscientes de ello. Esto se une con frecuencia a que diversas circunstancias llevan a la ruptura interior e incluso al desarrollo de patologías psiquiátricas que impiden ver la realidad con claridad. Por otra parte, a la gente joven no se la ha entrenado en tolerancia a la frustración. Se les sobreproteje y esto les hace más frágiles e inseguros ante las inevitables adversidades de la vida.
Quizás, desde nuestra parte, lo que tenemos que hacer es recibir este grito de desgarro y desesperación y buscar cómo prevenirlo prestando atención a los jóvenes, dialogando con ellos, pero sobre todo amándoles y acogiéndoles en su dolor. Parte de ese amor es enseñarles los límites, la realidad del sufrimiento, la necesidad de esforzarse para fortalecerse y a la vez inspirarles confianza en que cada vez pueden hacerlo mejor.

-Eres psiquiatra, pero por lo que comentas, siempre te ha gustado lanzar una mirada más allá de los límites establecidos habitualmente. ¿Qué has encontrado al otro lado?
-Me parece que el otro lado es precisamente en el que están los que se pierden, se desesperan o sufren, porque están al otro lado de sí mismos. Yo, más que al "otro lado" he tratado de retomar las raíces del propio lado, las raíces de mí misma o de los demás. Es decir que, por ejemplo, la búsqueda del sentido de la vida o de lo más genuino del hombre, es mirar más allá de lo establecido habitualmente, es mirar al centro del corazón del hombre y por tanto a "mi lado" y buscar conectar con lo esencial de lo real que para mí es lo que integra y une todas las dimensiones de las que ya he hablado, aunque tengo la sensación de que la dimensión unificadora e inspiradora es la dimensión espiritual, que está en el centro del corazón del hombre y le pone en contacto con la realidad más fundamental, que es el amor incondicional. Ese amor incondicional arraigado en lo espiritual, es nada más y nada menos lo que me he encontrado en el mejor lado en el que podía buscar. §




Salud mental en cifras

- 450 millones de personas en el mundo sufren algún tipo de inestabilidad mental.
- 350 millones padecen depresión.
- 50 millones son afectados por la epilepsia.
- 24 millones tienen esquizofrenia.
- Cada año, 1 millón se suicida.
- Entre 20 y 60 millones intentan quitarse la vida.

*Datos de la Organización Mundial de la Salud






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El universo habla


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Hace muy poco los observatorios de investigación solar detectaron una gran actividad en ciertas regiones de la superficie del astro rey. Dicen los científicos que este proceso responde al comienzo de un nuevo ciclo del Sol, en concreto el vigésimo cuarto. También advierten que todo ello afectará a nuestra magnetosfera e incidirá en nuestra salud física y mental.

Estos ciclos de los que hablamos comenzaron a estudiarse hace unos 250 años, cuando se empezaron a observar las manchas solares y su evolución. Buscando una lógica a todo ello se comprobó que al comienzo de cada ciclo -cada uno dura once años-, el número de manchas era escaso, pero a medida que pasaba el tiempo aumentaba hasta llegar a un último estadio donde las manchas alcanzaban su dimensión máxima. Luego se reducían a un mínimo y daba comienzo otro período. Pero ¿qué quiere decir esto y cómo afecta a nuestro planeta?
Los científicos parecen haber encontrado una relación directa entre toda esta actividad y esas oleadas de "viento solar" que llegan hasta nosotros, con múltiples alteraciones en la magnetosfera de la Tierra. Ello provoca tormentas magnéticas que afectan de manera directa a líneas eléctricas, de comunicación, gaseoductos, oleoductos, satélites, clima -tormentas secas con abundante presencia del rayo-, y especialmente inciden en la salud física y mental de las personas. Recordemos que nuestro cuerpo es una máquina bioeléctrica, polarizada, y por tanto toda la actividad electromagnética del entorno nos afecta. Sufrimos cambios en los ritmos biológicos normales, en nuestro sistema nervioso y cardiovascular y especialmente a nivel mental -las neuronas son todo un sistema eléctrico-. En períodos de máxima actividad solar se ha podido determinar que incluso se producen bajas en las defensas inmunitarias de algunos seres vivos.
La ciencia ha dado un paso más y está empezando a interrelacionar hechos importantes ocurridos en el planeta -guerras, avances científicos, espirituales, catástrofes, revoluciones, suicidios-, con estos ciclos de auge de actividad solar.
En estos momentos nos encontraríamos en puertas de un nuevo período que se espera sea más fuerte que todos los anteriores. Los primeros cálculos indican que este vigésimo cuarto ciclo, podría ser entre un 30 y 50% más potente que el pasado y podría causar serios desastres naturales. Aunque el aumento de la actividad eléctrica atmosférica será progresivo, la NASA considera que llegaremos al máximo solar en el año 2012.

Nuestro cuerpo es una máquina bioeléctrica polarizada y, por tanto, toda la actividad electromagnética del entorno nos afecta

Este tipo de pronósticos no son matemáticos -aseguran los expertos-, pero sí hay que recordar que los realizados hasta ahora se han ajustado bastante a lo ocurrido.
Se abren nuevas puertas y aparecen nuevas explicaciones. Esas corrientes energéticas procedentes del Sol estarían influyendo y modelando desde el principio de los tiempos no sólo la vida del planeta sino también nuestra mente y nuestras experiencias como seres humanos. ¿Con qué resultados? El filósofo Richard Tarnas después de treinta años de investigación, recoge en su último libro "Cosmos y Psique" (Atalanta) multitud de acontecimientos históricos y culturales -Revolución Francesa, guerras mundiales, Mayo del 68, la caída de las Torres Gemelas, etc.- así como personajes decisivos para nuestra civilización -Copérnico, Newton, Platón, Leonardo da Vinci, etc.- y los relaciona con movimientos planetarios. "Hay una íntima conexión entre las cosas de los hombres y los movimientos de los astros", aseguró Tarnas durante su visita a nuestro país hace unas semanas. Con abundante documentación producto de sus muchos años de investigación, aporta una mirada distinta a nuestro entorno. Una visión muy necesaria en estos tiempos que corren, insiste el filósofo, "donde reina una profunda insatisfacción y el hombre no es capaz de explicarse de una forma coherente, las grandes cuestiones que le preocupan desde el principio de los tiempos". El Universo se mueve. Los avances de la ciencia nos están demostrando que lo que ocurre "ahí fuera" está relacionado con todo lo que vive el hombre. Formamos una unidad. Entender esto nos hace estar atentos a todo lo que nos llega de ese Universo vivo que, al igual que nosotros, evoluciona. Así podremos entender su lenguaje y vivir en consecuencia. §


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Recomendamos: www.who.int/es/ (OMS) • www.msc.es (Ministerio Sanidad y Consumo) • www.suicidioprevencion.com
• www.leonardoboff.com • www.maribelium.com (Página de Maribel Rodríguez) • www.dsalud.com


Fusión Opina

Hablar de trastornos mentales es hablar del complejo funcionamiento de una "supermáquina", la mente, de la que no se conoce casi nada. Y ésa es la base del problema.
Pero si tenemos en cuenta que la mente está "ubicada" entre dos grandes mundos o niveles de existencia, el físico o externo y el espiritual o interno, y que recibe impactos energéticos de los dos, es más fácil comprender que existan poderosas razones para la existencia de dichos trastornos, ya que ambos mundos cada vez están más en contraposición, sobre todo por el sistema de vida creado por el hombre, que se basa más en el valor de lo externo en detrimento de la búsqueda de los valores espirituales o imperecederos.
Así, toda mente que esté básicamente ocupada en lo externo, tiene grandes posibilidades de sufrir un cortocircuito, porque su diseño original procede del mundo interno así como las energías básicas que la alimentan y la hacen funcionar.
La mente, en realidad, es una "máquina" para que el espíritu pueda crear en los niveles externos, pueda manifestarse, pueda desarrollar su proyecto vital.
Sin esa realidad como base de la existencia, la vida se convierte en un sinsentido, porque nada de lo puramente externo o material contiene suficiente valor o alimento como para satisfacer las necesidades de la mente.
La consecuencia es un creciente vacío interno que conduce a la pérdida total de valoración de todo lo que el mundo externo ofrece. Es entonces cuando hay que buscar dentro lo que fuera no llena. Es entonces cuando la mente tiene que "girar" y mirar hacia su verdadero origen o fuente de alimentación.
El problema es que ese acto necesita Fuerza y Decisión, y a veces se ha desconectado tanto que uno solo no puede hacerlo. §

Epidemia oculta":


fuente:http://www.clarin.com

Epidemia oculta": cada vez hay más consultas por las obsesiones

11:15Mucha gente tiene vergüenza de contarlas, pero está creciendo el pedido de ayuda. Unas 800 mil personas padecen de Trastorno Obsesivo Compulsivo en la Argentina. Para los médicos se trata de una de las patologías más inhabilitantes. Por: Gisele Sousa Dias
Quien haya visto "Mejor, imposible", la película con Jack Nicholson, conocerá una versión moderada de un obsesivo compulsivo. Para contener sus desbordes de ansiedad, Melvin repite rituales: apaga y prende la luz una, dos... cinco veces; tira el jabón cada vez que se lava las manos; lleva cubiertos de plástico al restaurante; enloquece cuando camina porque no "puede" pisar las uniones de las baldosas. En la vida real, cada vez se diagnostican más casos de Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC): "Esclavos de sus pensamientos", los llaman los psiquiatras. Conviven con ellos casi 800 mil argentinos, por eso hablan de una "epidemia oculta".

"El trastorno obsesivo compulsivo se caracteriza por la irrupción de pensamientos incontrolables (obsesiones) que provocan mucha ansiedad. Para neutralizar esas ideas y disminuir el malestar que generan, la persona ejecuta ciertas conductas repetitivas (compulsiones) que cumple como rituales", explica el psiquiatra Enzo Cascardo, coautor del libro "Trastorno obsesivo compulsivo y su espectro".

Entre los obsesivos más frecuentes están los "lavadores y limpiadores", que como sienten que pueden contaminarse se lavan repetidamente las manos; los "ordenadores", que sienten la necesidad de ordenar según pautas rígidas, y los "verificadores", que sienten que deben inspeccionar todo para evitar una catástrofe (ver El top 3).

Los más graves son los TOC "con ideas mágicas", que lo tienen quienes se atan a cábalas como un conjuro para evitar tragedias. "Tenía un paciente que sólo podía tomar el colectivo si antes pasaban el 10, el 60 y el 39, en ese orden; si no, sentía que algo terrible iba a pasar", cuenta Cascardo. Y están quienes tienen ideas obsesivas ligadas a la muerte: "Tenía un paciente que no podía subirse al 17 porque venía de Recoleta y lo asociaba al cementerio", dice Gustavo Bustamante, de Fobia Club.

Aunque en menor o mayor medida todos nos identificamos con alguna de estas conductas, no siempre son para preocuparse: para que sea un trastorno, el ritual tiene que ocupar al menos 1 hora por día. Si un chico, por ejemplo, llena ollas con agua para evitar un incendio y con el tiempo deja de hacerlo, quiere decir que se procesó como un miedo normal.

La psiquiatra Graciela Peyrú, presidenta de la Fundación Argentina de Salud Mental, dice que cada vez atienden más casos: "Los trastornos de ansiedad están aumentando en el país por el ritmo en el que vivimos y la inseguridad social que nos genera, por ejemplo, la amenaza latente de desempleo. Para tener un TOC hay que estar inmerso en estas condiciones sociales y además tener predisposición biológica y una cierta historia individual, como haber vivido situaciones traumáticas".

Los médicos lo ubican entre las patologías más inhabilitantes: "El trastorno tiende a agravarse porque la angustia no se procesa y los diques para contenerla empiezan a reforzarse. Así, la persona arranca verificando hornallas y termina sin poder salir hasta que las ventanas no están en un ángulo determinado", dice el psicoanalista Pedro Horvat. "Toda la vida social queda condicionada. Había un paciente que en su trabajo llenaba un formulario en el tiempo en que los otros llenaban 20 porque volvía a revisarlos. Engañaba a los de seguridad para que lo dejaran entrar los fines de semana para volver a verificar. Otros, en cambio, terminan perdiendo el trabajo porque viven cumpliendo rituales y llegan siempre tarde", dice Bustamante, A la familia, la tiraniza: "La sexualidad queda limitada: la sensación de contagio inminente hace que usen hasta cuatro preservativos juntos aunque tengan pareja estable".

Los psicofármacos y la psicoterapia ayudan a salir del infierno, pero el diagnóstico llega entre los 25 y los 35 años: tarde, por la vergüenza y por el temor de cargar con el estigma de la locura.

Dr. Álvaro Rodríguez Lazcano Prof. Adj. Clínica Psiquiátrica Facultad de Medicina



Dr. Álvaro Rodríguez Lazcano

Prof. Adj. Clínica Psiquiátrica

Facultad de Medicina


Trastorno Obsesivo Compulsivo

Definición


El TOC es un Trastorno caracterizado por la presencia de obsesiones y compulsiones.

Llamamos obsesiones a ideas, impulsos o imágenes recurrentes, que son experimentadas por el paciente como intrusivas e inapropiadas y que producen ansiedad o perturbación prominente.

Son compulsiones las conductas repetitivas o actos mentales (el pensamiento entendido como una conducta), que se producen buscando evitar un evento o situación temida y/o prevenir o disminuir la perturbación resultante de dicho evento. Estas conductas no están vinculadas de forma realista con lo que se desea evitar o son muy exageradas.


Criterios diagnósticos DSMIV para TOC:


Se cumple parta las obsesiones y las compulsiones:
Las obsesiones se definen por:

1) pensamientos, impulsos o imágenes recurrentes y persistentes que se experimentan en algún momento del trastorno como intrusos e inapropiados, y causan ansiedad o malestar significativos.


2) los pensamientos, impulsos o imágenes no se reducen a simples preocupaciones excesivas sobre problemas de la vida real.


3) la persona intenta ignorar o suprimir estos pensamientos, impulsos o imágenes, o bien intenta neutralizarlos mediante otros pensamientos o actos.


4) la persona reconoce que estos pensamientos, impulsos o imágenes obsesivos son el producto de su mente (y no vienen impuestos como en la inserción del pensamiento).


Las compulsiones se definen por:


1) comportamientos (p. ej., lavado de manos, puesta en orden de objetos, comprobaciones) o actos mentales (p. ej., rezar, contar o repetir palabras en silencio) de carácter repetitivo, que el individuo se ve obligado a realizar en respuesta a una obsesión o con arreglo a ciertas reglas que debe seguir estrictamente.


2) el objetivo de estos comportamientos u operaciones mentales es la prevención o reducción del malestar o la prevención de algún acontecimiento o situación negativos; sin embargo, estos comportamientos y operaciones mentales o bien no están conectados de forma realista con aquello que pretenden neutralizar o prevenir o bien resultan claramente excesivos.


En algún momento del curso del trastorno la persona ha reconocido que estas obsesiones o compulsiones resultan excesivas o irracionales. Este punto no es aplicable en niños.


representan una pérdida de tiempo (suponen más de una hora al día) o interfieren marcadamente con la rutina diaria del individuo, sus relaciones laborales (o académicas) o su vida social.



Si hay otro trastorno de Eje I, el contenido delas obsesiones o compulsiones no se limita a él (p. Ej., preocupaciones por la comida en un trastorno alimentario, arranque de cabellos en la tricotiliomanía, inquietud por la propia apariencia en el trastorno dismórfico corporal, preocupación por las drogas en un trastorno por consumo de sustancias, preocupación por estar padeciendo una grave enfermedad en la hipocondría, preocupación por las necesidades o fantasías sexuales en una parafilia o sentimientos repetitivos de culpabilidad en el trastorno depresivo mayor).


El trastorno no se debe a los efectos fisiológicos directos de una sustancia (p. ej., drogas, fármacos) o de una enfermedad médica.



Hay que especificar si:

Con poca conciencia de enfermedad:

Si el paciente no reconoce como excesivas las preocupaciones y actos patológicos.


Historia


Este trastorno acompaña a la especie humana desde que se tiene recuerdo escrito.

Conceptualizado como intervención de fuerzas para- normales, fue tratado con métodos de tipo religioso (exorcismo, por ejemplo), curiosamente, estos métodos determinaban mejorías en algunos pacientes (Jenike, MA).

Poco a poco fue entendiéndose como un problema médico. Se reconoce en general que en 1838 Jean Etienne Dominique Esquirol lo describió en la literatura científica y a finales de ese siglo se lo vinculó a la depresión y a la Melancolía.

A comienzos del siglo pasado surgieron las primeras explicaciones psicológicas del trastorno.

Debemos a Pierre Janet el uso de técnicas comportamentales para su tratamiento.

Fue también este autor el que plantea una hipótesis de “terreno”, en el sentido médico, que explicaría su aparición en algunas personas predispuestas. Eran los Estigmas Psicasténicos de la persona del obsesivo, abulia, escrupulosidad y duda.

Sigmund Freud, y su caso clínico, El Hombre de las Ratas, ubica la conflictiva obsesiva a nivel del Inconsciente. Colocando claramente el orden de lo sintomático como epifenómeno de esta conflictiva inconsciente, intentará el control de los síntomas mediante la resolución de dicho conflicto.

A mediados del siglo pasado, con el advenimiento de las terapias conductuales, estas se aplicaron a los pacientes, sin pretender una explicación psicopatológica del problema.

Con la demostración de la permeabilidad de la sintomatología TOC a la Clorimipramina, antidepresivo heterocíclico, obtenida por Yaryuba-Tobías en 1976, se abrió un inmenso campo a la investigación neuro-biológica que ha ubicado en esta disciplina las principales bases de investigación en estos últimos años.

Epidemiología
Prevalencia.


La prevalencia en numerosos estudios de campo, es ubicada entre el 1 y el 3%. Estas cifras deben interpretarse con cautela ya que es posible que incluyan pacientes que tuvieron síntomas transitorios, que no codificaran o se codificaron erróneamente según pautas del DSM IV.

Un estudio canadiense, que obtenía cifras de prevalencia del 3.9%, al ser revisado su ésta cayó al 0.6%.(Stein y col.).

De cualquier forma, de las exiguas cifras que se consideraban hasta los años ochenta, estos estudios implican una prevalencia mucho mayor.

Edad


Todos los trabajos actuales marcan una edad de inicio mayoritario entre los 25 y 35 años

La edad de comienzo del trastorno podría ser significativa en cuanto a la evolución, incidencia por sexo, resultados de los tratamientos farmacológicos, comorbilidad, etc..

El comienzo en edad temprana, prepúberes, se asocia con mayoría de sexo masculino (Zohar AH y cols), índice superior de trastorno por tics ( Swedo SE, Rapoport y cols), compulsiones no precedidas de obsesiones (Geller D) y una mayor influencia de historia en familiar para TOC. (Pauls DL y cols).

Merece destacarse el hecho de que disminuya fuertemente su prevalencia hacia los 60 años de edad.


Sexo


Considerando la población en su conjunto encontramos que el trastorno es levemente mayoritario en mujeres (45%-55%).

Sin embargo, es de destacar que en el grupo de menor edad, se encuentra una mayoría de varones muy significativa (60%-30%) (Zohar AH y cols).

Este grupo, por otra parte, requiere consideraciones especiales, como veremos, en cuanto a evolución, tratamiento, cuadro clínico, etc..

Vemos entonces, en varones, una distribución bimodal de frecuencias del trastorno, con dos picos, uno entre los 11 y 18 años, y otro entre los 25 y 35 años.(Fireman, M.S.)

Comorbilidad.
Trastornos del Humor


Es la patología más comúnmente asociada al TOC.

En un estudio de cien pacientes con ésta patología 67% tenían historia de Trastorno Depresivo Mayor en algún momento de su vida.(Rasmussen, SA)

Resulta difícil diferenciar los trastornos depresivos primarios de aquellos que son secundarios a la desesperanza que genera el TOC.

Weler y col. concluyen que en el 38% de los casos el TDM se inicia después de generado el TOC.

Perugi y col. encontraron en el 27% de los casos diagnosticados como TOC, historia familiar de trastornos del humor.

Obsesiones y/o compulsiones raramente, si alguna vez ocurren, se ven en episodios maníacos.

Sin embargo existe entre 20% y 30% de pacientes bipolares que presentan criterios DSM IIIR para TOC. Lo cual lleva a pensar en un aumento de la incidencia de TOC en la población bipolar.


Otros Trastornos de Ansiedad


Otros trastornos de ansiedad coexisten frecuentemente al TOC, como es demostrado por muchos estudios.

Rasmussen SA y colaboradores encuentran en una muestra de cien pacientes con esta patología los siguientes datos, fobia social (18%), trastorno de pánico (12%), fobia específica (22%).

La similitud entre las preocupaciones del paciente portador de ansiedad generalizada y las obsesiones merecen un análisis particular. Abramowitz y Foa encontraron en 381 pacientes con TOC, un 20% cumplían criterios de TAG.

Esta correlación fue superior en mujeres, quienes en su mayoría tenían los dos diagnósticos.




Trastorno por Tics.


El vínculo entre TOC y Trastorno por Tics es bidireccional.

Leckman y colaboradores encontraron un 23% de 134 pacientes con TT cumplían todos los criterios para TOC, y un 46% varios de los criterios principales.

Paralelamente , aproximadamente un 20% de pacientes TOC tienen en algún momento de su vida múltiples tics, además de que entre un 5% y un 10% presentan a lo largo de la vida diagnóstico de Síndrome de Gilles de la Tourette.

Aparentemente los pacientes con tics y TOC presentan frecuentemente algunas temáticas obsesivas-compulsivas en particular, sobre todo vinculadas al orden y la simetría.


Trastornos de la Alimentación


Anorexia y Bulimia forman parte del espectro obsesivo-compulsivo.

Numerosos estudios marcan la asociación a lo largo de la vida de trastornos de la alimentación y el TOC.

Esta prevalencia se encontrará en el rango entre el 11% y 17 %.

Algunas características propias de la patología obsesivo-compulsiva se encuentran también en los trastornos de la alimentación. Estas son: excesiva limpieza, excesivo orden, perfeccionismo, rigidez, miedo al cambio, escrupulosidad, excesiva autoexigencia.

Thiel y colaboradores encuentran que la mejoría del trastorno de la alimentación se correlaciona con una mejoría de los síntomas TOC.


Trastornos Psicóticos


La comorbilidad de TOC con Esquizofrenia es destacada por diversos autores.

Su rango de coexistencia es entre 40% y 70.8% según los autores consultados.

Esta gran variabilidad se debe a los diferentes criterios usados para el diagnóstico respectivo. Por ejemplo algunos autores toman como positivo síntomas obsesivo-compulsivos, aunque no codifiquen, en el DSM, para TOC.

Los trabajos de Fenton y McGlashan sugieren que la co-ocurrencia de Esquizofrenia y TOC empeora la evolución de la primera y dificultan seriamente la reinserción social.

Los mismos trabajos indican que la comorbilidad de TOC y Trastorno de Personalidad Esquizotípico empeoran la evolución y los hacen resistente a la medicación psicotrópica.

Trabajos de Goodwin y colaboradores no encuentran mayor incidencia de Esquizofrenia en pacientes TOC que en la población general.

Trastornos de la Personalidad


La coexistencia de TOC y Trastornos de la Personalidad se encuentra entre el 36 % y el 75%.

Los diagnósticos de Eje II más frecuentes son: dependiente, evitativo, pasivo agresivo y anancástico.

Esquizotipico, paronoico y borderline se asocian a peor pronóstico, aunque su comorbilidad sea menor.

Amplia evidencia sostiene la discontinuidad entre TOC y Trastorno de Personalidad Obsesivo Compulsivo.

Sin embargo algunos de los ítems del TDPOC, como perfeccionismo e indecisión, se dan en un alto porcentaje de pacientes TOC. (82% y 70%, respectivamente).

Puede ser práctica la distinción entre elementos egosintónicos y egodistónicos para diferenciar el Eje II del Eje I, pero no es absoluta.



Espectro TOC.
Tricotilomanía
La Tricotilomanía es la necesidad irresistible de arrancarse el cabello.

Fue descripta por el dermatólogo francés Francois Hallopeau en 1889.

Esta patología afecta al 4% de la población.

Es clasificada en el DSMVI como uno de los Trastornos del control de los impulsos no clasificados.

Es una patología crónica más frecuente en mujeres (4 a 1), que comienza en general antes de los 17 años.

La causa de la enfermedad es motivo de debate, se ha vinculado al espectro TOC tanto por sus manifestaciones como por su tratamiento.

En cuanto al mismo, se han propuesto el uso de antidepresivos serotoninérgicos, así como también el litio.

El médico consultado es más frecuentemente el dermatólogo, el motivo es la alopecia sectorial, de la cual el paciente niega la causa volitiva. Este hecho complica el diagnóstico.

El paciente se ve obligado al uso de sombreros o pelucas para cubrir las zonas afectadas.

El sector más frecuentemente involucrado es el cuero cabelludo, pero puede afectarse la zona pubiana, cejas, pestañas, etc..

Es sugestiva de la patología la coexistencia de cabellos cortos con otros largos, un patrón lineal o circular.

El diagnóstico diferencial es con tiña. La biopsia de la zona contribuye a aclararlo.

El arrancamiento es indoloro, según el paciente, y muchas veces el cabello es deglutido o masticado.

En casos leves y de reciente comienzo, el pronóstico es bueno.

En casos graves y de larga evolución es reservado.

Como complicación se menciona la formación de tricobezoares, con el cuadro abdominal de dolor, constipación, halitosis, nauseas y vómitos.

Hipocondriasis
La hipocondría se caracteriza por preocupación y/o miedo a desarrollar una enfermedad grave o a haberla adquirido. El temor se debe a la interpretación de que los signos o las sensaciones físicas evidencian enfermedad. Pese a que el examen físico no revela datos positivos y a las palabras tranquilizadoras del médico el miedo persiste, pero sin certeza de intensidad delirante.

En un período de observación de 6 meses el 4 al 6 % de la población padecería el trastorno.

No habría diferencias entre los sexos.

La comorbilidad con TOC es del 8% (Barsky).

Entre los pacientes con TOC, las obsesiones somáticas llega al 34% (Rasmussen).

El trastorno es crónico, recurrente y fluctuante.

Muchos estudios han demostrado la mejoría del trastorno con el uso de ISRS o clorimipramina.

Se investigó con metodología doble ciego, contra placebo a la Fluoxetina, obteniéndose resultados positivos en el 80% de los casos comparado con el 50% para el placebo.


Clásicamente se pensaba que era una enfermedad de muy mal pronóstico.

Actualmente, sin embargo, la mayoría de los autores opinan que cura espontáneamente en la mayoría de los casos, sin embargo esta información requiere de mayor investigación.

Dismorfofobia
Este trastorno se caracteriza por la sensación de incomodidad o rechazo de una parte del cuerpo.

Los pacientes presentan una sensación de fealdad pese a su aspecto normal y creen o temen ser poco atractivos e incluso repulsivos.

Desde antaño se vinculó a la Neurosis Obsesiva, así lo entendían autores tan destacados como Kraepelin (Neurosis Compulsiva), Pierre Janet (Obsesión del Cuerpo) y el propio Freud, que lo estudió en su famoso caso EL HOMBRE DE LOS LOBOS, el cual padecía por el tamaño de su nariz.

El 37% de pacientes con esta patología tienen historia de TOC (Phillips, KA).

Los pacientes con este trastorno tienen alta frecuencia de familiares con TOC.

Algunos autores plantean que sería una variante de TOC.

En cuanto al tratamiento se ha utilizado clorimipramina, en comparación con desipramina y placebo, en estudio doble ciego, demostrando su significativa eficacia.

Un estudio comparó en las mismas condiciones a Fluvoxamina, obteniendo también una gran actividad.

Estos fármacos se han usado en aquellas dismorfofobias de intensidad delirante (delusional).

Juego patológico
En esta patología el paciente no puede resistir el impulso de jugar a pesar de las consecuencias personales, familiares o laborales que podrían acarrearle.

Podría afectar al 3% de la población adulta. Existe mayoría de varones, algunos estudios mencionan que la relación es 2 a 1.

Se ha encontrado antecedentes familiares de alcoholismo, toxicomanías y juego patológico en un gran porcentaje de portadores del trastorno.

También se encontró mayor proporción de trastorno Atencional con Hiperactividad y Trastornos del Estado del Ánimo.

En cuanto a la etiología, se mencionan causas psicológicas y fisiopatológicas.

Entre las primeras sólo mencionaremos las teorías psicoanalíticas que remiten a un deseo inconsciente de perder con el fin de atenuar la culpa generada al inicio del proceso edípico (Kaplan).

Entre las segundas se ha destacado el hecho de un descenso de Metoxifenoxifenilglicol, metabolito de noradrenalina, en plasma, un aumento del mismo en el líquido cefalorraquídeo y un aumento de secreción urinaria de noradrenalina, lo que sugeriría un descenso del neurotransmisor mencionado.

Así como en las toxicomanías se han descrito síndrome de abstinencia y aumento de la tolerancia.

La evolución es progresiva, necesitando cada vez más apuestas para obtener satisfacción deseada, e intensa disforia si no obtienen el estímulo buscado.

El tratamiento se basa en los grupos de autoayuda, que propenden a la abstinencia y al soporte.

Se han utilizado técnicas cognitivo-comportamentales con algún éxito.

No hay ningún fármaco aprobado para el tratamiento de estos pacientes, algunos estudios sugerirían los ISRS, otros, en cambio, no demuestran diferencias significativas contra placebo.


Etiología
Desde hace largo tiempo se tiene la fuerte sospecha que el trastorno obedecía a causas biológicas, y no puramente psicológicas.

Pero desde que hace unos veinte años se descubrió la permeabilidad de este desorden a la clorimipramina, esta sospecha se tornó en casi certeza de un mal funcionamiento encefálico.

Numerosas investigaciones en el campo biomédico se han desarrollado desde entonces, la genética, la neurobiología, la electroencefalografía, las nuevas técnicas que brindan no sólo características morfológicas, sino también funcionales del encéfalo, así como también la investigación de nuevos fármacos, han contribuido a una aproximación prometedora a esta patología.



Factores Genéticos.


Si bien parece existir un componente genético en el TOC, no nos es posible conocer los genes específicos implicados ni el patrón hereditario.

Se han realizado estudios familiares encontrándose en algunos trabajos pruebas convincentes de la predisposición familiar. Lenane en 1990 encontró entre familiares de pacientes portadores de TOC, una incidencia del 17% para la enfermedad.

Sin embargo otro autor (Insel, 1983) no encuentra la misma incidencia.

Aparentemente esta diferencia se debería a los diversos criterios manejados (DSMIII y DSMIIIR), así como también al criterio de descarte en el espectro TOC.

Tampoco hay resultados concordantes en la secuencia genética para el receptor serotonina, ni en las formas alélicas asociadas a TOC.

En estos últimos años se han homogeneizados los criterios diagnósticos, las escalas de gravedad, etc., lo que permitirá una mayor precisión en las investigaciones futuras y resultados más significativos.



Hipótesis Neuroquímicas.


Su importancia en el TOC se basa en:


Respuesta a los fármacos.


Los fármacos con acción serotoninérgica tienen efectos antiobsesivos específicos, esto es, independiente a su acción antidepresiva.

Actúan inhibiendo la recaptación de serotonina de la hendidura sináptica.


Entre ellos se destacan:

Clorimipramina
Fluoxetina
Fluvoxamina
Sertralina
Paroxetina
Citalopram



En el caso de los síntomas TOC se plantea una actividad aumentada de Serotonina.

Estos ISRS actuarían regulando a la baja a los receptores serotoninérgicos.

Esto último disminuiría la actividad de ese neurotrasmisor lo que conllevaría la disminución de los síntomas.



Marcadores periféricos de función serotoninérgica.


Estos marcadores son:


Niveles de ácido 5 indolhidroxindolacético en LCR.
Niveles plaquetarios de serotonina.
Receptores serotoninérgicos en plaquetas.


El hallazgo más constante y que se correlaciona mejor con la clínica es el nivel de 5HIAA en LCR. También se correlaciona con una buena respuesta a los fármacos.

Tanto los niveles de serotonina como los receptores para ese neurotrasmisor en plaquetas se correlaciona mejor con alteraciones afectivas en pacientes portadores de TOC, que con la clínica específica.

De todas formas se esperan mayores investigaciones en un futuro cercano.


Manipulación farmacológica.


El uso de agonistas serotoninérgicos a arrojado algúna evidencia en cuanto aumento de la sintomatología TOC.

Sin embargo, hasta ahora, los resultados han sido contradictorios.

Seguramente existen otros neurotrasmisores implicados.

La acción positiva en la supresión de los síntomas con el uso de dextro anfetamina, así como también el efecto que se ha demostrado para Clonidina, apunta a la implicación de noradrenalina en la fisiopatología del TOC.

El éxito en el uso de algunos fármacos de acción predominantemente dopaminérgica (Risperidona, Olanzapina, Quetiapina, etc.) lleva a pensar en la implicación de este neurotrasmisor también.

Seguramente la explicación completa de la enfermedad sea de una complejidad muy grande para el estado actual de nuestro saber.



Factores Neuroendocrinos.


Se han investigado numerosas relaciones entre el TOC y modificaciones de las funciones neuroendocrinas.

Destacamos:

Test de supresión por dexametasona.


Este estudio ha mostrado importantes divergencias en sus resultados, encontrándose trabajos en que es positivo y otros en que es indiferente.

La opinión mayoritaria es que estaría vinculado a la coexistencia de Trastornos en el estado de ánimo, y que sería este factor el que afecta este estudio.



Test de respuesta de la hormona tiroestimulate a la hormona liberadora de tirotrofina.


Se han encontrado respuestas aplanadas de TSH a la estimulación por TRH sin respuesta de prolactina ni hormona gonadotrofica.

Esto implicaría una fuerte desregulación del eje Hipotálamo-Hipofisario-Tiroideo.

Algunos estudios encontrarían un 25% de anormalidades basales en la función tiroidea en pacientes TOC.

Se ignora que implicancia tendría esta evidencia, que por otra parte no se mantiene en todos los estudios.



Factores Neurofisiológicos.


Electroencefalograma.


El EEG convencional no aporta evidencias concluyentes ya que aparecería alterado en un porcentaje que va entre el 11% y el 66%.

El análisis espectral del EEG muestra disfunciones temporales izquierdas, así como también trastornos en el sueño con aumento de despertares, menor duración del sueño, disminución del sueño etapa IV, acortamiento de latencia REM, menor eficacia del movimiento ocular rápido.

Cattaneo, en 1988, destaca evidencias de un estado anormal de hiperalerta constituido por ondas beta.

Perro, en 1992, describe elementos similares y suma el encuentro de ondas TITA en regiones frontal posterior a temporal media en hemisferio izquierdo.

Drake, en 1996, describe disminución de ondas alfa en lóbulo frontal.



Estudios de neuroimagen cerebral.



Tomografía axial computarizada (TAC).


No se han encontrado datos concluyentes con este estudio.


Resonancia nuclear magnética (RNM).


Esta técnica sugiere alteraciones en los ganglios basales, especialmente núcleo caudado.

Sin embargo la evidencia es contradictoria.



Neuroimagen funcional.


A diferencia con los estudios puramente estructurales, estos estudios funcionales si muestran alteraciones más constantes en los diversos autores.


Tomografía por emisión de positrones (PET).


Se encuentra un hipermetabolismo global, pero con un gran predominio a nivel del núcleo caudado, esto es bilateral.

También se encuentra hiperactividad marcada a nivel de la corteza fronto- orbitaria.



Tomografía de fotón único (SPET).


Los resultados son similares que con el PET pero no tan homogéneos, quizás se deba a las pequeñas casuísticas analizadas.



Teorías neuroanatómicas.


A partir de los estudios descritos referidos a la neuroimagen funcional se generaron diversas teorías neuroanatómicas implicadas en la génesis del TOC.

Todas ellas parten del circuito descrito en 1986 por Alexander y cols..

Este circuito cortico-subcortical vincula la corteza frontoorbitaria-núcleo caudado-palido-tálamo.

La corteza frontoorbitaria tendría acción exitatoria glutamatérgica con el caudado, este inhibiría mediante el GABA al Pálido, que inhibiría mediante el mismo neurotrasmisor al Tálamo, que a su vez excitaría la corteza frontoorbitaria.

Se han atribuido funciones más o menos específicas a cada estructura actuante.

La corteza supraorbitaria se vincula a la ansiedad, control de impulsos, meticulosidad, higiene.

El estriado ha sido implicado en la aparición de movimientos, sensaciones y cogniciones intrusas. También se le vincula a la dificultad para cambiar de tareas y al control conciente de conductas automáticas.

Como vemos todos los elementos predominantes del TOC están presentes.

Pero, ¿dónde está el origen del problema?

Rapoport opina que en los ganglios basales.

Insel opina que en la corteza.




Clínica
Del punto de vista clínico se caracteriza este trastorno por la existencia de obsesiones y compulsiones.

Las obsesiones son presentadas por el paciente como pensamientos, ideas, imágenes intrusivas, insistentes, repetidas, no deseadas y odiosas. Otras veces son sonidos, frecuentemente música, que el paciente concientemente desprecia, que “escucha” sin poder quitársela del campo de la conciencia, impidiéndole realizar otras tareas.

El paciente las identifica como propias, es decir, generadas por el mismo, y reconocida como tal, no como producto de instancias externas a la persona del que consulta.

Muchas veces el paciente la siente como ridículas, inmorales o sin sentido y, por lo tanto, se le dificulta “confesárnoslas”. Existe, por lo tanto, plena conciencia de su inadecuación.

Esta paradoja lleva a aumentar aún más el sufrimiento, creadas por él, él no puede detenerlas.

Vemos frecuentemente, conforme se va sintiendo más comprendido, que el inventario de tales fenómenos aumenta.

En el caso particular de las imágenes tienen las mismas características que las ya descriptas, con la dificultad que son a veces confundidas con alucinaciones.

Es notorio que el infradiagnóstico del TOC responde a las propias características de cuadro clínico que por otra parte no genera sufrimiento “social”, sino, más bien, sufrimiento y privaciones personales.

No es raro que cuando llegan a la consulta la enfermedad se encuentre complicada con otro diagnóstico de Eje I, como por ejemplo Depresión.

Otras veces son los familiares que de una forma o de otra han “obligado” la concurrencia al técnico. Otras veces son cambios en las características de la vida del paciente que lo llevará a una imposibilidad de ocultar sus “manías”(casamiento, inicio de la Universidad, vida en cuarteles, campamentos, etc.).

La aparición de obras de cine en que el protagonista presentaba un TOC, llevo a un record de consultas en USA hacia los años noventa.

Cada vez es más frecuente que personas vinculadas a la salud mental insistan en la necesidad del inicio de un tratamiento médico (psicólogos, por ejemplo), dada la difusión que han tenido últimamente los tratamientos farmacológicos.

Para las personas que padecen el trastorno es muchas veces vergonzoso hablar de su problemática.

Esto hace que el técnico deba proponer un entorno cálido, no crítico y comprensivo de la sintomatología que aqueja al paciente. Esto permitirá la comunicación por parte del paciente de las Obsesiones y Compulsiones, así como también valorar la repercusión que han tenido en el desempeño del paciente.

Las temáticas de las obsesiones son variadas, debemos recordar que son sentidas como propias (es decir no generadas por influencia de instancias exteriores al sujeto), pero indignas, inmorales, ilegales, irracionales, etc..

Como respuesta a ellas se produce una intensa preocupación por parte del paciente.

A su vez pueden provocar conductas para evitar estos pensamientos.

Estas conductas pueden ser movimientos repetitivos, “juegos mentales”, contar, etc..

Vemos que, si bien las temáticas obsesivas y las compulsiones pueden ser infinitas, responden a un esquema general que es siempre similar.

No es raro encontrar obsesiones sin compulsiones, esto es, ideas intrusivas y molestas que no generan conductas tendientes a suprimirlas.

Lo contrario también es posible, sobre todo en niños.




Listado de Obsesiones (tomado de Rapoport, JL)


Suciedad y contaminación


Algo terrible que está sucediendo (fuego, muerte o enfermedad) a uno mismo o a un ser querido
Escrúpulos (obsesiones religiosas)
Preocupación o disgusto por secreciones corporales
Números afortunados o desafortunados
Pensamientos o impulsos sexuales agresivos, prohibidos o perversos
Miedo a hacer daño uno mismo o a otros
Preocupación por la limpieza de la casa
Sonidos, palabras o música de carácter intrusiva y sin sentido




Listado de Compulsiones (tomado de Rapopoport, JL)




Lavarse las manos, ducharse, bañarse , limpiarse los dientes o asearse de forma excesiva o ritualizada


Rituales repetitivos (ir y volver a través de una puerta, sentarse y levantarse en una silla)


Comprobación excesiva (puertas, cerraduras, hornos, instrumentos, frenos de seguridad, mapas, tareas escolares)


Rituales para evitar el contagio


Tacto


Medidas para prevenir el daño propio o a los demás


Orden u organización .


Contar


Acumular o coleccionar rituales


Rituales de limpieza del hogar o de objetos inanimados


Miscelánea de rituales (escribir, moverse o hablar)


En nuestro medio diferenciamos lo que son rituales de las compulsiones.

Llamamos rituales a aquellas conductas que no están vinculadas a ideas obsesivas.

Guardamos la palabra compulsión para aquella conducta que se desarrolla con el fin de suprimir o menguar la Idea Obsesiva.

Esta distinción tiene un cierto valor, como veremos luego al analizar la evolución de la sintomatología con el tratamiento farmacológico y la psicoterapia congnitivo-comportamental.

Otro concepto histórico, que actualmente es poco mencionado en la literatura internacional es el de la Fobia de Impulsión, esto es el miedo a agredir a un ser querido con algún objeto (frecuentemente cuchillos), que lleva a la evitación de dicho objeto. Este último concepto, pensamos, ingresa más naturalmente en el término obsesión, que ya hemos definido.

Rumiación Mental.

Diagnóstico
Positivo
Diferencial
Tratamiento
El tratamiento debe ser entendido en el contexto médico-paciente, esto que es cierto para cualquier conducta médica, es de central importancia en esta patología.

Así como el paciente tiende a disimular sus dificultades y a no referirlas al técnico, puede haber gran aprehensión al uso de fármacos que por otra parte presentan algunos efectos secundarios molestos.

También el inicio de las técnicas comportamentales aplicadas a este trastorno implican un enfrentamiento a miedos que son muy difíciles de aceptar sin un buen soporte vincular.

El papel de la familia es importante tanto como aliado, como protector y estímulo.

Debemos también tener en cuenta la capacidad del enfermo de reconocer cuales son sus dificultades específicas.

Esto último es especialmente difícil en personas que han convivido y se han adaptado a su dificultad, a veces, por largos años.

Los tratamientos tendrán en cuenta la edad, gravedad, insigth, aprehensiones especiales del paciente.

Debe, por tanto, ser diseñado a la medida, teniendo en cuenta el vínculo establecido.

Un abordaje actual del TOC incluye:


Tratamiento Psicofarmacológico.
Terapia Cognitiva.
Terapia Conductual. Exposición y Prevención de Respuesta.
Grupos de Autoayuda.
Intervención Familiar.




De este listado nos extenderemos un poco más en el Tratamiento Psicofarmacológico.


Tratamiento Farmacológico.


Desde el uso de Clorimipramina para el tratamiento del TOC, en el año 1976, a la fecha se ha avanzado en el diseño de las estrategias, indicaciones, uso de nuevos fármacos con mejor perfil de efectos secundarios, etc..


El uso de los Inhibidores Selectivos de la Recaptación de Serotonina a sido, y en
este tema hay acuerdo general, un avance en el tratamiento de esta patología.

Este grupo de fármacos parecen mostrar un grado de eficacia similar, pero sus efectos secundarios pueden variar de uno a otro.

La excepción a la regla es el primero de ellos, precisamente Clorimipramina, un derivado de los antidepresivos heterocíclicos, que es reputado en varios trabajos como el más eficaz de todos ellos.

Por otra parte es también el de efectos secundarios más molestos.

El listado de ISRS se amplía día a día. De estos se destacan: Clorimipramina

Fluvoxamina Sertralina

Paroxetina

Citalopram



Todos los citados son antidepresivos.

En general se ha observado que las dosis mínimas efectivas para el Trastorno son mayores que la dosis mínima efectiva antidepresiva.

Esto hace que se presenten efectos secundarios molestos en un alto porcentaje de casos.

La elección de la molécula a usar depende de la experiencia del técnico, perfil de efectos secundarios, etc..


Antipsicóticos.


Sobre todo los llamados atípicos, han demostrado eficacia, sobre todo cuando fracasan, o se obtiene sólo mejoría parcial, con los ISRS.

Risperidona y Olanzapina están siendo evaluados y utilizados para los pacientes con evolución más tórpida.


Litio.
Evolución y Pronóstico.


La evolución de los pacientes con TOC ha variado desde que se usan los tratamientos mencionados.

Como concepto se puede decir que es de evolución crónica, si bien es conocida la posibilidad de remisiones completas o parciales.

Se han descrito evoluciones cíclicas, con períodos de ausencia de síntomas, seguidos de períodos de gran exacerbación sintomática.

Se conocen algunos elementos que hablan de mal pronóstico:


Diagnóstico de Trastorno de Personalidad Borderline o Esquizotípico.
Comienzo a edades tempranas (niños, adolescentes).
Mala integración social.
Poco soporte familiar.



Calidad de Vida.

Estudios comparativos, utilizando escalas de calidad de vida y de posibilidad de vida independiente, señalan niveles en los TOC graves similares a los de Esquizofrenia.

Sin embargo estos trabajos señalan un mejoramiento notable con el tratamiento combinado, cosa que no ocurre en los esquizofrénicos.

Los mismos trabajos indican que los dos índices empeoran durante el tratamiento.