"Lavaba sus manos hasta que le sangraban"

Por BBC Mundo, BBC Mundo, Última actualización: 10/10/2010


Tres de cada 100 niños desarrollan trastorno obsesivo compulsivo. Pero ¿cómo afecta la enfermedad al resto de la familia?

"Lavaba sus manos hasta que le sangraban"


En un tablero de anuncios en el Hospital Maudsley de Londres -uno de los principales hospitales psiquiátricos del Reino Unido- puede verse una fotografía de un niño comiendose su almuerzo sobre un escusado.

John se lavaba las manos continuamente hasta que sangraban.

La mayoría de los padres se sentirían horrorizados con esa imagen, pero para una madre en particular es una señal positiva porque forma parte de un a terapia psicológica que le ha ayudado a su hijo a combatir finalmente su trastorno obsesivo compulsivo (TOC).

El tratamiento, conocido como terapia cognitivo conductual (TCC), gradualmente expone al paciente a las cosas que más teme. En este caso, los gérmenes y la contaminación, ayudándolo a combatir sus ansiedades.

"El TOC no desaparece" explica Sandra (la madre).

"No te abandona con el tiempo. Pero puedes adquirir la habilidad para enfrentarlo. Mi hijo sabe ahora cómo combatirlo y esto le ha dado una nueva calidad de vida".

Obsesión y ansiedad

El TOC afecta a tres de cada 100 niños. Es una enfermedad mental de ansiedad marcada por obsesiones y pensamientos no deseados y por conductas repetitivas, como lavarse las manos continuamente.

"John (no es su verdadero nombre) se lavaba las manos hasta que comenzaban a sangrar" dice Sandra.

"Toda nuestra vida familiar estaba marcada por una carga de estrés".

La enfermedad puede dejar a quienes la sufren severamente discapacitados. Como explica la madre, había momentos en que John no podía sentarse en el asiento de un escusado o ninguna silla o transporte público, no podría dormir debido a los pensamientos intrusos, no podía darse una ducha por temores de que el agua estuviera contaminada y no podía comer.

"Sentía que iba a morir si tocaba la manija de una puerta" explica John.

"Me aterrorizaba y alteraba. En mi experiencia es una de las peores enfermedades mentales".

El valor de la etiqueta

John tenía ocho años cuando aparecieron los primeros síntomas de la enfermedad. Su madre notó que realizaba movimientos extraños, como dar patadas en ángulos extraños.

Al principio ella pensó que el niño estaba haciendo travesuras y que esa conducta pasaría con el tiempo.

Pero tras la muerte del abuelo, con quien el niño mantenía una relación cercana, comenzó a desarrollar temores por los gérmenes y la suciedad. Y fue referido a una clínica local de salud mental infantil y adolescente.

"Hasta entonces había sido un niño normal" dice Sandra.

"Pero a partir de ese momento comenzó a lavarse las manos continuamente".

Cuando se diagnosticó el trastorno obsesivo compulsivo, la familia se sintió aliviada.

"Una vez que puedes colocar una etiqueta a un trastorno puedes empezar a culpar a la etiqueta y no al niño" dice la madre.

"Es el TOC el que es travieso y estúpido, no el niño".

John, sin embargo, comenzó a decir que quería morirse, que no quería seguir así. Y entonces fue referido a la doctora Isobel Heyman, especialista del Instituto de Psiquiatría de los hospitales Maudsley y Great Ormond Street.

Entonces fue sometido a una serie de terapias especializadas cognitivo conductuales, el único tratamiento psicológico recomendado para la TOC.

Pocos terapeutas

El tratamiento se lleva a cabo con terapeutas experimentados que ayudan a los pacientes a adquirir las herramientas adecuadas para poder enfrentar y tratar con sus obsesiones.

Arte de un paciente con trastorno obsesivo compulsivo

"Arte de un paciente con trastorno obsesivo compulsivo"

La terapia recomendada para TOC es la congitivo conductual.

Pero la ayuda especializada para esta enfermedad no está fácilmente disponible y, debido a la escasez de terapeutas, hay largas listas de espera de pacientes.

Por eso la doctora Heyman está llevando a cabo una prueba para ver si es posible entrenar adecuadamente a los terapeutas por teléfono.

El objetivo, dice, es poder llegar a más gente.

Para John, la terapia ha sido decisiva.

"Los médicos creyeron en mí, igual que mi mamá. Y realmente me convencí de que quería combatir esta enfermedad".

John tiene ahora 14 años y está en recuperación, aunque su familia está consciente de que el trastorno puede volver en cualquier momento de su vida.

"Estoy constantemente en guardia" dice su madre.

"Hasta cierto punto, todos vivimos con el TOC, pero cuando afecta la forma como vives es cuando se convierte en un problema".

El trastorno obsesivo compulsivo es la cuarta enfermedad mental más diagnosticada en el mundo, junto con el asma y la diabetes.

Los expertos creen que tanto factores psicológicos como biológicos juegan un papel en el trastorno, pero hasta ahora no se sabe con precisión cuáles son las causas de la enfermedad.

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Pedro Moreno - Guía Del TOC                                                            
Placebos: la mente manda - EiTB Actualidad A fondo
 


Placebos: la mente manda

Sarai Campo - 07/04/2009 | Redacción |
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Un miércoles Mikel decidió que no volvería a fumar; sin embargo, el sábado cayó en la tentación y volvió al vicio. El lunes se puso en contacto con un especialista y lo consiguió. ¿El secreto? Agua.



El placebo es una sustancia inerte a los fines de lo que estaría causando los síntomas del paciente en un primer lugar. Foto: EITB
Mikel, Alberto, Javi, María, Rakel… son muchos los que han creído que no eran capaces de lograr abandonar el hábito de tener siempre un cigarro a mano, pero la fuerza de voluntad y ese pequeño frasquito han hecho de su reto una realidad.
El placebo es una sustancia inerte a los fines de lo que estaría causando los síntomas del paciente en un primer lugar.
La explicación fisiológica propuesta para este fenómeno sería la estimulación (no por parte de la sustancia placebo, de lo contrario no entraría en la definición) del núcleo accumbens situado en el cerebro que daría como resultado la mejoría del cuadro sintomático del paciente que afirma estar aquejado por un mal.
En términos más coloquiales, el placebo no deja de ser una sustancia que “engaña” al paciente de modo que sus males, vicios e incluso dolores desaparecen.
La fuerza de la mente
La mente humana tiene mucha fuerza, pero a menudo los factores externos son verdaderamente decisivos.
Son pocos los especialistas que admiten utilizar placebos en el proceso de cura o ayuda a sus clientes, dado que muchos podrían llegar a pensar que se trata de meros ’timadores’.
Elisabete García es bióloga y trabaja en un laboratorio farmacéutico. Gracias a ello, en parte, ha logrado saber que la solución a su insomnio no ha sido más que un placebo. Placebo, por cierto, al que no hay que restar mérito; a fin de cuentas, Elisabete ahora duerme de tirón.
Había probado prácticamente todas la hierbas del herbolario de su barrio, sin embargo, aunque las primeras semanas funcionaba, al de un tiempo siempre volvía al desvelo.
Una vecina le habló del especialista que más tarde fue su gran aliado. Elisabete acudió sin mucha esperanza y por el mero hecho de probar suerte. Pero de aquella consulta salió su solución.
Tras contarle al especialista en homeopatía cuál era su problema y cuales habían sido los métodos probados, comenzó un tratamiento a base de unas sustancias que le recomendó su homeópata.
Un pequeño frasco con una etiqueta naranja y otro algo mayor con una verde fueron el principio de la solución.
Del frasco que tenía la etiqueta verde debía tomar dos gotas por la mañana y otras dos por la tarde. Del que tenía la etiqueta naranja; dos antes de acostarse.
El tratamiento dio su fruto y la bióloga logró dormir de tirón. Tres meses después de la primera consulta, charlando con un compañero del laboratorio en el que trabajaba, decidió analizar las sustancias de aquellos tarritos. Resultado: H20.
El Prozac es solo un placebo
La fluoxetina (conocida por el nombre comercial Prozac) es un fármaco Inhibidor Selectivo de la Recaptación de Serotonina (ISRS), con propiedades antidepresivas. Está indicado para tratar la depresión moderada a severa, el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC), la bulimia nerviosa, los trastornos de pánico y el trastorno disfórico premenstrual.
La fluoxetina también se usa ocasionalmente para tratar el alcoholismo, el trastorno por déficit de atención, ciertos trastornos del sueño (en particular, los síntomas de cataplejía asociados a la narcolepsia), migrañas, trastorno por estrés postraumático, síndrome de Tourette, obesidad, algunos problemas sexuales y fobias específicas.
Sin embargo, un estudio publicado por PloS Medicine ha revelado que Prozac, uno de los símbolos del siglo XXI, no es más que un placebo.
En el mundo, cerca de 40 millones de personas consumen Prozac para tratar depresiones. Según el estudio, el principio activo de la mítica “pastilla de la felicidad” tiene el mismo efecto que tomar pastillas de azúcar.
A menudo, el paciente determina su propia curación
Según varios estudios, 18 segundos es el tiempo que tarda un médico en interrumpir al paciente mientras éste le explica sus síntomas.
Asimismo, según el psiquiatra y doctor en Medicina Legal, José Cabrera Forneiro, la clave de la curación no depende tanto de los conocimientos que éste posea, sino de la cantidad de calor humano que desprenda”.
Cabrera explica que “la eficacia de cualquier medicamento es en un 50% psicológica”.
Un ejemplo que ha recorrido el mundo
La historia del californiano Wright, es conocida por muchos médicos. En 1957 le diagnosticaron un cáncer y le pronosticaron sólo unos días de vida.
Se enteró de que un suero de caballo, el 'krebiozen', podía ser eficaz contra el cáncer, y su médico, puesto que lo daba por desahuciado, accedió a ponérselo.
Tres días después, fuera ya de su 'lecho de muerte', bromeaba con las enfermeras, y los médicos constataban que los tumores "se habían fundido como bolas de nieve".
Cuando dos meses después Wright leyó unos informes que calificaban al suero como un remedio de curandero, sufrió una inmediata recaída. Su médico le dijo entonces: "No crea lo que lea en los periódicos", y le inyectó agua diciéndole que era una versión "doblemente eficaz del krebiozen". Una vez más, el tumor se fundió.
Wright fue "la viva imagen de la salud" durante dos meses más, hasta que leyó un informe definitivo en el que se decía que el 'krebiozen' era inútil: murió dos días después.
Nocebos: la ‘creencia’ no siempre produce beneficios
Según explican en elalmanaque.com los doctores Javier Martínez y Maria Jesús Clavera, si creemos que una acción o sustancia nos va a dañar, lo pasaremos bastante peor que si no tenemos esta creencia.
“Los médicos y familiares de pacientes temerosos e hipocondríacos sabemos que a estos no les conviene leer los prospectos de los medicamentos, pues, por sugestión, probablemente irán padeciendo algo de lo que lean”, explican los doctores.
Así pues, a estos efectos negativos, fruto de la imaginación y la creencia se les llama nocebos.


NOTA: Uno de los casos que hemos explicado es el de una mujer que acudió a la homeopatía y le trataron con un placebo. No es nuestra intención restar crédito a dicha especialidad, por lo que nos parece importante recalcar que los tratamientos de los homeópatas no siempre se basan en el placebo.



El trastorno obsesivo-compulsivo es una enfermedad de curso crónico o recurrente caracterizado por la presencia de obsesiones y de compulsiones. La obsesión (del verbo latino obsidere, que significa asediar) se refiere a ideas no deseadas que asedian la conciencia y que determinan una angustia patológica a pesar de los aspectos desplegados por el sujeto para evitarlas. La compulsión (del latino compellere) hace referencia al acto de forzar al individuo a obrar en contra de su voluntad. El trastorno constituye una fuente importante de sufrimiento, y con frecuencia supone un serio handycap personal y social.
Carr (1974) define la conducta obsesiva-compulsiva como “un pensamiento, imagen, impulsivo o acción persistente que es acompañada por una sensación de compulsión subjetiva y un deseo de resistirse a ello”.
Tipos y manifestación clínica del trastorno.
El trastorno obsesivo-compulsivo supone obsesiones repetidas o rituales que se entrometen en contra del deseo de la persona y que usualmente carecen de sentido. La mayoría de los pacientes se resisten al pensamiento obsesivo o con la necesidad de ritualización, especialmente en ritualizadores crónicos severos, tras psicocirugía y en niños. Si a los pacientes se les impide llevar a cabo sus rituales se sienten incómodos y ansiosos.
algunas obsesiones se presentan sin ser seguidas de rituales compulsivos. Sin embargo, la mayoría de rituales son precedidos por obsesiones: son los pensamientos ejecutados en acciones.
Como los fóbicos, el trastorno obsesivo-compulsivo es igualmente un síndrome de evitación ansiosa. Se imbrica con la fobia, ya que los obsesivo-compulsivos sienten ansiedad durante sus obsesiones o rituales, evitan con frecuencia las situaciones que las evocan, y mejoran con el tratamiento de exposición
Los trastornos se pueden dividir en dos clases: -rituales con obsesiones.
-obsesiones solamente.
Rituales compulsivos con obsesiones.
Es usual que los ritualizadores eviten los estímulos, especialmente las mujeres, y que se presenten obsesiones relacionadas con aquellos. La evitación puede ser extravagante. Existen varias formas de rituales que se solapan, y han sido subdivididos en variedades. Algunos pacientes más de rituales.
a) Rituales de limpieza: Se presenta más en mujeres que en hombres, normalmente con miedos a la sociedad y evitación de focos de contaminación imaginarios. Los pacientes pueden creer que se quedan contaminados cada vez que orinan, defecan, se masturban, tocan el suelo o un animal, o pasa por delante de un hospital, con las consiguientes horas gastadas en lavarse, bañarse, seguidas por la desinfección de todos los objetos que han tocado en casa mientras se sentían sucios.
b) Rituales de repetición: los rituales con números en que el eje principal es la repetición. La mayoría de los pacientes tiene que repetir la acción hasta que esta sea realizada correctamente.
c) Rituales de comprobación: Es más frecuente en hombres que en mujeres. Los pacientes pueden pasar horas comprobando que las ventanas y puertas de la casa estén bien cerradas al salir de casa por las mañanas o al irse a la cama por las noches, o buscar por toda la casa fragmentos invisibles de vidrios rotos, agujas o chinchetas por miedo a que alguien de la familia los ingiera con consecuencias fatales, o buscar cuchillos y esconderlos para que nadie se los clave…
d) Rituales de acumulación: en estos casos los enfermos encuentran muy duro tirar basura gastando horas ordenando desperdicios de la cocina, almacenando papeles sin valor durante décadas o comprando grandes cantidades de comida enlatada y objetos que nunca utilizan. Deshacerse de lo acumulado provoca gran ansiedad, y puede llegar a ser imposible moverse en casa de un paciente de este tipo donde las habitaciones y pasillos están atestados con miles de objetos no utilizados.
e) Rituales de orden: se relaciona con la compulsión a ordenar objetos de una forma determinada. Un paciente de este tipo no podría estudiar ya que malgastaría demasiado tiempo ordenando lápices, plumas y gomas de borrar sobre su mesa de una manera determinada.
Obsesiones.
Los pensamientos obsesivos o rumiaciones son pensamientos estereotipados que se entrometen en la mente del paciente de forma insistente en contra de su voluntad y se repiten a pesar de todos los intentos para hacerlos desaparecer. Muchas obsesiones están relacionadas con preocupaciones de contaminarse o de poder dañar a otras personas, o ir contra algún tabú social como blasfemar o efectuar avances sexuales de manera inapropiada en público. La mayoría de ritualizadores tiene lugar en algunas obsesiones que preceden a sus actos compulsivos, pero una pequeña minoría de obsesivos-compulsivos presentas obsesiones sin rituales. El tratamiento conductual tiene menos éxito para estos últimos que para los ritualizadores.
Trastornos asociados y características de personalidad.
Se da una fuerte asociación entre depresión y trastorno obsesivo-compulsivo, de tal forma que una gran parte de las personas tienen síntomas depresivos; a su vez personas diagnosticadas de depresión se las encuentra síntomas obsesivos. La depresión puede aparecer antes del trastorno obsesivo, puede instaurarse posteriormente a su aparición, así como surgir tras la curación de los síntomas obsesivos. Se ha encontrado que los trastornos disfóricos favorecen a la aparición de rumiaciones intrusivas, y que las faltas de estimulación distractora y la ausencia de actividades reforzantes facilitan el centrar la atención en pensamientos obsesivos. Por otro lado el que padece el problema obsesivo puede ver reducida la actividad laboral debido a la evitación y el tiempo que se llevan los rituales, así como desarrollar un sentido de indefensión y desesperanza con respecto a este problema que hace probable la aparición de este trastorno. Por último, existen algunas evidencias de los posibles mecanismos comunes para algunos trastornos.
Otras manifestaciones de ansiedad pueden acompañar al síndrome obsesivo compulsivo, ansiedad generalizada, aumento en miedo y aprensión que quedan exacerbadas e incluso aparición de ataques de pánico.
Un importante aspecto a tener en cuenta es la existencia o no de ideas sobrevaloradas. La mayor parte de los pacientes obsesivos consideran que los pensamientos que les asaltan son absurdos y sin sentido, no obstante pueden tener un nivel de certidumbre a cerca de ellas; conviene evaluar el nivel de incertidumbre de estas ideas ya que es importante a efecto de pronóstico y de cara a la terapia.
Los pacientes obsesivos tienen el mismo grado de probabilidad que la población normal de padecer trastornos psicóticos. Pero es la esquizofrenia ,con bastante frecuencia, la enfermedad que aparece en los trastornos obsesivos-compulsivos.
Se encuentra con frecuencia aunque no siempre, el que los pacientes obsesivos sean sujetos que dirigen su atención a áreas de interés muy focalizadas y de forma rígida, con escasa capacidad de pensar de forma relajada, flexible y creativa. Una característica uy señalada, dada por distintos autores, es la duda y la indecisión que tienen estas personas, que tienden a cometer errores o no tomar la decisión correcta que les lleva a centrarse y sobrevalorar detalles innecesarios o transferir la responsabilidad a otros. Además hay que señalar la baja autoestima de estos sujetos.
La edad de comienzo de síntomas obsesivo-compulsivos suelen ser los 20 años. Cerca del 65% desarrollan la enfermedad antes de los 25 años y algunos sobre los 6 años. Menos del 15% sobrevienen después de los 35.
Las obsesiones se definen por (1),(2),(3) y (4):
(1) Pensamientos, impulsos o imágenes recurrentes y persistentes que se experimentan en algún momento del trastorno como intrusos e inapropiados, y causan ansiedad o malestar significativos.
(2) Los pensamientos, impulsos o imágenes no se reducen a simples preocupaciones excesivas sobre problemas de la vida real .
(3) La persona intenta ignorar o suprimir estos pensamientos, impulsos o imágenes, o bien intenta neutralizarlos mediante otros pensamientos o actos.
(4) La persona reconoce que estos pensamientos, impulsos o imágenes obsesivos son el producto de su mente (y no vienen impuestos como en la inserción del pensamiento).
El TOC es más frecuente de lo que se creía hace algunos años. Se calcula que el 2% de la población tiene TOC (quizás durante un breve periodo de su vida, o de forma crónica), en esta cifra se incluye la estimación de pacientes que encubren sus síntomas y todavía no han sido diagnosticados. Eso significa que el TOC es más frecuente que la esquizofrenia o la anorexia
Las siguientes preguntas pueden ayudarte a determinar si tienes síntomas de TOC y si podrías beneficiarte de ayuda profesional.
Parte A
¿Te molestan pensamientos o imágenes desagradables que te vienen a la mente repetidamente, como los siguientes?
1 Preocupaciones acerca de contaminación (tierra, gérmenes, químicos, radiación) o de contagio de una enfermedad seria como el SIDA
2 Demasiada preocupación por mantener las cosas en perfecto orden o arreglados exactamente así (ropa, comestibles, herramientas)
3 Imágenes de muerte u otros eventos horribles
4 Pensamientos religiosos o sexuales personalmente inaceptables para usted
SI NO
¿Te preocupa mucho la posibilidad de que ocurran sucesos terribles como los siguientes?
5 Incendio, robo o inundación de su casa
6 Atropellar accidentalmente a un peatón con su coche o dejar que su coche se deslice por una colina
7 Propagar una enfermedad ( contagiar a alguien )
8 Perder algo de valor
9 Que le ocurra daño a alguien querido porque usted no fue lo suficientemente cuidadoso/a
SI NO
¿Te preocupa expresar un deseo o impulso no deseado y sin sentido como los siguientes?
10 Causar daño físico a un ser querido, empujar a un extraño delante de un autobús, conducir su coche hacia tráfico que viene en dirección contraria, contacto sexual inapropiado o envenenar sus invitados de cena
SI NO
¿Te has sentido obligado a desempeñar ciertos actos una u otra vez, como los siguientes?
11 Lavarte, limpiarte o asearte excesivamente o de forma ritualista
12 Comprobar el interruptor de la luz, el grifo, la llave del gas, el cerrojo de la puerta o el freno de mano
13 Contar, arreglar alinear o nivelar (asegurarse de que tus medias o calcetines están a la misma altura, los cordones de los zapatos con lazos idénticos,.)
14 Coleccionar objetos inútiles o inspeccionar la basura antes de tirarla
15 Repetir acciones rutinarias (sentarte/levantarte de la silla, pasar por la puerta, volver a encender un cigarrillo) un cierto número de veces o hasta que le siente que lo ha hecho exactamente así/ perfectamente bien
16 Necesitar tocar objetos o personas
17 Volver a leer o escribir algo sin necesidad, volver a abrir sobres antes de enviarlos
18 Examinar tu propio cuerpo buscando señales de enfermedad
19 Evitar colores (“rojo” significa sangre), números (13 trae mala suerte) o nombres (aquellos que empiezan con “M” significan muerte) que están asociados con sucesos temidos o pensamientos desagradables
20 Necesitar “confesar” o pedir constantemente reafirmación de que dijo o hizo algo correctamente
SI NO
Si contestaste SI a 2 o más de las preguntas anteriores, por favor continúa con Parte B.
Parte B
Las siguientes preguntas se refieren a pensamientos, imágenes, deseos o comportamientos repetidos identificados en la Parte A. Considera tu experiencia en los últimos 30 días al elegir una respuesta. Señala la respuesta más apropiada del 0 al 4.
¿Te molestan pensamientos o imágenes desagradables que te vienen a la mente repetidamente, como los siguientes? 0
1 Por lo general, ¿cuánto tiempo le ocupan estos pensamientos o comportamientos cada día?
2 ¿Cuánta angustia le provocan?
3 ¿Cuán difícil le es controlarlos?
4 ¿En qué medida le suponen evitar hacer algo, ir a algún lugar o estar con alguien?
5 ¿En qué grado interfieren en su vida en la escuela, trabajo o en su entorno social o familiar?
nada 1 leve (- de 1 hora) 2 moderado
(1 a 3 horas) 3 severo
(3 a 8 horas) 4 extremo
(+ de 8 horas)

http://radiocontempo.wordpress.com/2010/07/13/las-personas-con-trastorno-obsesivo-compulsivo-toc-tienen-pensamientos-recurrentes-y-desagradables-obsesiones-se-sienten-obligadas-a-llevar-a-cabo-ciertos-actos-una-y-otra-vez-compulsiones-que-a-me/
DraCaroline todas las noches antes de acostarme me vuelvo loca abriendo y cerrando que este bien la puerta de la entrada y las dos de atrás ...empiezo a contar y contar y hasta santiguar la puerta...vuelvo locos a todos porque me demoro...

DraCaroline todas los días tengo que cambiar las sábanas duermo sola pero me parece que esta
la cama toda contaminada o sucia y no es cierto pero no lo puedo evitar es como algo que me produce tranquilidad

DraCaroline no puedo tolerar que un perro me pase por las piernas me da un asco me da no se que...tampoco puedo tocar asientos en los buses y hospitales..

DraCaroline no puedo abrazar a mis hijas porque pienso que tienen grasa aparte soy anórexica...

DraCaroline se me doblan las piernas con solo pensar en los pensamientos que se me cruzan por mi mente de hacerle daño a mi niña, sé que nunca pasaría eso porque la amo y doy la vida por ella, pero es como una compulsión...

En base a estas preguntas y muchas más respondo algunas de ellas por ahora:

1. Sino hago los rituales, ¿con qué me voy a sentir seguro?




La necesidad que sientes por la seguridad es parte de tu problema con el TOC. Al tomar la oportunidad de manejar tu incomodidad al no hacer los rituales, te abres en ti mismo otras maneras posibles para manejar esa ansiedad que tu sientes. Ya estás haciendo un progreso cuando tomas el "riesgo" de contenerte o eliminar los rituales de tu vida.

2. "En el caso de que mi miedo a los gérmenes, al SIDA, a la suciedad, etc. "Qué me puede garantizar de que no suceda la catástrofe a que le tengo pavor (a enfermarme, a perder un ser amado, hacerle daños a los niños) , que realmente no pase?

No te puedes garantizar una vida sin un riesgo, dolor, pérdida, heridas, errores o decepciones. El problema es que tu cerebro ha hecho la conexión errónea entre tus rituales y los sentimientos de seguridad y comodidad, sin importar que tan temporales sean. La exposición y la prevención de hacer los rituales puede ayudarte a romper el sofocamiento de los rituales en tu vida diaria.



3. Ya que dicen que no hay cura ¿entonces para que tomarme la molestia de salir de esto?

Esta es la manera de pensar del "todo o nada" de las personas con TOC. Aún un progreso modesto puede hacer una importante diferencia en la calidad de tu vida- y en la de tu familia también.

4. "Ay DraCaroline se oye muy fácil. Sé que no voy a poder. Ya lo he hecho antes con otras terapias y ninguna a funcionado".

No existe tal cosa que sea un fracaso. El único fracaso es no tratar de tener éxito con el programa para manejar este trastorno.

5. "Ya hice terapia comportamental antes, y no me funcionó".


A menudo la persona describe una experiencia previa con "la terapia del comportamiento" que fue en realidad alguna variación de lo que es "la modificiación del comportamiento", hipnosis, entrenamiento de relajación, desensibilización sistématica, visualización creativa o cualquier otro número de técnicas, todoas las cuales tienen poca o nada de efectividad con el trastorno obsesivo compulsivo.

Seguiré en otra entrada más adelante respondiendo las preguntas pendientes acerca de este tema.

Dios me los guarde y bendiga, les mando un caluroso abrazo
su amiga del alma
DraCaroline
Si tiene el infortunio de padecer un TOC (Trastorno obsesivo compulsivo) lo siento por usted porque su sufrimiento es considerable además de lo limitador e incapacitante que resulta y de la energía que roba. Probablemente tendrá que medicarse si el trastorno es elevado en cuanto a intensidad para paliar su ansiedad. Es quizás el trastorno psicológico más resistente al cambio y más esquivo a su control.
Pero no escribo esto para desanimarle sino muy al contrario para ayudarle aunque el espacio sea breve. Lo que usted desearía es que tanto la medicación como cualquier otra terapia le ayudase no sólo a controlar sus síntomas o a neutralizarlos sino a entender y erradicar el problema yendo a su raiz. La raiz sin embargo dista mucho de ser conocida y soy de los convencidos de que alguna alteración neuroquímica está detrás del TOC. Sea de ello lo que fuera hay que distinguir entre dos partes. La parte cognitiva o de los pensamientos obsesivos recurrentes, intrusivos e invasivos y la parte de los comportamientos que el paciente se ve impulsado a realizar para quedar tranquilo.
Esos comportamientos, también llamados ritos, en el lenguaje coloquial es lo que se conoce como compulsiones en el lenguaje técnico, como lavarse las manos repetidamente, comprobar veinte veces la llave del gas, tocar no sé que objetos para que a la familia no le pase nada o santiguarse tres veces antes de salir de casa. Dicho esto, aunque no sea suficiente dominar esos comportamientos, no queda más remedio que tratar de reducirlos en un primer momento y extinguirlos, lo que sería ideal aunque muy hipotetico. Tenga en cuenta que las compulsiones o ritos que realiza no son sino el intento de reducir su ansiedad, de liberarse de ella o al menos de quedar más tranquilo. Y eso aparentemente se consigue pero cuanto más los practica más crece la ansiedad y uno queda más esclavo de los mismos.
Por lo tanto es necesario cuanto antes proponerse reducirlos de forma contundente el mayor número de veces que se pueda. Con esa intervención de modificación de esas conductas, no estará conseguido el control del problema pero sí un gran avances al verse liberado cuanto más logre reducir esa frecuencia. Además de lograr más tiempo disponible para otros menesteres. Deje de hacer los ritos, por decreto, aunque sienta ansiedad. Es un paso pequeño pero un paso necesario antes que someterse al imperio de los implacables ritos o las supersticiones. Esto es sólo una parte. Seguiré con el tema.
http://blogs.elcomerciodigital.com/psicologo-de-cabecera/2010/3/21/trastorno-obsesivo-compulsivo#comments

Toc toc toc... Quien es...? No es nadie...!!! Es un Transtorno Obsesivo Compulsivo




El trastorno obsesivo - compulsivo está catalogado como un trastorno de ansiedad, se caracteriza porque el paciente presenta obsesiones y compulsiones.

Las obsesiones son pensamientos, imágenes e impulsos que continuamente están causando malestar a la persona; y giran en torno a:
• Cuestiones sexuales.
• Contaminación por gérmenes.
• Hacer daño.
• Temor al castigo de Dios.
• Temor a realizar acciones relacionadas al diablo o Satanás.
Otros.

Las compulsiones son acciones que el paciente realiza para calmar la ansiedad que le producen las obsesiones, por ejemplo, las compulsiones más comunes son:

• Lavarse muchas veces las manos al día, o tomarse dos o tres baños diarios.
• Evitar a personas, situaciones, lecturas, y otros.
• Poner las cosas en orden constantemente de una manera exagerada.
• Revisar una y otra vez las puertas, ventanas, llaves de cocinas, cerraduras, etc. para convencerse que estén bien cerradas.

Aunque las obsesiones y compulsiones antes descritas implican la presencia del TOC; no obstante, según la Lic. Isabel Larraburu en su curso: "Trastorno Obsesivo-Compulsivo (TOC)", se requiere de un diagnóstico completo para determinar si puede ser necesario que la persona reciba ayuda profesional.

Otras características del TOC

Algunos pacientes con TOC, también tienen temor a ser homosexuales o lesbianas, o actuar como tales; en el fondo no lo son ni actúan así, son sólo miedos que pueden superar con el tratamiento adecuado del trastorno.

Otros, asimismo, suelen tener dudas acerca de si estarán o no comprometidos con la pareja correcta o ideal; cuando se recuperan estas dudas también desaparecen.

Presencia del TOC

El TOC suele estar presente en la persona desde la niñez; sin embargo, ésta no suele acudir tempranamente a tratarse; en realidad, lo hace generalmente cuando el trastorno se encuentra en un estado crónico; por ello el tratamiento suele demorar cierto tiempo para empezar a hacer efecto.

Trastorno Obsesivo - Compulsivo y depresión

El autor Xavier Conesa, en su curso gratuito: "La depresión: cómo tratarla", publicado en: www.emagister.com describe:

"Trastornos de ansiedad: la depresión crónica acompaña frecuentemente a los trastornos de ansiedad. En un estudio, hasta el 96% de los pacientes con trastorno depresivo experimentaban ansiedad concurrente. Más de dos terceras partes de las personas afectadas de trastorno obsesivo-compulsivo, un trastorno de ansiedad frecuente, sufren también de depresión."

¿Cómo se cura o trata el TOC?

La Lic. Isabel S. Larraburu, en su curso ya mencionado anteriormente, explica:

"Los tratamientos que han demostrado mayor eficacia para el TOC son los farmacológicos y los psicológicos. Pueden ser utilizados por separado o conjuntamente. Esta última opción es la preferible".

En cuanto al tratamiento psicológico se usa la Terapia de Conducta y la más reciente: la Terapia Cognitiva - Conductual.

En la actualidad el TOC no se puede curar completamente, pero con el tratamiento adecuado, el paciente puede vivir sin casi darse cuenta que padece la enfermedad, feliz, pudiendo cumplir los objetivos que se plantee en la vida, etc.

Una realidad frecuente en cuanto al tratamiento del TOC, es que muchos psiquiatras a veces no saben cómo abordarlo correctamente; y mantienen a los pacientes, según mi punto de vista, muchos años adicionales e innecesarios consumiendo medicamentos; he visto casos en este sentido, a quienes finalmente les oriento a tomar el camino correcto en cuanto al tratamiento del trastorno.