Cartas recibidas de familiares de afectados TLP.


http://usuarios.discapnet.es/border/tlpfamil.htm


Se han omitido nombres, párrafos y cuanCartas recibidas de familiares de afectados



Carta 1: Mi hijo TLP (del autor de esta página WEB)
Carta 2: ANONIMO
Carta 3: La vida sin Andrés (enfermo TLP)
Carta 4: Una madre TLP
Carta 5: Desde Chile
Carta 6: La alegría de una Familia
Carta 7: La última Pieza del Rompecabezas
Carta 8: Hermana de un TLP.
Carta 9: Atención a los Cuidadores.




Mi hijo TLP (del autor de esta página WEB)

Hace 15 años vinimos a vivir a esta ciudad. Mi mujer mi hijo y yo. Dejamos familia y recuerdos. Fue muy duro. Desde el comienzo mi hijo tuvo problemas de conducta. En casa, en el colegio, en la calle, en todas partes. Sus compañeros le rechazaban. Su hiperactividad era constante. Era insaciable. Nada lo llenaba. Juguetes, libros, etc. Mi mujer sufría en silencio. Quien mejor que ella sabia que su hijo tenía algo extraño. Yo estaba ciego. Simplemente no podía entender que mi hijo estuviera enfermo. Lo llevamos a varios Psiquiatras y Psicólogos. Cada uno decía algo distinto. Ninguno supo decirnos lo que realmente le pasaba. Llegó su adolescencia. Con ella se manifestó su problema con toda su virulencia. Después de una crisis lo ingresamos en un Hospital. Se le diagnosticó un Trastorno Límite de la Personalidad Border Line. El diagnóstico fue confirmado por otros Médicos. Cuando me lo explicaron me quise morir. El problema era congénito. Había nacido así. No nos pudieron explicar los motivos. Nuestro matrimonio estuvo a punto de romperse. Hoy estamos más unidos que nunca. Nos ha cambiado la vida. Hemos dado la vuelta a todos los valores morales. Lo importante es nuestro hijo. El resto no lo es tanto. En sus momentos de lucidez me pregunta porque no puede ser como los demás. No se qué responderle. He luchado mucho para conseguir un tratamiento y una educación adecuadas para mi hijo. Se que hasta el final de mi vida tendré que seguir luchando por él. No me importa. Dios me ha dado fuerza y voluntad para ello. Mi hijo no puede hacerlo. Yo lo haré por él.



ANONIMO


(Carta anónima a ACAI-TLP, para la revista SIN LIMITE)


Hace años me casé con una persona adorable, muy inteligente y simpática, que parecía dispuesta a compartir incluso mi forma de ver la vida, a pesar de que me avisaron y de que presencié algunas " rarezas", que no parecían ir mucho más allá de lo aparente.

Sin embargo, desde el primer momento de la boda, su comportamiento imprevisible, fue un continuo sufrimiento para mi, persona. Fui por consejo de una amistad a visitar a un psiquiatra, pero me dijo que el problema más bien podía tenerlo mi cónyuge.

Pero ¿como llevar al cónyuge al psiquiatra cuando se encuentra perfectamente bien, goza de buena salud, se divierte, rinde profesionalmente y no manifiesta en absoluto ningún problema exteriormente?. Prácticamente imposible.

Empecé un rosario de consultas, intenté que le hablaran otras personas....todo inútil. A fuerza de abandonos y malos tratos físicos y psicológicos acabé en comisaría varias veces, donde recibí la primera luz. El comisario me dijo: " Lo primero que tienes que averiguar es si se trata de una persona enferma mental, una borderline, o una persona egoísta", porque el cauce que debería dar a los acontecimientos sería distinto. La gente me empujaba a separarme, desde el principio, pero yo quería saber lo que pasaba exactamente, quería saber la verdad, para no actuar injustamente, aunque la convivencia era terrible por falta de diálogo entre otras cosas, ya había hijos por medio y no quería que nadie saliera malparado por una decisión errónea.

Unos dos o tres años después del matrimonio, alguien que conocía bien a mi cónyuge y entendía de medicina me dijo que era la típica persona borderline. Pero entonces no se consideraba una enfermedad, ni se comentaba como causa de una anulación de matrimonio tan clara como pudiera ser una esquizofrenia previa a la boda.

El desconcierto continuo era que esta persona tenía momentos de extraordinaria normalidad y sensatez, combinados con otros llenos de incoherencia y aparente mala educación. Yo no entendía nada, pero intuía que en su comportamiento no había " maldad", aunque tampoco se podía hablar de virtud, ni siquiera de actuar saludablemente. Me sentía atrapado/a. Ni siquiera podía sentir odio.

Por fin un abogado logró que nos pusiéramos en terapia matrimonial y le diagnosticaron un Trastorno Limite de la Personalidad. Yo busqué libros que me hablaran sobre ello pero no encontré más que el de la Sra. Foret. Me asusté mucho porque por un lado no encajaba exactamente con el patrón de esa persona, pero si daba índice de la importancia del problema y de hasta qué punto necesitan ayuda tanto ellos como los que tienen que convivir con esto.

El giro de trescientos sesenta grados se produjo cuando os encontré. Empezar a recibir información, comprender lo que te pasa y le pasa, saber que no eres el único/a, que hay ayudas a tu alcance....no sabéis el alivio que supuso para mí , que incluso pensé que era providencial y que esta asociación había nacido para mí. Doce años de tinieblas empezaban a dejar ver una forma y alguna clase de ayuda.

Gracias por todo. Por vuestro esfuerzo y por existir unidos e investigar como superar el TLP. Gracias por vuestro soporte. Sois fundamentales para los que sufrimos por ello. Poder comunicarse a través de teléfono, la red o la revista es una ayuda muy importante. Gracias por compartir vuestros problemas con los demás para que todos aprendamos y afrontemos mejor las cosas.



La vida sin Andrés (Enfermo TLP)



Hoy Paloma ha tomado la dura decisión de renunciar a vivir con su hijo. En la unidad de adolescentes del Hospital Universitario Psiquiátrico Gregorio Marañón de Madrid, le han dicho que allí su hijo no tiene espacio, no pueden tratarle y "estropea" a los demás. Paloma sabe que con ellos, con sus padres, es como su hijo Andrés no se curará jamás. Ante la imposibilidad de que le acoja ningún centro especializado, Paloma y su marido han acordado ceder la custodia del niño a la Comunidad Autónoma de Madrid. Dolorosa decisión: meditada, masticada, apoyada, después de varias noches en vela y de años de irse encogiendo el corazón y la moral poquito a poco, como el veneno inyectado gota a gota.

Yo también pasé por ese trance y sé lo que siente Paloma, sé como su corazón desgarrado, ahora late débil de tanto cansancio y amargor.

Comprendo su sensación de vacío, de fracaso, de impotencia durante estos años de perplejidad ante la "cara dura" de su hijo. Vivo en mi piel la rabia por la desidia de cuantos facultativos han visto y han tratado a Andrés como un "caso inabordable".

La angustia de Paloma es la mía también; sólo quien ha pasado por ello lo conoce. Cualquier cosa se hace banal comparado con "eso"; nada importa, todo lo invade el problema, todo lo llena.

Y tan angustioso es, que aún siendo el mayor trauma posible en la vida de una mujer (separarse de su hijo), Paloma empezará a respirar a partir de hoy. Comenzará a reponer los cacharros rotos, recuerdos de las crisis de Andrés. Se acostumbrarán a vivir sin continuas amenazas. Podrán dejar un monedero en cualquier sitio de la casa, sin temor a perderlo. La familia se irá acostumbrando a no tener pánico a hablar, previendo la reacción del niño. Desaparecerán los gritos, los insultos, las blasfemias. Se empezará a vislumbrar un hogar, en fin.

Ahora no tienen fuerza para llorar: tan agotados están.

Mañana y con frecuencia después, se les nublarán los ojos pensando en el infierno inmerecido que han vivido estos años. Y como su capacidad de amar no se ha agotado, llorarán doblemente por la triste suerte de Andrés, que tiene que cargar consigo mismo para el resto de sus días.

Mientras la próspera España vive anestesiada con la Operación Triunfo, en muchos rincones de su geografía sufren familias como la de Paloma, preguntándose que hicieron para merecer ésto.

Andrés tiene 14 años y está diagnosticado TLP con rasgos anti-sociales.



Una Madre TLP


Buscando en Internet temas sobre enfermedades mentales encontré su pagina. Trataba de encontrar que podría ser lo que le ocurre a un familiar mío, y creo que el Trastorno Limite de Personalidad encaja totalmente en su problema. Desconozco el diagnostico del psiquiatra que la trata actualmente (hace unos meses), pero anteriormente le habían diagnosticado depresión y trastorno maniaco depresivo. Le daré mas datos: es mujer, esta casada y actualmente tiene una niña pequeña. Lleva mal desde los 18 años: depresión, anorexia, abandono de estudios... De niña se crió en un ambiente de peleas, gritos... su madre es una mujer fría, dura, maltrato física y psíquicamente a sus hijos, creo que jamás quiso a su marido... Eso si, ella era la niña mimada de la casa, se caso con un hombre muy paciente y comprensivo. Las crisis siguieron a pesar de salir de la casa de sus padres. Intento suicidarse y estuvo en coma una semana por ingestión de pastillas. Iba a peor. Había que vigilarla constantemente. Entonces se quedo embarazada y todo fue peor aun. Fue por un error. Ella no quería tenerlo. Se golpeaba la barriga, no comía, no dormía, era un esqueleto sin apenas barriga, decía que quería abortar pero el marido no la dejo. La niña nació con poco mas de un kilo de peso.

Tiene unos sentimientos hacia su hija como hacia su marido o su madre: una mezcla de amor y odio, así me lo dijo ella. A veces es cariñosa con ella, pero otras amenaza con matarla, ya ha llegado a pegarle a la niña y si no la agarran no se que hubiera pasado, la mayor parte del tiempo pasa de ella, el marido tiene dinero y tiene mujeres que se la cuidan y se la sacan a pasear (ella casi nunca sale). Yo he hablado con ella y dice que se siente una mierda, que solo quiere matarse pero que no la dejan. Además siempre esta enferma, tiene muchos problemas físicos que probablemente sean secuelas de su mala alimentación (apenas come). Siempre esta culpando a su madre de todo lo que le pasa. Con su madre y con su marido llega a ser violenta, ha llegado a amenazar a su madre con matarla. Tiene unas crisis cíclicas, unos días bien (sale a dar paseos, cuida a su hija...), vuelta a la depresión (todo el día en cama), y lo peor las crisis: odia a la niña, quiere que se la lleven, rompe cosas, amenaza...

Sin embargo no esta loca, cuando esta bien puede llegar a ser una persona bastante agradable. Ella lo que quiere es ser el centro de atención, que la cuiden, que la mimen, que se preocupen por ella (hay que darle de comer, bañarla,... tiene una mujer que la cuida
a ella y otra que se ocupa de la niña mientras el marido no esta). Tiene unos celos terribles de la hija, no soporta que le regalen cosas, que la mimen. Esa niña esta en un ambiente muy perjudicial para ella, temo por su salud mental y física. De hecho, el psiquiatra que la esta tratando le ha dicho al marido que saque a la niña de allí, que corre peligro. El motivo de mi carta es pedirle consejo con respecto a mi familiar y respecto a la niña, si realmente lo que tiene es TLP, y consejo también sobre la niña, sobre si esta bien que me la quede yo, si esto debería ser permanente, si podría curarse, si la niña podría haber heredado lo que tiene su madre...

Agradecería su ayuda, por mi, por su madre y su marido, y por esa niña que no tiene culpa de nada y no tiene una verdadera madre y que en vez de recibir mimos ha recibido de ella un guantazo y palabras como "te voy a tirar por la ventana" o "te voy a estrellar contra la pared" o "no quiero verla, quítamela de aquí", menos mal que aun no entiende.


Desde Chile

Soy chilena, tengo una hija de 19 años a quien le diagnosticaron TLP, después de años de deambular por diferentes psicólogos y psiquiatras.

Gracias a tu página pude realmente asumir y entender a una persona TLP, entender de alguna manera la forma de ser de mi hija, ya que antes no entraban en mi cabeza sus actitudes, lo que produjo una serie de peleas, gritos, llantos, desconcierto y creer que ella lo podía manejar y que era falta de esfuerzo por parte de ella.

Bueno, como mujer, después de haber llorado hasta cansarme por la pena que me produjo asumir lo que es mi hija, como sufre ella sobretodo y el duro futuro que nos espera, aquí estoy con las pilas puestas para hacer lo que sea para salir adelante con ella nuestra familia. Estamos en mi familia como dice el titulo de un libro.. "pisando huevos o conchas", estoy buscando un psicólogo, pero aquí en Chile, no hay una Asociación, nada, y te escribo para saber si tienes un dato anexo... Mi hija no es border extrema, todavía me obedece y sus crisis fuertes no son muy seguidas, pero necesito saber como tratarla, manejarla... sin presionarla pero a la vez darle o tratarle de entregar ciertos patrones, porque supongo no porque sea border voy dejarla hacer lo que quiera sin control tampoco, debo ponerle pautas, limites... no se. Te darás cuenta que estoy hecha un rollo. Si pudieras, te agradecería unas líneas de consejo o apoyo en lo que puedas. Gracias.



La alegría de una Familia.


Carta recibida de la madre de una afectada TLP, ingresada sin aparente solución en una residencia con otros enfermos mentales.



Estimado Luis: Gracias por la información sobre la conferencia. Yo no pude ir, lo sentí mucho, sería bueno que el Dr. Rubio nos diera una conferencia. A ver si lo conseguimos. Mi hija tiene un diagnóstico de TLP está hospitalizada en una Residencia. Está cada vez peor, deteriorándose un poco cada día y ¿sabes Luis? no puedo hacer nada. En la unidad donde ella está hay muchos enfermos con múltiples diagnósticos y mi hija no está recibiendo la terapia adecuada. Estoy hundida Luis, pero sé que remontaré, seguiré luchando por mi hija tengo que conseguirlo, ella se merece una mejor calidad de vida. Gracias por escucharme y si se te ocurre algo bueno dímelo por favor Un saludo.



Nueva carta recibida de la madre de la afectada TLP anterior, tras un ingreso de varias semanas en la unidad TLP de Málaga.



Hola Luis: Hace mucho que no te doy la lata, pero acabo de llegar de Málaga y quiero contarte mis impresiones sobre el viaje. Bueno mi hija está mucho mejor, no te imaginas lo que ha sido para mi verla este fin de semana, alegre y con ganas de hacer cosas. Fuimos al cine juntas paseamos por Málaga a pesar de la lluvia, cenamos, como dos buenas amigas Luis, yo casi no me lo puedo creer.!El centro está muy bien, rodeado de jardines, y las habitaciones son amplias y con mucha luz..Tienen una cafetería, y amplios salones donde imparten las terapias. No he conocido a Soledad Santiago. Los facultativos con los que ayer tuve la entrevista, pues son los que estudian el caso de mi hija...Luis dicen que es recuperable yo no quiero tirar cohetes, pero lo que está claro es que mi hija no había estado tan bien desde hace mucho tiempo. Luis ¡esto marcha! tenemos que seguir luchando para conseguir mas centros de estas características. Gracias por todo, que Dios os bendiga.



La última Pieza del Rompecabezas



Ojalá la existencia de esta enfermedad tuviese más difusión para que la gente pueda detectarla a tiempo. Millones de gracias y que Dios bendiga al creador de la página.

GRACIAS!!!

Es la única palabra que puede describir lo que sentí al encontrar esta página...alivio.....tranquilidad...... Es como haber encontrado la última pieza del rompecabezas .....

Hace 11 años que estoy casada ......hace 11 años que me vida es un calvario....tengo 3 hijos y todo ha sido siempre muy difícil....me case muy enamorada de mi marido, quizás porque las locuras que hacía por mi me parecían maravillosas......pero eso se volvió en mi contra, desconocía que existía este trastorno de la personalidad y aunque tuve aún desde el comienzos motivos para pensar que algo no estaba bien seguía siempre adelante porque lo amo y por mis fuertes convicciones religiosas....pero confieso que he sufrido horrores

Si me pusiera a contar los desastres que he vivido y que aún padezco tendría que escribir un libro....he terminado haciendo yo años de terapia al pensar que el problema era yo y que todas las cosas hirientes que él me decía eran ciertas y que me las merecía. He sufrido muchos episodios de violencia aunque sin llegar a los golpes, pero hay palabras que golpean tan fuerte en el alma que son casi imposibles de distinguir de un gran puñetazo en el ojo.....

Ya no sé qué hacer. este hombre nos ha llevado a la ruina total, entregué mis bienes para que él los administrara, obviamente sin saber de su enfermedad y hemos perdido todo. Incluso me encuentro denunciada. Jamás me dejó saber qué hacía porque cada vez que le preguntaba se ponía desmedidamente agresivo y yo prefería dejar las cosas así. Más de una vez "huí" de vacaciones lejos de él para respirar. tengo miedo de que mi hija tenga el mismo problema.

Él tiene dos hijos anteriores al matrimonio, con distintas madres, y su hija, la mayor, sufre del mismo trastorno, también es border.....

El ya tiene 43 años ....todo el mundo dice "es un niño-grande" y aún no ha sido diagnosticado....se resiste mucho a ir al médico y en crisis emocionales muy fuertes tiene convulsiones y es por ese
motivo que ha recibido medicación. Quisiera saber si esto algún día se terminará. si debo seguir adelante.....si debo terminar con este matrimonio para salvarme y salvar a los niños.....Me casé con él a los 19 años y hoy tengo 30....no sé lo que es vivir paz.

De todos modos, desde que leí la página ya no me siento culpable de todos sus enojos, ni me duelen tanto sus ofensas. ahora sé que es una persona Borderline.

Ojalá mucho tiempo antes hubiera sabido de esto para saber enfrentarlo. Mi dilema ahora es cómo hacer para que él sepa que está enfermo y que esa enfermedad tiene un nombre, un tratamiento. Tengo miedo sugerírselo yo porque temo que no me va a creer ¿qué debo hacer?....

Ya hablé algo con su psiquiatra y me pidió que lo acompañe a él a la próxima entrevista. en fin...¿qué me aconsejan? Quisiera saber si hay alguna forma judicial de obligarlo a realizar el tratamiento y que deje de ejercer violencia familiar y administrar nuestros bienes

Nuevamente GRACIAS!!!!! HAN CAMBIADO MI VIDA.


HERMANA DE UN TLP


El autor de esta página WEB desea resaltar el gran problema que supone la convivencia del enfermo con la familia. El hecho de que los padres puedan asumir la enfermedad no quiere decir que el resto de la familia comparta también este punto de vista. La siguiente carta viene a confirmar que una enfermedad TLP afecta gravemente y sin excepción a toda la familia.


Soy hermana de un TLP. Ahora lo sé. Antes era hermana de un desalmado sin sentimientos cuyo único objetivo en la vida era
maltratarnos.

Tras muchos años sin saber qué hacer ni cómo afrontarlo, tras una huida desesperada del hogar familiar y una depresión que desestabilizó mi existencia hasta un punto que nadie ajeno a la enfermedad entenderá nunca, tras una lucha frenética por escapar de un entorno que me tragaba y anulaba, creo que ha llegado el momento de ofrecerle a mi hermano una ayuda que le permita, ¡qué menos¡, vivir todo lo dignamente que pueda. No creo necesario contar lo que ha tenido que pasar mi madre. Todos lo sabemos. Ella es la auténtica heroína de esta historia. Estoy convencida de que la única manera de abordar esta nueva etapa de la lucha es de la mano de gente que haya pasado por lo mismo. Por ello os escribo, para ver de qué forma podemos asociarnos a alguna de las asociaciones y recibir más información. No quiero extenderme mucho.

Gracias por todo, y felicidades por la página. Es un salvavidas.



ATENCIÓN A LOS CUIDADORES


Hemos recibido esta angustiosa carta de una familia que simplemente no puede más. Tras omitir cuantos detalles puedan servir para identificarles hemos decidido publicarla en nuestra WEB. De su lectura podemos deducir que una intervención a tiempo en su infancia hubiera podido evitar males mayores. Desgraciadamente hace 40 años, (que es la edad del afectado), nadie hubiera podido ayudarle, la vida del enfermo esta destrozada y lo ha perdido todo. Hoy si, y por ello nuestras Asociaciones están reivindicando hasta la saciedad la realización de pruebas diagnósticas a edades tempranas. El otro gran problema que podemos ver en esta carta y que también estamos reivindicando, es la atención al cuidador mediante programas domiciliarios de respiro y el ingreso del afectado en unidades de rehabilitación psiquiátrica de media estancia, tras el ingreso de urgencia. No es de recibo que la sanidad pública permita en pleno siglo XXI, que se produzcan casos como el expuesto en esta carta.


Soy un familiar afectado, tengo un hermano con un trastorno de la personalidad, que todavía ningún médico psiquiatra ha diagnosticado qué clase de trastorno tiene. Estamos a la espera de su diagnóstico. Mi hermano creo que se trata de un TLP, después de haber leído la página Web de ustedes, completa, lo he visto reflejado en todas y cada una de las características de esta enfermedad. No ha habido ninguna que no cumpla, que haya hecho o haya creado él a lo largo de su vida.

En estos momentos, después de haberse separado de él su familia, estamos manteniéndole tres hermanos más y yo. Le recogimos después de haber estado indigente durante una semana. Lo ha perdido todo, además de que la familia ya hacía tiempo que no quería saber nada de él por lo problemático que ha sido siempre, ha perdido un puesto fijo laboral en el cual estuvo trabajando 17 años, hasta que hace pocos años, lo despidieron .

Cuando lo recogimos sabíamos a lo que nos exponíamos, se tomaba al día 3 cajas de medicamentos, además de que en bastantes ocasiones abusaba del alcohol y llegaba completamente borracho a su casa. Inmediatamente lo pusimos en manos de una Dra. psiquiatra de la S.S. del municipio donde resido, y estamos a la espera de su diagnóstico, por supuesto que ella le pidió hacerse un análisis para ver qué grado tenía de dependencia toxicológica, además de la dependencia psíquica que ya adquirido a lo largo de su vida (empezó aproximadamente a tomar fármacos fuertes o drogas blandas y alcohol a los 16 años, a partir de los 20 ó 22 años tuvo varios intentos de suicidio con abuso de pastillas, aunque todos ellos fueron sólo para llamar la atención, ninguno fue queriendo quitarse la vida. Ya en su infancia fue un niño hiperactivo, muy rebelde y problemático).

Mientras estamos a la espera de ese diagnóstico, han transcurrido ya dos meses, y los hermanos que estamos apoyándolo y cuidándolo empezamos ya a pensar que esta situación no vamos a poder aguantarla por mucho más tiempo, ya que como muy bien explican Uds., su carácter hace que la convivencia no se desarrolle tranquila y con normalidad si se está con él, por lo que actualmente, mi marido y yo estamos también en tratamiento psiquiátrico con la misma Dra., ya que esta situación nos hace pasar verdaderos momentos de angustia y de no saber qué hacer y cómo comportarnos con él, y nos encontramos también en un estado de ansiedad al mismo tiempo que debemos acudir a nuestros trabajos cada día e intentar ayudarle a él en lo que podamos dentro de nuestros pocos conocimientos al respecto.

Con esta carta, es mi deseo expresarles mi sentimiento de confusión y de impotencia ,al ver que si dejo a mi hermano a su libre albedrío, va a volver a quedarse en la calle, y al mismo tiempo, si no dejo de cuidarle mi marido y yo podemos enfermar más de lo que ya estamos.

Por lo que les ruego, si pueden darme algún consejo para poder llevar mejor este mal trago que estamos pasando, lo hagan lo antes posible, Atentamente, y con cariño a todos Ustedes, un abrazo