¿Qué espera la vida de ti?



¿Qué espera la vida de ti?
Siempre estamos pidiendo a la vida. Pedimos más suerte, más dinero, más bienestar, más salud, más éxito, o menos arrugas, menos kilos, menos problemas. Siempre pidiendo. También pedimos a los demás más cariño, más atención, que nos escuchen, que nos respeten, que nos promocionen en la empresa, que nos paguen más dinero, y así sin cansarnos de pedir y pedir. Lo hacemos casi inconscientemente como si tuviéramos el derecho de pedir todo lo que necesitamos, o todo lo que creemos que necesitamos.

Sin embargo, nunca nos hemos hecho la pregunta a la inversa: ¿Qué nos pide la vida a nosotros? Esta pregunta seguramente nos sorprenderá, porque contiene un mensaje bastante inusual en nuestra sociedad: el mensaje de asumir nuestra responsabilidad para responder adecuadamente ante las circunstancias que nos pone la vida a cada momento. ¿Estamos a la altura? ¿Cómo respondemos ante la petición silenciosa y aparentemente inexistente de la vida? La mayoría de las personas responde con quejas y lamentos constantes, contemplándose a sí mismos como víctimas de las circunstancias y de la mala vida que les ha tocado vivir. Otros simplemente no responden, para ellos no existe la responsabilidad de dirigir correctamente su vida, sólo piensan en procurarse más placer y bienestar, olvidándose de los demás.

Aunque no queramos oirlo, la vida nos está pidiendo siempre algo: a veces es que dejemos de quejarnos y de hacernos las víctimas y empecemos a construir nuestra vida de forma responsable, otras nos pide que aceptemos el sufrimiento y que aprovechemos la oportunidad de crecimiento que nos ofrece, otras veces simplemente nos pide que esperemos.

El reto es estar muy atento a esta petición constante. Darnos cuenta de esto es especialmente importante en los momentos de crisis, en las situaciones en las que nos sintamos desorientados y perdidos, en momentos de dolor y sufrimiento. Víctor Frankl, el famoso psiquiatra superviviente de los campos de concentración nazis, dijo: “En realidad no importa que no esperemos nada de la vida, sino que la vida espere algo de nosotros”. Y siempre la vida espera algo de nosotros, te lo aseguro. Siempre esperará que saquemos lo mejor que tenemos dentro, siempre esperará de nosotros que nos reinventemos, que demos un valiente giro a nuestro destino, que nos superemos a nosotros mismos, que nos desafiemos constantemente, que lleguemos a lugares donde nunca imaginábamos que podríamos llegar.
En última instancia, siempre se nos pide que busquemos el sentido de lo que estamos viviendo en cada instante. Porque incluso en unas condiciones tan inhumanas y terribles como las que sufrieron los prisioneros de los campos nazis, hubo personas que encontraron un sentido a ese sufrimiento aparentemente sin sentido. Por eso, no digas que tu vida no tiene sentido, decir eso debería avergonzarte, teniendo en cuenta en qué condiciones viven millones de personas en nuestro planeta. El problema es que te instales en el victimismo y la desesperación, y no quieras comprometerte a buscar ese sentido. Siempre habrá un sentido, pase lo que pase en tu vida. De hecho, todo lo que te sucede ahora mismo y lo que te ha sucedido en el pasado tiene un sentido más elevado.

Porque como dice Frankl, siempre a todo ser humano le queda una última libertad, que nada ni nadie se la puede arrebatar: la libertad de decidir quién quiere ser –espiritual y mentalmente-, la libertad de decidir qué actitud va a tomar ante las experiencias y situaciones de la vida, porque incluso en las peores circunstancias somos capaces de conservar la dignidad de seguir sintiendo como un ser humano.

Y ahora te pregunto a ti: ¿Qué es lo que espera la vida de ti en este momento? ¿Estás dispuesto/a a estar a la altura de esa petición?
JAVIER CARRIL. Coach. Visita mi web: http://www.zencoaching.es/