Trastorno obsesivo compulsivo: una mirada psicoanalítica



Obsesiones que imposibilitan las acciones de todos los días
Piense ¿cómo sería su vida si no pudiese tocar un picaporte, un timbre, las teclas de una computadora o de un teléfono por temor a los microbios? o ¿cómo haría si no pudiese sentarse en la misma silla que lo hizo otra persona? Quienes padecen estos trastornos obsesivos compulsivos no pueden desarrollar su vida con normalidad. El psicoanálisis propone indagar las causas inconscientes que generan estos síntomas.


Un hombre entra a un baño de un restaurante. Se lava las manos frenéticamente durante unos cuantos minutos. Se las refriega con tanta fuerza que llega a lastimarse. Cuando termina, toma el jabón con un papel y lo tira a la basura porque piensa que como ya fue usado puede tener bacterias. Se dirige a la puerta, pero no puede abrirla, algo le impide tocar el picaporte. Su cara transmite impotencia y angustia. Espera que una persona entre al baño, aprovecha la puerta entreabierta y sale.

Esta escena es de la película "El aviador" y grafica qué es un trastorno obsesivo compulsivo (TOC). Quienes lo padecen tienen pensamientos recurrentes y desagradables (obsesiones) y se sienten obligados a llevar a cabo ciertos actos una y otra vez (compulsiones). Generalmente, reconocen que estas obsesiones y compulsiones son irracionales, pero no pueden evitarlas y esto les produce angustia.

"Lavarse las manos reiteradas veces por temor al contagio llega a ser tan invalidante para una persona que le produce trabas para vivir. No puede abrir una puerta porque el picaporte podría haber sido tocado una persona que podría tener una enfermedad, entonces tiene que abrirla con el codo o con guantes. Otras personas no pueden sentarse en el mismo lugar que otra, como un taxi o un colectivo, por el mismo temor a contraer alguna enfermedad", detalla el psicoanalista Carlos Giusti.
Complejidad

El TOC puede ser clasificado dentro del grupo de los desórdenes de ansiedad. Quien lo padece es consciente de que tiene un problema y sus allegados también lo perciben. En algunos casos, las compulsiones llegan a ser inhabilitantes, impidiéndole realizar acciones con normalidad. La Organización Mundial de la Salud (OMS) incluye al TOC entre las 20 primeras enfermedades discapacitantes, que afecta al 2 % de la población.

Según Giusti, la denominación trastorno obsesivo compulsivo (TOC) "es una manera de simplificar la complejidad del ser humano". "El TOC no deja de ser una manera de designar lo que para la psiquiatría del siglo XIX era la neurosis obsesiva. La psiquiatría tradicional y el psiconanálisis siguen hablando de la neurosis obsesiva, un tipo de estructura de un sujeto que puede tener diversos síntomas o trastornos, como las ideas obsesivas y los actos compulsivos". El psicoanálisis apunta a desentrañar la causa de esos síntomas.
Temores

Entre las ideas obsesivas más comunes, Giusti señala las relacionadas con las enfermedades y la muerte. "Son muy comunes las ideas de un cáncer o la muerte de sí mismo o de otros. Son ideas insistentes que expresan algo inconsciente".
http://www.ellitoral.com/index.php/diarios/2008/10/14/metropolitanas/AREA-04.html
Para evitar estos malos pensamientos, la persona realiza una serie de acciones, en forma de ritual. "Ante la idea de que uno o un familiar se puede morir, la persona lleva a cabo acciones irracionales para que no se produzca lo que pensó".

Contar los escalones cada vez que se sube o baja una escalera, no pisar las líneas de las baldosas, leer cada uno de los carteles que se encuentran en la calle pueden ser algunos de los rituales compulsivos, que las personas que sufren TOC tienen que realizar (en realidad, no pueden dejar de hacerlo) para evitar males como enfermedades o muertes.
¿Nuevas patologías?

Consultado acerca de si este trastorno es más frecuente en la actualidad, el psicoanalista reflexiona: "Los medios de comunicación favorecen la circulación de determinadas denominaciones como TOC, ataque de pánico, trastornos bipolares, etc., pero siempre han existido. Esta difusión hace que las personas se autorreconozcan como padeciendo determinado síntoma".

Si bien sostiene que no son patologías nuevas, considera que manifiestan "la exclusión de la significación". "En nuestra cultura, hay un rechazo de lo simbólico, la palabra y el lazo entre los sujetos, entonces pueden prevalecer ciertas manifestaciones en lo real, en los actos. Por ejemplo en la bulimia, la anorexia, las adicciones y los trastornos psicosomáticos la significación está apartada del sujeto".

En este sentido, asegura que las personas ven a estos síntomas "como un virus y no como una pregunta que el sujeto se tiene que hacer: ¿por qué me pasa esto?". Responderla es un "proceso de descubrimiento", que requiere de la ayuda del analista.
Tratamiento

El tratamiento para el TOC depende de la corriente psicológica a la que uno adscriba. Se pueden realizar terapias conductivas o psicoanalíticas. En algunos casos es necesario complementarlas con un tratamiento farmacológico, siempre bajo el seguimiento de un psiquiatra.

Por su parte, Giusti desconfía de las terapias conductistas. "Ciertas técnicas pueden contribuir, pero no creo que sea ni fácil ni general, porque se trata de problemas que se le han impuesto a una persona de manera insistente y virulenta. Si ese síntoma se tapa, inevitablemente producirá alguna otra manifestación; es como ponerle la tapa a una olla hirviendo. El taponamiento del síntoma no implica la resolución del problema que lo ha producido", explica.

En este sentido, advierte que si una persona ha construido inconscientemente algo tan limitante, también puede ser un riesgo tapar eso, sin desentrañar qué fue lo que lo motivó. "Son síntomas que están representando algo inconsciente, entonces lo que se juega es un deseo reprimido. Un síntoma es una transacción: algo se reprime y algo retorna indirectamente. El psicoanálisis trata de ir descifrando y ver esa verdad que subyace en el síntoma". En este sentido, la cura pasa por hacer consciente lo inconsciente, que es un proceso que realiza el sujeto, a través del análisis.