AMATISTA



Ya no soy una víctima de las circunstancias. Ni siquiera la víctima de otras víctimas. He decidido ser activa y responsable. Si hay que luchar, saldré a luchar. Si lucho y pierdo, volveré a luchar; si lucho y muero, seré un cadáver, pero nunca más una víctima.
Aunque esté enferma, aunque esté presa; mientras tenga conciencia, mantendré mi capacidad de elegir y de comprometerme. Ya no soy una víctima, ahora soy responsable de mi vida...