Los Paradigmas del TOC (Trastorno Obsesivo Compulsivo)



Los rituales han ocupado un lugar importante a lo largo de la evolución humana, donde culturas primitivas creían innegablemente que una fuerza sobrenatural infundía sobre ellos. En base a este fantástico y errado concepto, el hombre empieza generar creencias y supersticiones; supuestas y mágicas verdades.

Los paradigmas entran en escena en la vida humana cuando empezamos a crear modelos mentales, acerca de cómo funciona el mundo en base a nuestras propias o ajenas experiencias. Los paradigmas son verdades que todo mundo acepta, como por ejemplo, en la antigüedad se creía que la tierra era plana, las mujeres son el sexo débil y deben de ser amas de casa, el amor duele, el trabajo tiene que ser tedioso, tienes que enfocarte en tus debilidades y no en tus virtudes, eres un egoísta si no te preocupas prioritariamente en tu bienestar, etc.

Recreemos mentalmente la siguiente esta escena: la abuela con su nieta, ambas en la cocina preparando la cena, la nieta por descuido deja caer la sal al piso, la abuela la mira aterrorizada y gritando le pide a su consternada nieta limpie eso inmediatamente, porque; en una creencia antigua y mágica a ella su madre le dijo de la misma manera que hace con su nieta, que dejar caer la sal era atrayente de mala suerte.

El TOC no aparece de la nada, nos lo implantan a lo largo de nuestra vida. La nieta de tan solo 8 años de edad, atemorizada, más por la actitud de su abuela que por el hecho en sí, limpia rápidamente la sal, y lanza unos cuantos granos de sal tomando una pisca con su pequeños dedos, y los lanza hacia atrás, porque según la abuela eso dejaría atrás esa mala suerte adquirida. ¿Que la sal es de mala suerte? ¿De dónde nació este paradigma? ¿Porque lo dicen algunos, tiene que ser cierto? En la antigüedad la sal era un forma de pago para los obreros de ahí viene la palabra “SALARIO”.

La sal ha sido sal y será de vital importancia en la salud humana además de ser un realzador de sabores, un ingrediente infaltable en la cocina. En la antigüedad tal vez se considera de mala suerte tirar la sal porque para ellos eso valía dinero pero en la actualidad creo que las únicas razones para considerarse de mala suerte sean, que si tiras la sal; alguien este debajo, o si no tienes más sal en la cocina. La gente crea rituales contantemente, a fin de programar su vida, porque así le evitan el esfuerzo de tener que pensar en algo nuevamente o por primera vez. Mi nombre es Luis Fernández tenía TOC, y digo que tenía no porque ya no esté en mi vida, sino que hoy simplemente le perdí miedo que antes le tenía.

Al principio el TOC aparece en base a mitos populares: No pasar debajo de la escalera, no echar sal al piso, levantarse con el pie derecho, alejarse de los gatos negros, no abrir un paraguas dentro de la casa, etc. Pero luego, esos mitos populares se vuelven más elaborados, dando origen a otros más difíciles de realizar; cuando venga ese pensamiento a mi mente, repetiré ocho vece la palabra “bienestar”. Esos nuevos mitos empezaron a volverse en mí; un paradigma, pero era algo que solo yo hacía y aceptaba como verdad, por lo tanto se volvió mi locura.

La cura al TOC, consiste en una terapia cognitivo conductual: Lo primero: “Entender el TOC” Lo segundo: “Empezar actuar como si no lo tuvieras” Quieres saber más, espera el próximo artículo.

Atte, Alexander Rodríguez Guzmán Autor del libro

“TOC, TOC, TOC, – Una historia, una solución”