despersonalizacion


En la bibliografía varios clínicos citan ejemplos de pacientes que presentan diversas variables y grados de despersonalización- desrealización. Sin embargo, he optado por citar un breve fragmento de una novela del escritor húngaro Sandor Marai, “Divorcio en Buda”, editado en el 2002. Uno de los personajes de ésta novela (el Sr Greiner) describe sus sensaciones de esta manera: “en este momento pienso que nada tiene sentido. Miro a mi alrededor. Todo me resulta conocido, todo está perfectamente ordenado, en su sitio exacto, situado en el tiempo y en el espacio: ésta es mi casa, mi nombre figura en la puerta, mi dirección y mi número de teléfono están en la guía, estos son mis muebles, en esa habitación está descansando mi querida Anna. (...) Todo está bien y, sin embargo,, así todo junto carece de sentido. No sé como explicarlo. No lo comprendo ni yo mismo. Qué sentido tiene todo? Bueno, quizá no deba tener un sentido determinado. Es la realidad, sí

Pero entonces, qué ha ocurrido?, Salgo al recibidor, en el perchero está mi abrigo tal como lo ha colgado la criada, en la pared está el grabado con la vista de Oxford y al lado, el barómetro con la figurita del señor con paraguas y la señora con sombrilla. Ahora es el señor quien está en primer plano. Sí, sigue lloviendo. Vuelvo dentro, me gustaría despertar a Anna, más qué podría decirle? No obstante, siento que debería aclarar algo antes de que lleguen mis pacientes. En este estado no puedo trabajar, no me encuentro capaz de curar, ni siquiera de vivir. Miro la lámpara y la enciendo pensando que quizás me faltaba la luz, ya está encendida, ya hay luz, así todo adquirirá sentido. Pero la luz no ha servido de nada. Me pongo de pie de un salto, me llevo las manos al pecho, seguramente estoy muy pálido. Me invade un miedo terrible. Tengo la sensación de que ha ocurrido algo. La sensación? No, se con certeza absoluta que ha ocurrido algo.”


El señor Greiner describe la sensación de no ser uno exactamente el mismo, de que algo diferente ocurre y no puede explicarse. La desrealización consiste en producir una sensación de que las situaciones son irreales o que se vive dentro de un sueños. Greiner experimenta un alejamiento emocional de su propio entorno y sus propios actos. Sin embargo esta disminución emocional es paradojalmente asociada a un sentimiento angustioso de que “algo no está bien”.


Por último es interesante citar un material clínico aportado por Rosenfeld en 1947 (pág 20) acerca de una paciente llamada Matilde quien describe su experiencia de despersonalización como “una manta que la separa del mundo”, sintiéndose muerta y separada de sí misma. Para Rosenfeld (1947. pág 21), este estado parte de defensas contra sentimientos de “culpa, depresión y persecución”. Para este autor, la despersonalización es un proceso esquizoide que afecta la estructura del yo, causando diferentes grados de disociación. Ésta posición fue mantenida previamente por Melanie Kein, quien en 1946 ya había planteado que en la despersonalización se produce una regresión a la posición esquizoparanoide.